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Asi es como debes limpiar la parrilla de la barbacoa para eliminar restos de alimentos

Limpiar la parrilla no es tan complicado como parece, solo necesitas media cebolla, bicarbonato y vinagre.

Los alimentos asados, además de ser más saludables, ¡son deliciosos! No importa que época sea, si hace frío o calor, si es de noche o de día, las verduras, carne, pollo, pescado e incluso las pizzas suben otro nivel cuando se trata de cocinarlas a la parrilla.

No obstante, que sean “rústicas” no quiere decir que nunca se ensucien o que no ameriten una limpieza paulatina. Con el tiempo y el constante uso, se llenarán de residuos de grasa, óxido y suciedad cotidiana, así que más te vale darles un correcto -y frecuente- mantenimiento para que sigas siendo el/la rey/reina de las parrilladas en reuniones familiares y con amigos.

Hoy te revelamos 3 formas de limpiar la parrilla muy sucia con trucos caseros, que, aunque parece complicado, la verdad no es tan difícil como se ve. ¡No te preocupes, la dejarás como nueva y tus asados quedarán estupendos!

¿Cómo limpiar parrilla de ladrillos con vinagre? ¡Quita restos de alimentos!

Esta es una de las más comunes y de utilización tradicional, la típica en espacios abiertos y asados con la familia. Se debe asear una vez terminada cada comida y lo más recomendable es hacerlo mientras aún sigue caliente para sacar la grasa más fácil y rápido ¡Pero con cuidado de no quemarte!limpieza parrilla vinagre bicarbonato

  1. Impregna un cepillo de alambre (si es de hierro) o de cerdas plásticas (si es enlosada) en vinagre de limpieza.
  2. Frota con fuerza toda la superficie de la parrilla. El ácido del vinagre es capaz de ablandar los restos para sacarlos.
  3. Lávala con agua tibia para finalizar y ponla sobre las brasas para acabar con las bacterias residuales.
  4. Cuando las brasas estén frías, sácalas y deshazte de ellas junto a las cenizas con ayuda de un cepillo y una pala pequeña.
  5. Finalmente, limpia las paredes interiores y exteriores del asador con un paño humedecido en una mezcla de bicarbonato de sodio y agua.

¿Cómo limpiar una parrilla de hierro oxidada?

Si has decidido dedicar tu domingo a preparar un asado impactante para ti y tus allegados, pero te has dado cuenta de que se ha oxidado terriblemente estando guardada, haz lo siguiente y recupérala rápidamente:

Para la rejilla:

  1. Limpia los restos de carne, grasa, pedazos de alimentos quemados y óxido adherido a las rejillas, frotando con un cepillo de alambre humedecido vinagre.
  2. De ser posible desmontarla, déjala en remojo por una hora con agua caliente, vinagre y bicarbonato para mejores resultados.
  3. Regrésala a las brasas para eliminar todo resto de bacteria alojada en ella.
  4. Lávala con agua limpia y repasa con papel de cocina o papel periódico.
  5. Para finalizar, aprovecha un trozo de carne (si es grasosa, mejor) y pásala por las varillas. Esta grasa protegerá el recubrimiento del metal y evitará que, la próxima vez que prepares una parrillada, se queden pegados los alimentos.

Nota: si no ha quedado ningún pedazo de carne, sustituye con aceite neutro.

Para el exterior e interior de la parrilla:

  1. Prepara una mezcla de bicarbonato de sodio y un poco de agua y moja paño con este limpiador casero.
  2. Pasa el trapo en las paredes para que se desprenda la suciedad lo máximo posible.
  3. En caso de que quieras limpiar una parrilla de acero inoxidable en el interior, pasa un paño con aceite de tu preferencia para crear una capa protectora de la superficie.

Limpiar parrilla con cebolla ¿Es posible?

Sí, e incluso el limón, también es útil para atacar estas superficies con demasiada grasa adherida.

¿Cómo limpiar una parrilla eléctrica?

Cuando se trata de una parrilla eléctrica varía un poco el proceso de limpieza, puesto que es mucho más delicada que el hierro o el acero sin electricidad:

  1. Lo primero que debes hacer es apagar y desconectar la parrilla eléctrica.
  2. Hecho esto, moja un paño en agua limpia y colócalo sobre la parrillera, cierra la tapa y enciende la parrilla eléctrica (como si fueses a cocinar una barbacoa). Recuerda que el paño no debe estar empapado sino húmedo para que no se esparza el agua alrededor y ocurra un accidente.
  3. Espera un minuto hasta que notes que empieza a salir humo del vapor. Apágala, ábrela y saca el trapo que ahora ha absorbido gran parte de la grasa y suciedad.
  4. Con un cepillo de cerdas suaves o espátula de plástico, elimina los residuos pegados a la superficie de la parrilla.
  5. Pasa un paño humedecido en agua para limpiar completamente cualquier resto que haya quedado incrustado ¡Y listo! Ya puedes usarla nuevamente.

Limpieza y mantenimiento de parrilla: Recomendaciones finales

No olvides que, aunque sinceramente no quedan muchas ganas después de comer y el cansancio te gane la partida, este aseo es idóneo realizarlo una vez finalizado el asado, puesto que se aprovecha el calor del fuego para ablandar los restos pegados tanto dentro de la parrilla como en las rejillas.

Recuerda mantenerla alejada de sitios húmedos, cerca de albercas o al aire libre cuando hay chubascos o lluvia, pues se oxidarán de manera acelerada. Tápala con una lona cuando ya no la estés utilizando para protegerla del rocío, el polvo excesivo y de cualquier insecto que pueda meterse en su interior.

Y si luego de todo este proceso aún no queda limpia, incluso cuando la has cepillado con energía, lo ideal es sustituir por una parrilla de hierro fundido, que, además de calentarse más rápido, los resultados de cocción son mucho más favorables y su vida útil es más larga.

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