Se acerca la Navidad, una época del año en la que el jamón ibérico, conocido en todo el mundo por su exquisitez y sabor inigualable, se convierte en uno de los alimentos centrales de nuestras comidas familiares.
Es por ello que todas las cadenas de supermercados, entra las que destacan algunas como Mercadona o Alcampo, están aumentando su oferta de jamín ibérico y serrano. Y es que esta delicia, además de serlo por sí misma, es capaz de hacer que otros platos nos sepan mucho mejor.
Casi cualquier plato mejora si le añades un poco de jamón serrano
Las cenas de Nochebuena o Nochevieja así como otras celebraciones con la mesa como protagonista a menudo buscan nuevos platos o una reinvención de las recetas clásicas. Y no solo en estas ocasiones, platos de nuestro día a día pueden hacer de tu rutina de alimentos una experiencia mucho más sabrosa.
El jamón ibérico tiene el poder de elevar el sabor de platos aparentemente sencillos, transformándolos en auténticas delicias culinarias. En este artículo, exploraremos cinco platos que, con la adición del jamón ibérico, pasan de sosos a espectaculares.
5 platos que ganan mucho en sabor con un toque de jamón ibérico
Algunos platos pueden ser considerado sosos, o tener cualidades que destaquen por encima de un sabor intenso. Pueden ser nutritivos, bajos en calorías, refrescantes… Pero un sabor intenso no es su punto fuerte. Sin embargo, estos cinco platos pueden tenerlo todo: sus cualidades más un extra de sabor gracias al toque del jamón ibérico.
Ensalada de tomate y mozzarella
Las ensaladas suelen ser consideradas como opciones saludables pero poco emocionantes. Sin embargo, al agregar lonchas de jamón ibérico a una clásica ensalada de tomate y mozzarella, se produce una explosión de sabor. El jamón aporta un equilibrio perfecto entre lo salado y lo ahumado, transformando esta ensalada en un plato digno del mejor restaurante.
Patatas bravas
Las patatas bravas son un clásico de la cocina española, y aunque suelen ser un plato bastante sabroso, a veces pueden caer en la monotonía debido a su simplicidad. Al añadir crujientes trozos de jamón ibérico sobre las patatas bañadas en una salsa picante y alioli, se crea una experiencia de sabor completamente nueva. El jamón agrega textura y un toque salado que complementa a la perfección el carácter picante de la salsa.
Huevos rotos
Los huevos rotos son otro plato típico español que se beneficia enormemente de la inclusión del jamón ibérico. Una yema de huevo que se derrama sobre patatas fritas y jamón crea una combinación deliciosa de sabores tradicionales. El jamón aporta una dimensión extra de sabor y una textura crujiente que hace que este plato sea inolvidable.
Crema de calabaza
La crema de calabaza es una elección común en la temporada de otoño e invierno. Su sabor es suave y agradable pero para elevar esa sensación a otro nivel, basta con esparcir finas tiras de jamón ibérico crujiente sobre la crema. La dulzura de la calabaza se equilibra a la perfección con el sabor salado del jamón, creando una experiencia culinaria cálida y reconfortante.
Ponle jamón serrano a la pizza margarita
La pizza margarita es un clásico en la cocina italiana. Es la base de casi cualquier pizza y cada cual puede añadir ingredientes a su antojo. Puede que no te hayas salido mucho de los clásicos y, si es así, va siendo hora de darle un toque especial, más nuestro, con la adición de jamón ibérico. Al hornear la pizza y luego colocar el jamón ibérico encima justo antes de servirla, se obtiene una deliciosa fusión de sabores mediterráneos. El jamón agrega un toque de lujo a esta receta simple, llevándola a otro nivel.
El jamón ibérico es un auténtico tesoro culinario que puede transformar platos aparentemente sencillos e incluso los más sosos en auténticas maravillas gastronómicas. Ya sea en ensaladas, platos de patatas, cremas o incluso pizzas, su sabor y textura excepcionales hacen que cualquier comida se convierta en una receta deliciosa.