No hace falta que una fruta sea un superalimento para tener un motivo por el que consumirla a diario. Las frutas en general son una gran fuente de nutrientes. Es por ello que la OMS recomienda cinco ingestas diarias para conseguir todas las vitaminas y minerales que el cuerpo necesita.
Sin embargo, a veces aparece alguna fruta que destaca por reunir un aporte nutritivo que para conseguirlo con otras habría que combinar varias de ellas. La última sensación es el asái, también escrito acai o açai, una pequeña fruta que se ha puesto de moda por estar repleta de nutrientes.
El asaí, la fruta de origen asiático llena de nutrientes considerado superalimento
El asaí es una fruta de forma redondeada que no suele superar los 2,5 centímetros de diámetro. El nombre se lo debe a que crecen en las palmeras de asaí y son de un característico color púrpura oscuro, que lo asemeja al arándano grande en su aspecto exterior pero tiene una pulpa amarilla, que además rodea la semilla grande.
Esta fruta tiene una parte dura, el hueso, como ocurre con los albaricoques, pese a ello son habitualmente clasíficadas como bayas, aunque esto no es técnicamente correcto. Su familia frutal es la de las drupas, es decir, una fruta carnosa o fibrosa con un único hueso en su interior.
Los nutrientes que hacen del asaí un superalimento
Las propiedades beneficiosas para la salud que han hecho al asaí el superalimento de moda son varias. Es una rica fuente de vitamina A, fundamental para el correcto funcionamiento del sistema inmunitario, la reproducción, el crecimiento y el desarrollo, además de ayudar al buen funcionamiento del corazón, los pulmones y otros órganos. Solo con la ingesta de 100 gramos se consigue el 15% de la recomendación diaria de esta vitamina.
También contiene aporta una gran cantidad de calcio, aproximadamente el 2% de la ingesta diaria recomendada, siendo este un mineral que actúa en la formación y mantenimiento de huesos fuertes. También contiene otros minerales como cromo, zinc, hierro, cobre, manganeso, magnesio, potasio y fósforo, lo que la convierte en una magnífica fuente de energía, además de intervenir en casi la totalidad de los procesos fisiológicos.
El asaí es rico en fibra y antioxidantes
Cien gramos de asaí contienen unos dos gramos de fibra, un nutriente imprescindible para tránsito intestinal, con lo que previene de la hinchazón y el estreñimiento ocasional.
También es interesante saber que se trata de una fruta con un alto poder antioxidante, que actúa contra los radicales libres, es decir, ayuda en la prevención de enfermedades como el cáncer o la diabetes.
Asimismo ha demostrado una gran capacidad para intervenir en la regulación de los niveles de colesterol en sangre, evitando enfermedades cardiovasculares e infartos. Los antioxidantes están frecuentemente relacionados con el antienvejecimiento.
Cómo integrar el asái en tu dieta
Aunque aún no te hayas familiarizado con el asaí, no nos cabe duda de que después de lo que has leído vas a querer hacerlo. Si no sabes cómo, existen varias formas.
Para empezar, el asaí es una fruta, así que puedes acomodarla a tus hábitos de alimentación como cualquier otra fruta. Desde tomarla al natural, como postre, merienda o picoteo sano, en forma de zumo o batido, o en un bol con yogur natural y cereales.