Loading...

¿Limpias tu nevera habitualmente? Esta es la forma correcta para evitar la acumulación de gérmenes

Utiliza productos libres de químicos para el mantenimiento de la nevera

El mantenimiento de la casa no es solo tener el piso o muebles libres de polvo, se refiere a estar al día con el cuidado de todos los elementos dentro del hogar, especialmente de los electrónicos o utensilios de la cocina. La nevera, por ejemplo, es un artículo esencial en la vida de todos, pues en ella se guardan algunos de los alimentos que se consumen. En ese sentido, es necesario saber la forma correcta de limpiar la nevera ya que existe el riesgo de que se acumulen gérmenes que dañen la comida, se acorte la vida útil de la nevera o las personas sufran de algún tipo de alergia como consecuencia del mal estado del interior del frigorífico.

La limpieza de la nevera es indispensable para su buen funcionamiento, cuidado de los alimentos y para la salud. En ocasiones se descuida el aseo de este electrodoméstico porque a simple vista la suciedad no es evidente, sobre todo si no es que se les cae algo de comida o bebida en su interior. Lo cierto es que, tratándose del sitio donde se guardan los alimentos perecederos debe ser el más impecable de todos. Aquí no es suficiente con un trapo húmedo para cumplir con la limpieza, pues hay detalles y espacios que requieren mayor atención.

¿Cuál es la manera correcta de limpiar la nevera?

Lo primero que debes saber es que la limpieza se divide en dos partes: frigorífico y congelador. No es necesario utilizar productos comerciales, basta con un poco de agua templada, bicarbonato o vinagre, pero si lo prefieres procura que los productos de limpieza no sean de los que sueltan sustancias nocivas o estén fabricados con abrasivos, tampoco de esos que generan mucha espuma. Recuerda que vas a limpiar el lugar donde se guardan los alimentos que comerás luego.

Limpieza de la nevera

Limpiar el refrigerador

Debes sacar todos los productos y alimentos del frigorífico. Clasifica los que están caducados o estropeados y reorganiza los que continuarán dentro de la nevera. Es recomendable ponerlos en bolsas térmicas para evitar que el calor pueda dañarlos mientras realizas la limpieza. Ten en mano el envase con la solución preparada de agua templada con vinagre o bicarbonato y dos paños suaves (con uno quitas el sucio y con el otro secas las partes más delicadas).

Las partes extraibles, es decir, estanterías y accesorios, deben ser desmontadas a fin de llegar a todos los rincones del refrigerador. Utiliza agua y jabón para lavar todo lo extraído de la nevera y procede a efectuar la limpieza del interior. Puedes apoyarte de una toalla para que absorba el agua que va cayendo mientras haces el trabajo. Procura que no quede ningún rincón sin limpiar, especialmente las ranuras de las estanterías.

Al finalizar regresa todo a su lugar. Las piezas lavadas deben estar secas. No olvides que las gomas de la puerta también forman parte de la limpieza. Lávalas y sécalas. Unas gotas de aceite permitirán que se mantengan blandas y no afecte la refrigeración de los alimentos.

Limpieza del congelador

Así como con el refrigerador, saca todo lo del interior del congelador y guarda en bolsas térmicas para que no se rompa la cadena de frío. Si tu nevera es de las que hace hielo, deja la puerta abierta por varios minutos para que se vaya descongelando. Una vez que se suelte el hielo puedes ir quitándolo poco a poco, eso sí, no uses cuchillas o herramientas de acero para ese trabajo, ya que se pueden dañar las resistencias.

Utiliza una mezcla de agua templada y vinagre a partes iguales para quitar cualquier impureza y rastros de líquido derramado por comida cruda. Esta solución también ayuda a eliminar cualquier germen que se encuentre en el congelador, tanto en las paredes interiores como en la puerta. Con un paño humedecido saca la mezcla, puedes repetir el proceso para una limpieza más profunda.

Antes de regresar las cosas a su lugar, seca las paredes del congelador y comprueba que el termostato esté bien configurado. Un buen consejo es no colocar los empaques  de comida en contacto directo con las paredes. También se recomienda distribuir los alimentos en los compartimentos correspondientes.

Salir de la versión móvil