Si tienes que hacer la compra del supermercado, cada día que no dejes pasar para ir a hacerlo cuenta para tu ahorro porque, definitivamente, podemos decir que los precios de los alimentos son cada día más caros y el acceso los básicos empieza a parecerse demasiado a un lujo. Así que cuanto antes hagas la compra, menos aumento de precio te encotrarás.
Puede parecer exagerado, pero si atendemos a la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) y su seguimiento del incremento de los precios, podemos ver cómo cada semana un alimento es el nuevo «más encarecido desde que empezó la subida». Después de los esfuerzos por conservar el aceite de oliva dentro de la lista de la compra, llega un nuevo y preocupante desafío para nuestro bolsillo y la calidad de nuestra dieta.
La OCU señala el aumento del precio del pescado
La OCU ha advertido que los españoles están ajustando sus compras de forma notable debido a esta situación. Uno de los productos básicos que se ha vuelto casi un lujo con las subidas de precio de los últimos meses es el pescado.
Según un estudio de la OCU, el 60% de los consumidores ha reducido la cantidad de pescado que adquieren, y un 19% ha optado por pescados de menor calidad o congelado, renunciando a la compra de este producto fresco.
El pescado fresco no es el único alimento básico que se está volviendo un lujo
Además del pescado, según señala la OCU, existen otros alimentos esenciales también han sufrido una notable subida de precio debido a la inflación. Así, debido al revés económico que supone para las familias, el 54% de los encuestados ha disminuido la compra de carne, el 53% la de aceite de oliva, el 50% la de fruta, el 45% la de verdura fresca, y el 30% la de lácteos.
La OCU aconseja a los consumidores que consideren la posibilidad de incorporar alimentos y proteínas que sean de origen vegetal en la dieta, en lugar de optar por alternativas más asequibles en el mismo grupo de alimentos, es decir, de menor calidad, con el fin de compensar la ingesta de sus nutrientes o reducir el impacto negativo de dejar de consumirlos, ya que esto podría tener justo el efecto contrario y perjudicar la calidad nutricional de nuestra dieta.
Las familias lo tienen cada vez más difícil para hacer frente al precio de los alimentos básicos
La cesta de la compra se ha convertido en todo un desafío económico para las familias españolas, y es que la inflación continúa su imparable ascenso, que alcanzó una tasa anual del 3,5% en septiembre, suponiendo así la subida de casi un punto porcentual a la cifra registrada en agosto.
Esta tendencia alcista ha repercutido directamente en el bolsillo de las familias, que mes a mes se enfrentan a precios cada vez más elevados en los productos de consumo diario. En estos tiempos de incertidumbre económica, la adaptación en las elecciones de compra se vuelve esencial para mantener un equilibrio en la alimentación de las familias españolas.