Se ha vuelto popular en las redes sociales qué grupos de deportistas profesionales están usando el bicarbonato de sodio para conseguir energía durante sus competiciones. Por ejemplo, se dice que el holandés de ciclismo consume este ingrediente en una mezcla con alimentos como papillas. Se cree que lo hacen, debido a que este producto puede retrasar la acumulación de ácido láctico en los músculos. Lo que tiene como consecuencia una disminución del cansancio que esto ocasiona.
Se considera que la presencia de bicarbonato de sodio en sangre tiene la propiedad de reducir el lactato, con un menor aumento de la acidez de la sangre. Lo que teóricamente aumentaría la capacidad de ejercicio de alta intensidad. Por tal motivo, se ha diseñado un “gel milagroso” que introduce el bicarbonato de sodio en el organismo ayudando a proteger el estómago de los efectos secundarios no deseados por los deportistas, pero ¿Qué tan efectivo puede ser esto?
¿Funciona el bicarbonato de sodio para mejorar el rendimiento de los ciclistas?
El entrenador Iñigo San Millán, ha desmentido el buen resultado del consumo de este ingrediente por los profesionales del ciclismo. Según declaraciones oficiales publicadas en Twitter, el entrenador señalo:
“…el bicarbonato en mi humilde opinión no funciona para disminuir el lactato de los músculos. En primer lugar, el bicarbonato es uno de los suplementos más antiguos que existen. Se ha utilizado durante décadas para este propósito. Como muchos suplementos que no funcionan, tienden a reaparecer 20 o 30 años después…”
¿Puede el bicarbonato para neutralizar el pH de las células de nuestro cuerpo?
Para entender mejor la afirmación de este experto, debes saber que el pH de la sangre varía entre 7.35 y 7.45, siendo uno de los estados homeostáticos más importantes y regulados del cuerpo humano. Se han descrito tres factores que pueden modificar este estado: las concentraciones de CO2, electrolitos y ácidos débiles. Cuando se hace ejercicio extremo o se llega al estrés patológico, estos factores pueden ser un problema para el mantenimiento del pH de la sangre.
Para regular el pH del cuerpo, existe un mecanismo fisiológico que funciona de forma muy eficiente. Lo cual es clave, debido a que si el pH de la sangre baja o sube el organismo muere. El bicarbonato que entra al cuerpo se neutraliza por estos mecanismos homeostáticos, sin evidenciarse de ningún tipo de alteración en el pH del cuerpo.
De forma similar, el pH en el músculo esquelético con el ejercicio varía entre 6.4 y 6.8 debido a los iones de hidrógeno que se acumulan por la hidrólisis de lactato y ATP. Podrías pensar que al incluir un agente que neutraliza el pH como el bicarbonato de sodio, este puede aumentar y mejorar el rendimiento de los músculos, pero las posibilidades de que este compuesto llegue al músculo esquelético son ínfimas. Para que tengas una idea más clara, analicemos el ejemplo de las células cancerosas que tiene un pH ~6-7. Entre más agresivo es el cáncer, menor será el pH, debido al proceso relacionado con la carcinogénesis y la metástasis.
Si el bicarbonato de sodio pudiera llegar a las células y modificar su pH fácilmente, se podría eliminar la acidosis del microambiente tumoral y podría servir como tratamiento para controlar el cáncer. Pero, no existe ninguna evidencia de que el bicarbonato pueda llegar a las células cancerosas, ni a los músculos. De hecho, si una sustancia pudiera alterar el pH del organismo fácilmente, esto sería un problema para el mantenimiento de la salud.