El combustible es uno de los elementos básicos para hacer frente a las necesidades energéticas de nuestra vivienda, así conseguimos proporcionar calor, generar luz, etc. Pero, con la subida de los precios de algunos de ellos, otras alternativas para calentar nuestro hogar menos conocidas han empezado a despuntar.
Hoy te explicamos un nuevo sistema que promete ser el futuro y tiene una gran ventaja: nos ayuda a proporcionar calefacción de una manera mucho más económica. Continúa leyendo para saber más sobre el mismo.
El combustible que usa el hierro para calentar tu casa de forma económica
Buscar nuevas alternativas de combustible que nos permiten hacer frente a la situación actual se ha convertido en una necesidad y por eso ha surgido este nuevo combustible de hierro, una alternativa mucho más eficiente y sostenible que los combustibles fósiles.
Fue la compañía RIFT (Renewable Iron Fuel Technology), formada por un grupo de antiguos estudiantes universitarios, la que ha puesto en marcha un nuevo prototipo de una caldera que funciona con este novedoso combustible.
Aunque por el momento, y al tratarse de solo una prueba, esta se testeará en 500 hogares para comprobar si realmente su funcionamiento es el adecuado y puede ayudarnos a ahorrar todo lo que promete.
Las ventajas de este sistema que descubrió la compañía en el año 2018 son más que claras: es mucho más económica y además no es contaminante porque no emite CO₂. De hecho, el polvo de hierro nos permite almacenar y utilizar energía, es reutilizable, muy seguro, fácilmente transportable y compacto, por lo que es una alternativa para calentar nuestra vivienda que promete ser mucho más adecuada y permitirnos ahorrar más.
Así es como funciona el combustible de hierro en la calefacción
En palabras de la propia compañía, lo que se hace principalmente es oxidar y desoxidar el hierro para producir la energía que necesita nuestro hogar. Para la oxidación, el polvo se quema en una caldera y esto proporciona grandes cantidades de calor y energía que se convierten en vapor o agua caliente.
Mientras que, la desoxidación se provoca empleando hidrógeno, lo cual vuelve a convertir al combustible en polvo de hierro para que pueda reutilizarse de manera infinita.
De esta manera, estaríamos ante una fuente energética totalmente renovable que, además, durante el proceso no emite ningún tipo de gas nocivo a la atmósfera. Y no solo eso, sino que su eficiencia energética también es una de las más altas que podemos encontrarnos actualmente, por lo que el ahorro que puede suponer para la mayor parte de los hogares es bastante evidente.
No obstante, aún nos va a tocar esperar para poder disfrutar de este sistema en nuestras viviendas porque no se encuentra totalmente disponible.
Eso sí, la compañía ha indicado que si su prueba piloto funciona como es de esperar (cosa que ya ha hecho previamente), la idea es poder crear en unos 2 años una central de 1 megavatio para poder comenzar a proveer a las ciudades de este tipo de energía y que sea una alternativa firme para el año 2050.