¿Te has detenido a pensar la cantidad de dinero que gastas en tampones y toallas sanitarias desechables?, ¿has imaginado el desperdicio que produce una sola mujer a lo largo de un año?, ¿o toda su vida? Esto, sin contar con la limpieza e higiene íntima, son cantidades que individualmente parecen mínimas en comparación a la contaminación global, ahora bien, calcula cuánto sería por las más de 24,2 millones de mujeres solo en España. Preocupante, ¿no?
Además de eso, estos productos absorbentes contienen residuos de sustancias químicas dañinas relacionadas con el cáncer, alternación hormonal, problemas de fertilidad, irritación, alergias y sarpullidos. Por suerte, el mundo no se detiene y la evolución es parte de la vida, y así como se puede limpiar y esterilizar la copa menstrual, también se han fabricado y comercializado toallas reutilizables. Si has comprado una y no sabes cómo lavar compresas de tela ¡Sigue leyendo! Es más fácil de lo que crees y si la cuidas bien ¡Te acompañará por años!
¿Qué son las compresas de tela?
Las toallitas higiénicas tienen un elevado impacto en el medio ambiente, puesto que son desechables y son un desperdicio sólido que se degrada muy lentamente. De hecho, se ha demostrado que son una de las causas de sistemas de alcantarillados tapados, tanques sépticos y de suciedad en las playas. Es por ello que nacieron las compresas de tela ecológicas y reutilizables como una opción sostenible, natural y saludable, capaz de absorber el flujo menstrual sin perjudicar al planeta y de forma más confortable y respetuosa con el cuerpo humano.
Están diseñadas con capas internas de tela de algodón orgánico absorbente y sin tintes, cubiertas por lo general por una capa de tela blanca para que sea posible percibir a simple vista si está sucia o no. Además de eso, incorpora capas con tejido waterproof (impermeable) que encierra el líquido, evita que traspase y que se derrame una vez está llena. Sumado a eso, gracias a que es un tejido natural, es transpirable, lo cual permitirá a tu piel respirar y no altera el pH vaginal ¡Es un ganar-ganar!
Cómo lavar las compresas de tela
Si lo único que te detiene de comprar una compresa de tela son las dudas como: ¿Se puede lavar en lavadora o necesita remojo?, ¿requiere un limpiador especial?, ¿cómo se salen las manchas?, ¿cuál es la forma de lavarlas para que queden 100% desinfectadas? ¡Calma, respira! Te tengo una buena noticia: lavarlas es sencillo, rápido y no tienes que correr al supermercado a buscar un producto de limpieza especial, solo sigue estos pasos a continuación:
Enjuaga y déjala en remojo
Una vez hayas terminado de usarla, ve de inmediato mientras la sangre sigue fresca y enjuágala con agua templada bajo el grifo para que la presión ayude a que salga más fácil. Es importante recordar que no debe ser agua fría o a máximo 30° C, de lo contrario, si está caliente se fijará la sangre al tejido.
Ahora bien, si el flujo ya está seco o fue muy abundante, lo recomendado es dejarla en remojo una o dos horas en agua fría con 5 a 10 gotas de árbol de té (es un excelente desinfectante natural).
Lavar a mano o en lavadora
Cuando ya se haya remojado un buen rato y se haya desprendido la sangre, es momento del lavado profundo. Te preguntarás ¿Se debe lavar a mano o a máquina? Es indiferente, puedes hacerlo como tú prefieras de esta manera:
- Si lo haces en la lavadora, lo adecuado es una temperatura de 40° C, jabón neutro, un ciclo de lavado para algodón y centrifugado suave.
- Si lo haces a mano, se dan las mismas condiciones, es decir, agua tibia, jabón para tela delicada y frotar con las manos o con un cepillo de cerdas suaves.
- ¿Hay manchas que no salen con el lavado antes explicado? Prueba dejándolas en remojo con agua oxigenada o percarbonato de sodio, aunque pueden decolorar ligeramente el estampado con el tiempo, son la mejor elección para remover las marcas persistentes.
¡Olvídate de la lejía o suavizante!
No se recomienda aplicar lejía ni quitamanchas químicos, recuerda que se trata de una prenda que utilizarás directamente en tu zona íntima y lo último que se busca es causar una reacción alérgica accidental, además, tampoco es buena ideal verter suavizante de telas, ya que origina una capa impermeable en el tejido que repercute en la correcta absorción del flujo y disminuye su función.
A la hora de secarla, no uses la secadora a elevadas temperaturas, mucho menos radiadores, pues podrían estropear la tela. De preferencia solo exprime muy bien y déjala que se seque al sol para eliminar cualquier microorganismo y olores residuales.
A pesar de que no tienen la popularidad que merecen, sin duda las compresas de tela son una maravilla ecológica moderna, libres de agentes químicos, hipoalergénicas y capaces de prevenir la desagradable comezón y la incomodidad. Si se le dan los cuidados adecuados, su tiempo de vida útil puede ser de 3 a 5 años. ¡Imagina cuánto ahorrarás!