Al plantear la decoración de casa, lógicamente, queremos que responda a nuestro estilo y personalidad. Pero demasiado entusiasmo nos hace a veces perder la percepción de la realidad. Es cierto que ese sofá que acabamos de ver es maravilloso, ¿pero cabe en el salón? El azul cobalto está de moda, ¿pero quedará bien en la pared del dormitorio?
Lo ideal es no precipitarse y pensar muy bien en cada detalle antes de lanzarnos al trabajo que supone la decoración de nuestro hogar. Así evitaremos errores que pueden arruinarla. Es cierto que en muchos casos tienen una solución más o menos sencilla, pero al final esos fallos nos hacen perder tiempo y también dinero. Vamos a ver algunos de los más comunes.
Error 1: no tener en cuenta el tamaño de los muebles
Los metros útiles son los que son, no dan para más. No tenerlo en cuenta a la hora de elegir el mobiliario es uno de los errores más frecuentes en decoración. Sofás enormes, camas XXL, mesas para ocho comensales o una gran isla en la cocina. ¿Realmente caben? Puede que sí, pero también cabe la posibilidad de que ocupen tanto que el resultado sean estancias más agobiantes.
La solución, evidentemente, es tomar medidas antes de comprar esos muebles y utilizar el sentido común: si solo somos dos en casa, no necesitamos el sofá más grande de la tienda o si no solemos tener invitados tampoco nos hace falta una mesa enorme. ¿Ya los has comprado? En ese caso, la única solución es aligerar los espacios y retirar todo aquello que no sea imprescindible, como muebles auxiliares.
Error 2: recargar los espacios
Nos gustan el sofá, las butacas y los pufs a juego. Y, además, hemos encontrado dos mesitas de centro maravillosas. ¡Y qué decir de ese tocador increíble que seguro cabe en un rincón del dormitorio! Sí, puede que todo ello quepa en el salón o la habitación, pero si tenemos que saltar por encima de los muebles no será práctico. Además, demasiado mobiliario hace que las estancias se vean más pequeñas.
Evitarlo es muy sencillo, se trata de no comprar por impulsos y de visualizar cómo quedará tanto mueble en casa. Solucionarlo ya es más complicado. Tal vez puedas llevar las butacas a la terraza acristalada o transformar el tocador en una zona de trabajo o estudio. Pero lo más sensato es deshacerse de esos muebles que estorban.
Error 3: no acertar con los colores de la pared o el mobiliario
El color tiene una enorme influencia en nuestras emociones, por eso es muy importante tenerlo en cuenta en la decoración de nuestros hogares. Y también influyen en la percepción espacial de las estancias. Sí, es cierto que el magenta está de moda y además nos encanta, ¿pero es adecuado para la pared del dormitorio? Y qué decir de esos muebles negros tan elegantes para la cocina, ¿quedarán bien si es oscura?
Si hablamos de paredes, sobre todo en zonas de descanso o habitaciones oscuras, lo ideal son colores neutros y claros. ¿Te has equivocado? Fácil, vuelve a pintar. ¿Pero qué ocurre con el color de los muebles? Tienes dos opciones: pintarlos o mejorar, y mucho, la iluminación para equilibrar su tono.
Error 4: elegir mal la decoración de las paredes
Con ello nos referimos a los cuadros. Y es muy fácil equivocarse en ese aspecto: poner cuadros muy pequeños en una pared muy grande o, al contrario, uno con demasiada presencia en una pared pequeña; colgarlos a una altura inadecuada u organizarlos de una forma muy poco estética; no tener en cuenta el estilo de la casa a la hora de elegirlos, etc.
La solución es pensar muy bien en el espacio antes de comprar los cuadros y colocarlos. Un cuadro único debe ocupar alrededor de dos tercios del mueble sobre el que se coloca. Y, en líneas generales, que quede siempre más cerca del mueble que del techo. Por otra parte, si vas a colocar alguna composición en una pared desnuda, que ocupe algo más de la mitad.
Error 5: olvidarte de la iluminación
La iluminación es fundamental en decoración: aporta calidez, amplía los espacios, pone de relieve esos elementos que queremos destacar, etc. Una habitación oscura es una habitación fría y poco acogedora, las sombras restan protagonismo a la decoración y una temperatura de luz mal elegida puede resultar incluso molesta.
Planificar correctamente la iluminación es fundamental: las ventanas es mejor que estén despejadas, las luces frías son para zonas de trabajo y las cálidas para zonas de estar y relax, hay que combinar luces principales y secundarias y, por supuesto, las luminarias son parte importante de la decoración.
Otros errores decorativos
Hemos mencionado esos grandes errores que, además, son los más habituales. Pero hay muchos otros que pueden arruinar la decoración más cuidada. Para que puedas evitarlos, te enumeramos algunos de ellos:
- Mezclar estilos sin criterio: las combinaciones funcionan, pero no siempre. Si no estás convencido del resultado, mejor no experimentar.
- Olvidarse del almacenaje: recuerda que en casa siempre hay que guardar un millón de cosas, así que busca siempre la funcionalidad.
- Colocar alfombras demasiado grandes o demasiado pequeñas.
- Seguir las modas al pie de la letra: el resultado serán espacios sin personalidad.
Ten en cuenta todos estos y podrás decorar tu casa con buen gusto, con acierto y con mucha personalidad.