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Reforma tu baño sin arruinar el resultado: ¡Los errores que debes evitar!

No distribuir bien los elementos del baño, elegir mal los revestimientos o no pensar en el almacenamiento puede salir muy caro

Cualquier reforma del cuarto de baño exige una planificación muy detallada. Hay que tener en cuenta que son obras destinadas a mejorar su estética y su funcionalidad y que requieren de una inversión a veces elevada. Por ello, cualquier error puede pagarse muy caro, así que lo mejor es no precipitarse y no pensar solo en esos revestimientos o suelos que son la última tendencia en decoración.

Hay otros muchos aspectos en los que hay que detenerse a la hora de planificar esa reforma y hacer un diseño en el cuarto de baño que no solo sea bonito, sino que responda perfectamente a todas las expectativas. Y ahí entran en juego aspectos como las dimensiones del baño, si tiene ventana o no, si es un baño principal o de cortesía y, por supuesto, el estilo que queramos dar a la estancia. ¿Qué errores debes evitar?

Primer error que debes evitar en el cuarto de baño: una mala distribución

Muchos cuartos de baño son de dimensiones reducidas y, en aquellos que no lo son, la distribución es clave para conseguir una imagen armoniosa y equilibrada de la estancia. Improvisar en este sentido puede tener resultados desastrosos: una bañera que se come medio baño, un inodoro detrás de la puerta que no queda a la vista pero que impide que esta se abra, un lavabo encajonado, etc.

bano con distribucion erronea

Por lo tanto, el primer paso es tomar medidas, analizar bien todas las posibilidades del baño y actuar en consecuencia. Un baño bien distribuido es más cómodo y también mucho más funcional. Puede que te obligue a cambiar los sanitarios de lugar, y es una obra costosa, pero seguramente a la larga lo agradecerás más de lo que imaginas.

Segundo error: elegir mal los revestimientos

Por mucho que las tendencias en decoración impongan ciertos colores incluso en el cuarto de baño, hay que elegir los revestimientos con buen criterio. Unos azulejos oscuros o de un color intenso en un cuarto de baño pequeño o sin iluminación harán que parezca mucho más pequeño y frío. Y lo mismo ocurre con baldosas de formato pequeños.

Por lo tanto, hay que tener muy en cuenta el tamaño de la estancia. Si es oscura, mejor azulejos claros, o, en todo caso, una iluminación muy cuidada. Y, si es pequeña, además de esos colores más suaves, mejor baldosas XXL. Por cierto, al hablar de colores claros no necesariamente debemos pensar en blanco, beiges, azules, verdes o incluso amarillos muy claritos también están permitidos.

Tercer error: no acertar con el mobiliario del baño

Es, tal vez, una de las cuestiones más delicadas a la hora de reformar el baño. ¿Por qué? Porque lo que es un acierto en determinados casos, es un error en otros. Un ejemplo: un mueble volado es muy ligero a nivel visual y es perfecto en baños pequeños, pero su espacio de almacenamiento es más limitado. Y lo mismo ocurre con otros elementos como estanterías o carritos.

Esto obliga a determinar muy bien las necesidades en cuanto a espacio de almacenamiento. También a buscar soluciones que sean funcionales y, a la vez estéticas. En el caso de ese ejemplo que hemos puesto, se puede combinar ese mueble suspendido con un espejo con almacenamiento posterior. Las estanterías sobre ese espacio a veces tan desaprovechado como es la parte que hay sobre el inodoro es otra posibilidad.

Y no solo hay que fijarse bien en lo relacionado con el almacenaje. Hay otras cuestiones también importantes, como el estilo de los muebles y, de manera muy especial su calidad. No olvidemos que el baño es una estancia con niveles de humedad por lo general elevados, por ello, sí o sí hay que elegir muebles de calidad. Son algo más caros, pero su vida útil será mucho más larga.

Cuarto error: no pensar en la iluminación del baño

La iluminación es muy importante en un cuarto de baño. Es clave a nivel decorativo y, por supuesto, es fundamental a la hora del aseo personal. No sirve cualquier foco ni cualquier lámpara. Si la iluminación es escasa o está mal planificada, el cuarto de baño se verá pequeño y oscuro. Y, al contrario, si es demasiado intensa o está mal distribuida, puede resultar realmente molesta.

Lo ideal es, en primer lugar, aprovechar al máximo la iluminación natural si hay ventana. Y, además, debes pensar en luz directa en la zona del espejo (bien con apliques o focos a los lados, bien incorporada al mismo espejo). En el techo, lo mejor es una luz que sea regulable para poder cambiarla según necesites. Y, si quieres algo realmente especial, las luces decorativas con tiras LED son realmente vistosas.

Otros errores que debes evitar en el baño

No pensar en una adecuada ventilación, no impermeabilizar adecuadamente la zona del baño o de la ducha, no incluir la instalación de fontanería en la reforma del baño o no pensar en las necesidades futuras (por ejemplo, poner una ducha a ras de suelo que sea cómoda cuando la edad limite la movilidad) son otros errores que pueden costar muy caro porque en algunos casos obligarán a realizar obras de nuevo antes de lo que pensabas.

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