¿Cuál es el principal producto usado para la limpieza del hogar en general o de cualquier otra área? ¡Exacto, el agua! Este vital líquido es el agente limpiador más utilizado y que, a simple vista, parece inofensivo y seguro, pero —porque nunca falta un peo—, no es compatible con todo tipo de materiales.
Es cierto, aunque es lo primero en lo que pensamos a la hora de limpiar la casa, no siempre es la aliada infalible para cuidar y mantener en buenas condiciones ciertos objetos y superficies, de hecho, en algunos casos es más dañina que beneficiosa. Sigue leyendo y conoce las 9 cosas que no se deben limpiar con agua o se estropearán.
¿Qué materiales no debo limpiar con agua?
El agua es abundante, barata y un eficaz elemento a la hora de limpiar, pero no todo el tiempo es una opción su aplicación. En algunas ocasiones lo ideal es utilizar productos específicos para la superficie o tejido y así no afectar su apariencia ni acortar su vida útil. Presta atención y toma nota de lo que no deberías limpiar con agua:
Terciopelo
Al igual que los tapizados peludos de gamuza o microfibra, el de terciopelo tampoco se recomienda lavarlos con agua, pues tardan mucho en secarse y se deforman en el proceso. Lo mejor es contactar a un profesional o adquirir cepillos especiales para una óptima limpieza en seco.
Madera
Bien sean suelos laminados o de madera, muebles o instrumentos, cualquiera de ellos con la constante exposición al agua se desgastan, agrietan, se deforman y se corre el riesgo de que se oscurezca. Esto se debe a que es un material poroso y acumula humedad en su interior. Lo ideal es desempolvar regularmente la superficie con un paño de microfibra, limpiar con un paño de microfibra ligeramente humedecido con agua o un limpiador específico y protegerlo con cera o aceite especial.
Cuero
Los muebles tapizados, bolsos, calzado y prendas confeccionadas en este material no deben mojarse, de contrario, se pueden rasgar y agrietar. Lo más inteligente es limpiarlo con un limpiador para cuero o con trucos caseros que aseguren que se mantenga en buen estado.
Aparatos electrónicos
Los electrodomésticos, objetos tecnológicos, lámparas y los enchufes jamás deben empaparse, si bien esto no necesita una explicación profunda (vamos, que funcionan con electricidad), es conveniente recalcarlo. Mejor opta por limpiarlos con un paño húmedo con agua o un poco de alcohol (nunca rocíes directamente) y luego repasa con uno seco.
Plata
¿Tienes joyas o utensilios de plata que han perdido su brillo? Entonces olvídate de limpiarlos con agua, mucho menos los dejes en remojo en ella. Si no cuentas con pulidor de plata, entonces cúbrelo con kétchup por 10 minutos o sumérgelo en un recipiente con vinagre blanco. ¡Luego pule con un trapo seco y fíjate como brilla!
Lentes de contacto
Mucha gente guarda sus lentes de contacto en agua y no en la solución específica ¡Que grave error! Las soluciones contienen ingredientes antimicrobianos que limitan y eliminan bacterias, mientras que el agua mantiene los microorganismos e incluso fomenta a que se multipliquen.
Seda
Al igual que sucede con el cuero, es un tejido delicado que se puede manchar o decolorar al tener contacto constante con agua. Investiga como lavarla correctamente o mejor acude a la tu lavandería de confianza.
Ladrillo o mármol
Ambos son porosos y cuentan con una capa selladora que protege en contra de la humedad, por lo tanto, si se limpia con agua, se ve afectada y puede repercutir en su apariencia. Lo mejor es limpiar es remover el polvo con un cepillo, pasar un trapo húmedo y dejar secar.
Latón
El agua hará que la capa de laca se desgaste, causando deslustre y daños irreversibles. Opta por limpiador o pulidor de latón y repasa con un trapo de microfibra o gamuza.
Ahora que ya conoces los materiales y superficies que no se deben limpiar con agua, ¡evítalo a toda costa! Así prevendrás el desgaste prematuro y alargarás su vida útil.