Los zumos siempre han estado presentes en la alimentación y es indudable el apoyo que ofrecen para lograr una dieta balanceada gracias a que te permiten incluir las frutas y otros alimentos de suma importancia en la nutrición. Los niños son el grupo más beneficiado debido a que se emplean mucho en sus comidas y sobre todo en sus desayunos. De allí que resulte necesario conocer todo sobre ellos y así poder lograr tomar las mejores decisiones referentes a las bebidas con las cuales alimentamos a los más pequeños de la casa y que evidentemente también consumimos los adultos.
La OCU en su destacado rol protagónico de ayuda y colaboración para todos los consumidores ha logrado darnos su opinión y ha desarrollado un estudio donde se analizan a fondo los zumos para niños, una información de muchísimo interés para conocer al detalle todo lo relacionado con estas bebidas ya sean zumos naturales o de procedencia comercial y que sin lugar a dudas son las grandes protagonistas y las preferidas de las loncheras y las acompañantes perfectas para las comidas de los infantes.
Análisis de la OCU sobre los zumos para niños
Concentrados, con lácteos, néctares, exprimidos y muchas otras variables son posibles cuando de zumos se trata. Esta amplia variedad es posible que genere cierta confusión y hasta miedo en los padres al momento de llevar a cabo una escogencia. Pero despreocúpate porque a continuación conocerás todo lo que necesitas saber sobre ellos y así ofrecer la mejor opción a tus hijos.
Nunca iguales al zumo con la fruta
Aunque el zumo es el derivado directo de la pulpa de la fruta involucrada en su elaboración, es un error tratar de igualarlos, primeramente en el proceso de extracción del zumo se pierden nutrientes y fibra, y por consiguiente se elevan los niveles de azúcares. Un ejemplo rápido radica en que para disfrutar de un vaso de zumo de naranja necesitaras de al menos 3 naranjas, lo que te indica que la ingesta de azúcares será proporcional a estas 3 unidades.
La presencia de fibra es casi nula porque ha logrado quedar capturada o estancada en la pulpa de la fruta y el azúcar vagara libremente, permitiendo que los casos de picos de glicemia sean mucho más frecuentes, lo que agrava y aumenta la incidencia de la diabetes a futuro. La OCU ha analizado 97 tipos de zumos envasados (15 marcas variadas) individualmente y que representan a los más habituales en el consumo de los niños. Veamos los resultados obtenidos de este análisis con sabores diferentes (manzana, piña, uva, naranja) y en establecimientos variados (Alcampo, Ahorramas, Dia, Mercadona, Aldi, Lidl, Carrefour)
La correcta categorización de los zumos infantiles
Para garantizar la máxima precisión en los resultados, el equipo técnico y científico de la OCU ha decidido generar 5 categorías, unas con muy buenos aportes y que evidentemente pueden considerarse como verdaderos zumos y otras que simplemente son solo un refresco con algo de sabor a frutas.
1. Los zumos exprimidos
Son los más parecidos y cercanos a los zumos caseros, estos son el resultado directo de exprimir las frutas y no incluyen aditivos (únicamente la fruta exprimida), aunque son los más saludables y recomendados para acompañar la alimentación de los niños también son los más escasos y de menor abundancia en los supermercados. La OCU ha logrado conseguir solamente 7 del total de los 97 analizados e investigados.
2. Zumos derivados de concentrado
Para su elaboración se añade agua al concentrado de zumo, estos concentrados generalmente son importados directamente de las diversas zonas productoras de las frutas. Allí se exprimen y se elimina toda el agua contenida en el zumo (para hacerlo puro y minimizar los costos de transporte). En cuanto a los aditivos, el 80 % de ellos añaden vitamina C (que se ha perdido en el proceso de concentración); esta categoría representa a la mayoría de los zumos comercializados en los supermercados y del total analizado se han logrado conseguir 27 de ellos.
3. Los néctares de frutas
Esta variedad de zumo se elabora a partir de una normativa que establece un determinado y mínimo porcentaje de fruta para el zumo. Un ejemplo es el de naranja o de manzana donde se requiere que al menos el 50 % sea fruta. Te incluyen edulcorantes o azúcares añadidos y la gran mayoría de ellos contienen entre sus ingredientes aditivos (antioxidantes, mezclas de vitaminas edulcorantes y acidulantes), del total de los analizados se han conseguido 16 de esta tipología.
4. Bebidas a base de zumo
Aunque son muy parecidas a los néctares, es imposible incluirlas bajo esta denominación porque no cumplen con los requisitos de porcentaje de fruta mínima requeridos por la legislación. Emplean edulcorantes, colorantes, mezclas de vitaminas y muchos tecnicismos con la intención de desviar la atención hacia su poca cantidad de fruta sana incluida en su composición. Es decir, son más parecidos a un refresco que a un zumo y por ende mantienen un interés nutricional y saludable casi nulo. En este análisis de 97 bebidas de la OCU, se han logrado analizar 18 de esta tipología.
5. Bebidas a base de zumo más leche
Son de data reciente y han gozado de un auge y de una moda que no ha parado de crecer, su contenido de zumo puede ser ampliamente variado, llegando a presentar escalas que van desde el 6 % hasta el 40 % y más. Y obviamente el de la leche es mucho menor, obteniéndose valores que raramente sobrepasan el 15 % y donde evidentemente el resto del producto es solo agua.
Hay que tener cuidado con la famosa palabra “zero” incluida en muchas de estas bebidas, porque se asocia con azúcares, cuando la realidad es que muchas veces podría hacer referencia a grasas (usando leche descremada). Todos además añaden colorantes, estabilizantes, acidulantes, antioxidantes y más. Del total de analizados se han conseguido 29 de esta categoría y solamente los de la marca (Bifrutas de Pascual) mantienen un buen porcentaje de frutas de 41 % y no incluyen aditivos.
Los zumos y su valor en la escala Nutriscore como un alimento
Conocidas las denominaciones, ya puedes hacerte una clara y precisa idea de cuáles son los más indicados para dar de consumir a los niños, además de mantener la claridad y la seguridad de que todos ellos (incluidos los caseros) contienen elevadas dosis de azúcares y bajos niveles de fibra. Razones más que suficientes para no lograr una destacada clasificación en las valoraciones Nutriscore, recordando que solo el agua fresca goza de mantener una clasificación “A” por parte de esta escala. De allí que únicamente uno de los zumos haya alcanzado una clasificación “B” y este corresponde a un zumo exprimido.
- Valoración B (buena): 1 solo producto perteneciente a un zumo exprimido.
- Valoración C: 38 productos.
- Valoración D: 42 productos.
- Valoración E: 16 productos.
De allí que estas valoraciones simplemente confirman lo dicho hasta ahora y es que los zumos son simplemente para un consumo ocasional, y por lo tanto sean caseros o industrializados, la mejor recomendación posible para dar una bebida a los niños ya sea para calmar la sed o para acompañar las comidas sea la de proporcionarles la saludable agua.