¿Me creerías si te digo que hoy en día la limpieza del hogar está de moda? La evidencia más clara de ello son las redes sociales (Instagram, TikTok, Facebook e incluso YouTube), que están invadidas con videos de “cleantokers” que dan trucos y consejos para ordenar o limpiar de manera más eficaz, rápida y gastando menos dinero.
No obstante, además de mostrar técnicas para asear u organizar como un experto, los influencers de las labores domésticas expresan como dedicarse a estas tareas diarias ha ayudado a calmar la ansiedad y los nervios (La gurú Marie Kondo lo confirma). Sin duda este es un tema bastante interesante que hemos decidido profundizar, así que sigue leyendo y entérate cómo limpiar la casa para aliviar el estrés y la frustración.
7 consejos para calmar ansiedad y estrés con la limpieza del hogar
Es un fenómeno extraño, pero es verídico: limpiar y ordenar son poderosas herramientas antiestrés y también favorecen a la reducción de episodios de mucha ansiedad. Y no, no tiene nada que ver con productos químicos caros, ni los mejores electrodomésticos, por el contrario, se trata de reducir el desorden (pilas de ropa, objetos por doquier) y trabajar menos con trucos prácticos, sencillos y eficaces. Toma nota de las siguientes recomendaciones:
- Ordena antes de limpiar: No es posible una buena y amena jornada limpieza sin una previa organización. Lleva todo a su sitio, recoge lo que esté en el suelo y luego procede a limpiar lo que esté sucio. ¡Te ahorrarás muchas molestias!
- Establece un horario: La planificación te lleva a la grandeza y distribuir tu tiempo es clave para lograr todo lo que te propongas. Específica un lapso para cada tarea y trata todo lo posible en cumplirlo. Por ejemplo, ordena la cocina y lava los platos al despertar y haz lo mismo antes de ir a dormir, así podrás dedicarte a otra labor durante el día y despejarás tu mente.
- Pon música: Una de las maneras más comunes —y efectivas— de encontrar motivación para la limpieza es reproducir una buena playlist. No obligatoriamente debe ser Abba o Alejandro Sanz, también puedes crear la tuya personalizada para cantar a todo pulmón mientras le das amor a tu casa.
- Ventila todas las mañanas: ¿Hay algo más molesto que el olor a cerrado/viejo? Esto es causado por el exceso de polvo y humedad, y unas de las formas más eficaces de controlarlo es dejando entrar luz y aire fresco al hogar. ¡El ánimo mejora automáticamente!
- Reparte las tareas: Si vives con familia o con un roomie, no dudes en pedir ayuda. Recuerda que no eres todopoderoso y sobrecargarte incrementa la frustración. Tener apoyo en estas labores te hará sentir aliviado, con más calma y paz interna.
- Limpia con dedicación: No limpies por salir del paso, mucho menos las áreas básicas del día a día, en especial el baño. Mantén en buenas condiciones el inodoro, el lavabo y la ducha, pues es en este entorno en el que aseamos nuestra carcasa física y, aunque no lo notes, influye en nuestro espíritu.
- Evita los químicos: Hazte con productos naturales que sean versátiles, por ejemplo: zumo de limón para atacar manchas, bicarbonato de sodio para quitar grasa, vinagre para el sarro e incluso sal para fregar los platos. ¡Gasta menos, con el mismo efecto y sin olores intensos!
Si bien es un tanto complicado lograr el “nirvana” barriendo, trapeando y ordenando, si es posible hacer de esta labor un proceso agradable. En realidad, la clave principal es hacerlo con cariño y gratitud, tratando las pertenencias con respeto, desechar o donar lo que no se use y meditar en casa paso que se dé. ¡Más que limpieza, es terapia!