Cuando cocinas usando aceite o grasas, puede ser muy tentador, cuando haces la limpieza, desechar los sobrantes vertiéndolos por el desagüe y enjuagar la sartén en el fregadero para lavarlo. Y esto es lo que hacen algunas personas, vierten regularmente la grasa sobrante en el fregadero sin pensarlo dos veces o lavan las sartenes con aceite de cocina y otras grasas sin ningún tipo de precaución. Pero, debes saber que verter grasas y aceite para cocinar por el desagüe es una de las fuentes más comunes de problemas de fontanería.
Incluso cuando las personas abren el agua caliente con la esperanza de solucionar cualquier problema, las obstrucciones causadas por la grasa pueden formarse y tener un impacto desastroso en su sistema de drenaje, tuberías y sistema de alcantarillado. A continuación, te enseñaremos que pasa sí, cuando vas a lavar, decides verter el aceite usado por el fregadero y cuáles son las formas confiables para eliminar la grasa usando un método seguro, efectivo y sin correr el riesgo de obstrucciones u otras complicaciones de fontanería.
¿Por qué la grasa es mala para las tuberías?
Si bien puede parecer conveniente verter la grasa sobrante por el desagüe del fregadero una vez que hayas terminado de cocinar, hacerlo es mucho más peligroso de lo que la gente crees. La grasa y el aceite de cocina pueden causar grandes daños a tu sistema de drenaje e incluso al sistema de alcantarillado al contribuir con los bloqueos.
El desecho inadecuado de grasas y aceites puede resultar en obstrucciones e incluso bloqueos totales en tus tuberías. La grasa que se encuentra comúnmente en la mantequilla, la carne, el cerdo, el aceite vegetal, las salsas, los aderezos, entre otros alimentos puede provocar una acumulación peligrosa a medida que se espesa y se combina con otras partículas de aceite en las tuberías. Si ocurre de estas sustancias en las tuberías, puedes restringir el flujo de agua en toda tu casa y evitar que las tuberías drenen correctamente por completo.
¿Qué pasa si echas la grasa por el desagüe?
Los bloqueos causados por la grasa son una cuestión de química: la grasa se solidifica a medida que se enfría. Una vez que viertes el aceite de cocina y los desechos de grasa en el fregadero, la sustancia se descompone en sus componentes más básicos de ácidos grasos y glicerol.
Los ácidos grasos se unen gradualmente al calcio que se encuentra en las tuberías debido a la corrosión del hormigón. A medida que los ácidos y el calcio se combinan, comienzan a formar un compuesto ceroso similar al jabón. A medida que las personas tiran más y más grasa por las tuberías de drenaje, estos compuestos sólidos se acumulan gradualmente y forman unas especies de estalactitas de grasa.
¿Cuál es la forma correcta de desechar la grasa?
Déjala enfriar por completo
Para protegerte de quemaduras accidentales y permitir que la grasa se solidifique, querrás dejar que se enfríe y se seque al aire. Permitir que la grasa se solidifique hará que sea más fácil rasparla de las sartenes y recolectarla durante la limpieza.
Raspa la grasa y déjala en un recipiente
Una vez que la grasa se haya secado y sea seguro manipularla, puedes sacarla o limpiarla con una espátula de plástico. Si mantienes regularmente un recipiente desechable para recoger la grasa sobrante, puedes raspar toda la grasa seca en él hasta que esté listo para tirarlo a la basura. Asegúrese de colocarlo en una bolsa de plástico para evitar derrames o fugas del recipiente a la basura.
Si puedes evitarlo, no dejes correr agua sobre sartenes o platos grasientos. Una vez que hayas desechado la mayor parte de la grasa seca, usa siempre una toalla de papel o un raspador de plástico para limpiar todas las ollas, sartenes y platos que hayan estado en contacto con el aceite antes de lavarlos en el fregadero.
¿Cómo desechar el aceite de cocina?
Déjalo enfriar
Al igual que con la grasa caliente, es esencial dejar pasar un tiempo para que el aceite de cocina se seque por completo para reducir las posibilidades de quemarse. Deja que el aceite se enfríe al aire libre antes de intentar desecharlo. Al igual que con la grasa, también puedes congelar o refrigerar el aceite de cocina para acelerar el proceso de enfriamiento.
Viértelo en un bote de basura
Cuando te deshaga de una pequeña cantidad de aceite, como una cacerola de aceite de oliva o de canola, simplemente puedes verter el aceite en un recipiente de basura encima de toallas de papel. También puedes verter el aceite en un recipiente desechable y poner ese recipiente en una bolsa de plástico antes de tirarlo a la basura.
Adicionalmente, puede ser prudente verter el aceite en un recipiente para usarlo nuevamente, siempre y cuando lo hayas cocinado correctamente y no lo hayas calentado más allá de su punto de humo. Reutilizar su aceite puede ahorrarte dinero y evitar que desperdicie un producto perfectamente bueno. Mientras el aceite aún está un poco tibio, fíltralo para eliminar las partículas de comida adicionales y guárdalo en un recipiente hermético en el refrigerador o congelador hasta que esté listo para usarlo nuevamente.