Gin tonic como nombre viene de la combinación de dos palabras inglesas: gin (ginebra) y tonic (agua tónica). Su denominación nos lo dice todo, pues esta bebida alcohólica se trata de un cóctel compuesto de ginebra y agua tónica normalmente servido con abundante hielo.
Hoy en día, es uno de los cócteles más populares y consumidos del mundo. De hecho, hasta se le ha concedido una fecha en su honor: el Día Internacional del Gin & Tonic, que se celebra el 19 de octubre desde el año 2010. A continuación, te proporcionaremos toda la información que necesitas para poder preparar esta popularísima bebida en tu casa.
Breve historia de este cóctel
Si te preguntas por qué ha llegado a ser tan conocido, en esta sección te resumiremos su historia para esclarecerte esa duda. El matrimonio entre la ginebra y la tónica se consumó en el Raj británico del siglo XIX en la India: “la joya de la Corona” de Reino Unido. Durante los años de explotación del territorio por parte de los británicos en aquella época, surgieron varias enfermedades que diezmaban a invasores, colonos y soldados blancos, entre las cuales destacaba la malaria como la peor.
En control británico de la India colonial exigía la capacidad de combatir esta enfermedad. Por ello, en la década de 1840, se empezó a importar anualmente toneladas de corteza en polvo de quinina, un árbol reconocido como antídoto contra la malaria probado por primera vez por la condesa de Chinchón en España. No obstante, la quinina era muy amarga, por lo que para hacerla bebible, la mezclaron con azúcar y agua. Así nació un refresco con propiedades medicinales llamado “Indian Tonic Water”: la primera agua tónica de la historia. Los efectos se notaron instantáneamente, pues los afectados por la malaria dejaban de morir.
Sin embargo, el agua y el azúcar no eran suficientes para combatir el amargor de la quinina. Necesitaban algo más, y ahí fue cuando pensaron en añadir una bebida alcohólica a la mezcla. Rápidamente pensaron en la ginebra, ya que por el momento había mucha producción en Inglaterra y era bastante barata. De hecho, era conocida como el licor de los pobres. La mezcla resultó ser un éxito rotundo, y eso hizo que poco a poco se popularizara más y más internacionalmente, hasta nuestros días. En conclusión, una bebida que pretendía tener propiedades curativas se convirtió con el paso de los siglos en un cóctel para disfrutar con amigos.
Cómo preparar un buen gin tonic
Este cóctel no precisa de muchos ingredientes para su elaboración, por lo que es muy sencillo de preparar. No tardarás mucho en tenerlo listo, y recuerda que en la medida de lo posible debe servirse en copa de balón.
Ingredientes necesarios
- 50 mililitros de ginebra
- 200 mililitros de agua tónica
- 1 rodaja de lima o limón
- Hielo
- Una o dos bayas de enebro (opcional)
Elaboración
Si sigues estos pasos adecuadamente, tendrás entre tus manos un buen copazo de un gin tonic excelente y fresquísimo. Apunta bien:
- El gin tonic perfecto se hace directamente en el vaso y no en la coctelera. Lo primero es elegir la copa o vaso donde lo serviremos, preferiblemente copa de balón o un vaso ancho en su defecto.
- Introduce el hielo en la copa y, si tienes una cuchara de coctelería, enfría la copa removiendo el hielo con la cuchara dando vueltas, siempre pegado al cristal de la copa. Si el hielo suelta algo de agua en el proceso, viértela fuera de la copa.
- Parte una rodaja de lima o limón y ésta, a su vez, en dos medias lunas. Con una de ellas, frota suavemente el borde de la copa y exprime unas gotas de su zumo en el interior. La otra mitad de la rodaja que hayas cortado debes colocarla en el interior de la copa.
- Sirve la ginebra (entre 50 y 60 mililitros, dependiendo de cuál utilices, pero ni una gota más ni una gota menos).
- Incorpora la tónica suavemente, directo desde el botellín o lata pegada a la copa y sin romper la burbuja. El gin tonic está mucho mejor con burbujas que sin ellas.
- Por último, remueve con la cucharilla trenzada o con un palito de coctelería, da un cuarto de vuelta a la copa para mezclar todos los ingredientes bien. Una vez tengas todo listo, ya solo te quedará lo mejor… ¡disfrutar de esta magnífica bebida!
