No es lo primero que se ve y muchas veces tampoco se le da gran importancia. Pero una lámpara de techo puede decir mucho en el dormitorio. Para bien, pero también para mal. Saber elegir la que mejor encaja no solo en el estilo, sino también en el tamaño de la estancia es importante porque solo de esa manera sumará puntos en la decoración del dormitorio.
La variedad de modelos de lámparas colgantes es infinita. Y eso tiene una ventaja: siempre habrá una lámpara perfecta para cada dormitorio. Pero también tiene un inconveniente, casi tan grande como el número de diseños: hace que elegir sea a veces muy, muy difícil. ¿Necesitas consejos? Aquí tienes algunos que pueden ayudarte.
Lo primero, pensar en la iluminación adecuada del dormitorio
Puede que no hayas dado la relevancia que se merece a la lámpara de techo de tu dormitorio. Al fin y al cabo, es una iluminación funcional, o al menos lo parece. Pero una luz puntual en la mesilla y una ambiental para dar intimidad, no son suficientes. En muchos momentos vas a necesitar una buena luz, por ejemplo al vestirte, si no tienes vestidor.
La luz del techo, por lo tanto es muy importante. Y no solo por ese aspecto meramente práctico. También para que el dormitorio resulte más acogedor, para que no haya sombras y, en definitiva, para hacerlo más cálido. Por ello, luces en el techo, siempre, y preferiblemente regulables o, en su defecto, amarillas.
Cuestión de tamaño
Si hablamos de lámparas de techo en dormitorios, el tamaño importa y mucho. Una lámpara demasiado grande puede resultar abrumadora y arruinar cualquier esfuerzo decorativo. Y si es demasiado pequeña también restará estilo. ¿Pero cómo saber cuál es el tamaño más adecuado? En líneas generales, para un dormitorio pequeño, mejor lámparas cuyo diámetro no exceda los 30 centímetros Si la habitación es amplia puede llegar a los 60 centímetros sin problemas.
No significa que no puedas colocar una lámpara de mayor tamaño en un dormitorio no demasiado amplio. Pero debes buscar siempre un efecto armónico, y equilibrado con un diseño que, aunque sea de dimensiones grandes, no resulte demasiado pesado a nivel visual. Un ejemplo: esas lámparas con brazos metálicos y simples bombillas en los extremos.
La altura también cuenta
En un dormitorio con techos muy altos te puedes permitir el lujo de elegir lámparas algo más grandes, de diseños más voluminosos y complejos, como son las de araña. Y no tendrás problema con ningún modelo para adaptar su altura. ¿Pero a qué altura deben quedar las lámparas del suelo? Lo ideal es que no estén a menos de 2,10 metros del suelo.
Una lámpara para cada dormitorio y cada estilo
Ya hemos adelantado algunas pinceladas que pueden ayudar a elegir la lámpara de techo ideal para el dormitorio. Lo más importante es que coordine perfectamente con la decoración de la estancia. No quiere decir que tenga que ser exactamente igual que otros elementos, pero sí debe aportar estilo, armonía y equilibrio. Si hablamos de lámparas colgantes, aquí tienes una pequeña guía:
Lámparas de araña
Ya lo hemos dicho: son perfectas para dormitorios amplios o con techos altos. Se suele pensar que solo encajan en estilos más clásicos, pero no es así, hay diseños modernos y sofisticados que darán el toque definitivo a un dormitorio muy actual. Y no necesariamente tienen que ser de cristal, precisamente esos modelos más modernos son de metal y, en muchos casos, prescinden de las pantallas.
Lámparas de brazos
Con ellas ocurre algo muy parecido a lo que hemos explicado con las de araña. Hay modelos muy, muy clásicos, y otros de corte moderno. Si quieres que el dormitorio gane en estilo pero de una forma discreta, opta por una de brazos rectos en forma de satélite y pequeños focos, son las conocidas como lámparas “sputnik”. Pero también las hay con los brazos en forma de espiral que son realmente atractivas.
Lámparas de materiales naturales
Todo lo natural es tendencia, también en lámparas. Una lampara de techo sencilla y con pantalla de mimbre o de sisal quedará perfecta en esos dormitorios de aires nórdicos o incluso rústicos, Si optamos por pantallas de tejidos como el lino, tendremos la lámpara ideal para un dormitorio clásico renovado.
Lámparas joya
Son atrevidas, sofisticadas y no pasan desapercibidas. Este tipo de lámparas serán las protagonistas del dormitorio, de ahí que es mejor elegirlas en habitaciones de decoración más sencilla, para evitar recargar en exceso el espacio.
¿A qué nos referimos con lámparas joya? A las de tipo chandelier o araña más ostentosas y recargadas; a las de tipo mid century de formas estrelladas casi imposibles o brazos que no guardan ninguna simetría; o, en general a esas lámparas que por su diseño espectacular, su volumen o su color nunca pasarán desapercibida.