La crisis energética está pasando factura en muchos sentidos, y es que el bolsillo de los consumidores no es el único que se está viendo resentido, el planeta también está pagando las consecuencias. Esto se debe al incremento del consumo de algunos combustibles que no son demasiados beneficiosos para el Medio Ambiente, como puede ser el carbón.
Por eso, la activista Greta Thunberg ha vuelto a alzar la voz al respecto y ha hablado de qué combustible es el mejor para hacer frente a la situación que estamos experimentando. Te lo contamos a continuación.
Energía nuclear, la mejor alternativa ante la crisis energética
Greta Thunberg es una de las figuras más conocidas de todo el mundo, al menos en relación con el ecologismo y con el cuidado de nuestro planeta. Todo ello con el objetivo de reducir la contaminación en el mismo.
De hecho, la activista y ambientóloga de tan solo 19 años de edad, lleva varios años ofreciendo charlas en relación con las emisiones de CO₂ que producen los distintos países e instándoles a cambiar los hábitos para reducir esta contaminación. Y los discursos ofrecidos en la ONU para buscar la manera de reducir la contaminación son de sobra conocidos por la mayor parte de la población.
Por eso a muchas personas les han sorprendido sus últimas declaraciones, en las cuales afirma que cerrar las centrales nucleares es un error dada la crisis energética que estamos experimentando a nivel mundial. Debemos recordar que, este tipo de centrales, son de las más peligrosas para el Medio Ambiente y que ya se han vivido diversas catástrofes relacionadas con las mismas (como puede ser la de Chernobyl). De hecho, la propia Greta ha intentado en varias ocasiones que se cerrasen este tipo de plantas y no se volviera a operar con ellas.
Sin embargo, Greta ha explicado el por qué de su cambio de opinión al respecto de la energía nuclear. Como bien indica Greta, con la crisis y el alto precio de los combustibles, muchos países están recurriendo al uso del carbón. Pero, al contrario de lo que podamos pensar, este puede provocar aún más daños en el ecosistema porque en muchos casos se requiere la tala de bosques enteros para conseguirlo.
Por eso la ecologista ha indicado que es un error volver a reabrir las centrales de carbón que ya se habían dejado de utilizar durante estos últimos años teniendo las nucleares ya abiertas. En primer lugar, porque supone un coste absurdo y, por otro lado, porque el carbón es mucho más contaminante que la propia energía nuclear, como ha indicado la propia Greta.
Este cambio de parecer ha dejado descolocados a muchos de los seguidores de la activista, si bien es cierto que se trata de una postura comprensible dada la situación que estamos viviendo con motivo de la Guerra de Ucrania y la crisis energética actual. Solo nos queda ver si su opinión es escuchada y da lugar a un parón en el consumo de carbón que ha venido incrementándose durante los últimos meses.