El problema de la energía es mucho más complejo que simplemente mudarse a la energía solar y dejar atrás a los combustibles fósiles, y es que en muchos casos la problemática viene implícita con la vivienda y la forma o manera en que esta ha sido construida. De allí que sea necesario un óptimo ajuste de la construcción para, que la energía solar pueda generar todos los beneficios que implica su instalación y para que nuestras casas no sean unos coladeros energéticos.
La sostenibilidad de las edificaciones es de suma importancia, ya que la construcción representa uno de los sectores que mayor contaminación vierte sobre el planeta. Las cifras son categóricas y aunque la energía solar va en franco aumento, el sector de la construcción es el responsable de un 30 % de las emisiones de CO2 y que cerca del 85 % de las edificaciones no cumplen con los criterios establecidos para ser calificadas como energéticamente eficientes.
El agente rehabilitador y la energía solar
El gobierno español está apostando fuertemente a la completa rehabilitación del parque de viviendas para llevar a cabo una extensa y profunda regeneración urbana mediante los aportes de una enérgica cantidad de dinero proveniente de los fondos europeos de recuperación Next Generation. Donde el 50 % de la asignación que supera los 3.400 millones de euros que recibirá España serán destinados a la rehabilitación para la recuperación económica.
Este dinero tendrá como destino la rehabilitación integral de edificios, así como de los barrios y para las deducciones fiscales previstas, esto permitirá que el gobierno español pueda ofrecer subvenciones que van desde el 40 % hasta el 80 % de los importes totales de las obras de rehabilitación para garantizar que los ahorros energéticos establecidos se logren con el éxito necesario y en los tiempos establecidos.
Energía solar y rehabilitación para superar las metas
La increíble cantidad de 40 mil millones de euros se requieren para que la planificación de los objetivos pueda cumplirse de aquí a 10 años, con un estimado de 300 mil viviendas anuales que garanticen que la tendencia hacia la rehabilitación sea exitosa. Dejando muy en claro que las ayudas ofrecidas por la Unión Europea serán insuficientes y, por lo tanto, se tiene que mirar hacia el capital privado, con el problema de un horizonte temporal de más de una década.
Este panorama coloca a España lejos de conseguir llegar a las metas establecidas para el 2030 y es que se necesita que al menos un 3 % anual de los hogares sean rehabilitados con éxito, una cifra que se queda muy corta porque apenas estamos en el 0,2 %. Esto se debe a múltiples causas, incluida la desinformación por parte de las comunidades y propietarios y a la desidia del estado en crear los necesarios mecanismos para que esta información llegue a todos.
Una figura que garantiza la eficacia energética de los inmuebles
Con toda esta problemática es importante destacar la gran importancia del agente rehabilitador, una eminente figura que será la encargada de las diversas gestiones relacionadas con las licencias y con el proyecto técnico, así como con la muy deseada gestión de las subvenciones y de la financiación, y de los respectivos trabajos de rehabilitación del inmueble.
La figura de este agente rehabilitador debería incluir las necesarias competencias en diversas ramas como la edificación, ingeniería, estructuración financiera, tramitación de los diferentes procedimientos para la correcta gestión y monitoreo de ayudas y subvenciones y ser capaz de auditar energéticamente a las propiedades inmobiliarias. Es decir, una solución integral a modo de ecosistema que unifique los diversos agentes con una comunicación directa con el cliente.
Lo que en definitiva minimiza los problemas y encausa la coordinación de casi la totalidad de los trámites, con el fin de facilitar la gestión de las comunidades y de los propietarios, para lograr que las edificaciones puedan contar con la eficiencia energética necesaria para cumplir con las metas establecidas a nivel mundial y conseguir que el planeta pueda disfrutar de una segunda oportunidad con la energía solar como participe de este cambio.
Una figura que podría ser la salvadora gracias al compromiso y a la capacidad que se estaría depositando en este agente rehabilitador para lograr sacar a flote a este sector y a esta problemática relacionada con la eficiencia energética de los inmuebles. Plenamente capaz de conseguir soluciones viables y de garantizar resultados positivos en todas las decisiones, con la respetiva cuota de asumir riesgos y de ser necesario responder económicamente.