En aquellos hogares que la tienen, la chimenea es una pieza indispensable cuando llega la Navidad. Es la puerta de entrada para que Papá Noel deje sus regalos. Y es también ese lugar que propicia reuniones familiares y momentos de alegría compartida arropados por el calor del fuego. Por ello, nunca hay que olvidarla a la hora de preparar la decoración navideña.
En salones con chimenea, es el elemento que más miradas acapara, junto al árbol de Navidad o el belén, por supuesto. No importa si es una chimenea tradicional abierta, si es de casete, de pellets o incluso de gas. Adornarla es sencillo y ayudará a crear ese ambiente especial que todos buscamos para nuestros hogares en estas fechas.
Cómo decorar la chimenea en Navidad: ideas geniales
La decoración de la chimenea va a depender de dos aspectos fundamentales. Por un lado, el estilo de la casa. Por otro, el del resto de la ornamentación navideña. Es importante que haya una cierta sintonía. No quiere decir que no se puedan crear contrastes para dar relevancia a la chimenea, pero sí que haya armonía y equilibrio.
Tradicional o moderna, clásica o muy chic, infantil o sofisticada. Podemos dar protagonismo a la chimenea de mil formas diferentes y con muy pocos elementos. Lo ideal es no caer en los excesos. Sea cual sea el estilo elegido, la elegancia debe ser siempre la nota dominante. ¿Cómo conseguir que esa chimenea sea el elemento más importante de la decoración navideña?
- Las velas siempre funcionan bien sobre la chimenea, en cualquier tipo de estilo o decoración. Además, son perfectas para la repisa superior. Lo más habitual es elegir portavelas o candelabros, pero una idea diferente y que viste muy bien es colocar velas de distintos tamaños, formas y colores. Ya que estamos en Navidad, rojo y dorado son los colores ideales.
- Si se prefiere algo sencillo, no demasiado llamativo pero elegante, las guirnaldas son un buen accesorio para dar protagonismo a la chimenea. De ramas de abeto, piñas y flores secas son sencillas, aportan un toque muy actual y, además, son ecológicas. ¿Se puede pedir más?
- Cuando hay niños en casa, no pueden faltar los calcetines colgados de la chimenea. Si la decoración navideña es sencilla y se ha optado por adornos naturales y tonos discretos, la mejor elección son calcetines en un solo color y, preferiblemente en blanco roto, beige o tonos crema. ¿Has llenado tu casa de color? Entonces nada mejor que esos calcetines sean también muy coloridos y llenos de motivos navideños.
- Cuando la chimenea es solo decorativa, es decir, no se enciende, una buena idea es decorar el interior con algún centro bonito hecho con troncos, ramas secas y bolas colores o con un cesto decorado. También se pueden poner velas o incluso unas cajas decoradas.
- Decorar la base de la chimenea también ayudará a realzarla. Una idea muy fácil y muy vistosa es colocar unos cestos de mimbre y colocar en su interior unos cojines con motivos navideños o una mantita. No solo son decorativos, también vienen muy bien para esos días en los que no apetece salir de casa.
- Y otro elemento al que hay que prestar atención para que la chimenea destaque sobre todo es la pared que cubre el tiro. Coronas de flores, calendarios de adviento hechos con postales navideñas, espumillón rodeando ese espejo que la adorna o guirnaldas a juego con las de la repisa darán el toque definitivo a la chimenea.
En cualquiera de los casos, es fundamental prestar atención a la seguridad, sobre todo si es una chimenea en uso. Darle protagonismo, en ningún caso puede implicar riesgos. Para evitar disgustos innecesarios, hay que asegurarse de que cualquier elemento decorativo no esté cerca de la fuente de calor.
Chimenea y árbol de Navidad: un gran equipo
Si hay sitio suficiente, colocar el árbol de Navidad al lado de la chimenea es siempre buena idea. Es la forma de concentrar las miradas en un mismo punto. Y no quiere decir que por ello la chimenea pierda protagonismo, al contrario. El árbol es el complemento perfecto si se elige un estilo y gama cromática similares a los de la decoración de la chimenea.
Pero hay otra razón, más allá de la estética para que árbol y chimenea se den la mano: no hay que olvidar que Papa Noel deja los regalos al lado del árbol. Y ponerle las cosas fáciles seguro que le alegra. Al fin y al cabo, en Navidad tiene mucho trabajo. ¿Merece o no la pena prestarle un poco de atención a la chimenea? Seguro que sí.