Loading...

9 claves que te van a ayudar a detectar personas tóxicas

Conocer este tipo de rasgos es esencial para parar la relación a tiempo

claves detectar personas toxicas

Las personas somos seres sociales y, como tales, tenemos tendencia a relacionarnos con otros semejantes. Por eso es normal que tengamos parejas, amigos y cualquier otro tipo de relación que pueda cubrir nuestras necesidades físicas y psicológicas.

No obstante, en ocasiones esas relaciones no son tan fructíferas como esperamos, encontrándonos con personas que nos hacen daño o provocan inseguridades. Esto es en concreto lo que ocurre con las personas denominadas como «tóxicas». Pero si quieres saber qué son las personas tóxicas y cómo puedes aprender a detectarlas, te aconsejamos que sigas leyendo.

¿Qué es una persona tóxica?

Cuando hablamos de persona tóxica, realmente nos estamos refiriendo a las conductas que tiene un individuo y que impactan de manera negativa en los demás. Es decir, por definición ninguna persona es tóxica, aunque si puede serlo su comportamiento.

Este tipo de personas pueden ser complicadas de tratar y generar problemas en distintos entornos como:

De hecho, muchas veces terminan generando problemas con terceros y haciendo que se rompan otros vínculos, por lo que es recomendable tenerlos lo más lejos posible.

9 rasgos de las personas tóxicas que debes conocer

Para ser englobada bajo esta etiqueta, los comportamientos tóxicos de la persona deben ir más allá de que se haya levantado un día de mal humor. Es decir, debemos estar hablando de una característica que se mantiene a lo largo del tiempo y que además afecta a otras personas.

Además, otro aspecto importante es la intencionalidad con la cual la persona está emitiendo dicho comportamiento. Ya que puede ser que nos haya hecho daño sin pretenderlo.

En cualquier caso, es fundamental conocer bien a la otra persona y comprobar si posee alguno de los rasgos que te vamos a comentar a continuación.

1. Ven todo de color negro

Probablemente, uno de los rasgos más característicos de este tipo de personas es que se centran en los aspectos negativos de su vida y hablan de ellos de manera continua.  De hecho, lo más normal es que estén todo el rato quejándose y no encuentren ningún tipo de solución a sus problemas.

Por eso es muy común que terminen acabando con la energía de las personas que los rodean.

2. Te culpan de todo

Otro rasgo muy habitual en este tipo de personas es que culpabilizan a la persona que tienen al lado de todo, llegando incluso al punto de acusarle de cosas que no han hecho.

Esto hace que se generen sentimientos de tristeza y se produzca una bajada de autoestima en aquellos que les rodean.

3. Son egocéntricas

Puede que al principio de la relación no lo hagan, pero, con el paso del tiempo, verás como solamente hablan de sí mismos. Quieren ser el centro de atención y no lograrlo puede llegar a molestarles en exceso.

Además, no se preocupan por los problemas de los demás y solamente quieren que escuches los suyos.

4. Carecen de empatía

No es solamente que no sepan como se siente la persona que tienen al lado, sino que, directamente, ni les importa. Tal es la importancia que se dan a sí mismos, que lo que pueda ocurrirles a otros no está dentro de sus prioridades.

Por eso, aunque en algún momento necesites su ayuda, no vas a conseguir tenerla.

5. Son envidiosas

Si buscas un sentimiento que pueda definir bien a este tipo de personas, seguramente sea la envidia. Suelen tener siempre en su punto de mira a otras personas que si disponen de aquello que ellos/as anhelan y los critican por tenerlo.

Además, este tipo de sentimiento genera en ellos un desprecio por este tipo de personas e incluso puede terminar derivando en conductas agresivas. No solamente a nivel físico sino también a nivel psicológico.

6. Ocupan el rol de víctimas

Convertirse en la víctima es una de sus actividades principales, ya que así consiguen ser de nuevo el centro de atención, que es lo que buscan desde un primer momento.

De hecho, este comportamiento tóxico suele ser muy habitual porque les sirve para conseguir lo que están buscando. Muchas veces puede ser que te eches la culpa a ti mismo, le pidas perdón, etc. Cualquier cosa con tal de no asumir su culpa.

7. Son infelices y critican a los demás

La infelicidad es una constante dentro de la vida de este tipo de personas. Y es que, además de carecer de inteligencia emocional, el hecho de criticar y vivir constantemente pendiente de otras personas hace que no sepan disfrutar de los pequeños placeres de la vida.

Además, esta mala gestión de las emociones hace que se frustren con suma facilidad y no sepan afrontar correctamente las situaciones problemáticas que pueden encontrarse en el día a día de su vida.

8. No se alegran por los logros de los demás

Como ya comentábamos más arriba, las personas tóxicas no son capaces de sentir empatía por otras personas, por lo que no debes pensar en ningún momento que se vayan a alegrar por ti.

De hecho, en muchas ocasiones incluso van a sentir envidia porque tú has conseguido algo que ellos no tienen. Pudiendo incluso hacerte sentir culpable por tus logros. Por otro lado, si en algún momento necesitas encontrar consuelo, tampoco son las personas indicadas a las que recurrir.

9. No son autocríticos

Finalmente, otro de los puntos esenciales para detectar a este tipo de personas es que se trata de individuos que no saben asumir sus errores. En cualquier situación la culpa la van a tener las personas que le rodean y es imposible conseguir que crean lo contrario.

Este tipo de conducta es el que hace que, muchas veces, sus relaciones se terminen deteriorando.

En resumen, existen una serie de rasgos característicos que pueden ayudarte a detectar a las personas tóxicas antes de que sea demasiado tarde, así que no olvides tenerlos en cuenta.

Salir de la versión móvil