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Así se cultiva Aloe vera en tu maceta o en el jardín

Si quieres tener Aloe vera en casa, este es el método que debes usar para plantarla con éxito.

La planta de aloe vera es una suculenta fácil de cultivar y muy atractiva, por lo que es considerada una excelente opción para tener en interiores. Esta planta no tiene tallo o tiene un tallo muy corto con hojas gruesas, verdes y carnosas que se abren en abanico desde el tallo central de la planta.  El aloe también es útil, ya que el líquido de sus hojas se puede usar para aliviar la molestia de rasguños y quemaduras cuando se aplica tópicamente.

Antes de pensar en cómo plantar aloe vera, debes considerar que necesitarás un lugar que ofrezca luz solar directa e indirecta y en caso de que esta sea demasiada, porque vives en un lugar soleado, para evitar que las hojas se vuelvan amarillas, es posible que debas regar con más frecuencia. Si quieres saber más detalles sobre como sembrar aloe en casa, continúa leyendo y entérate de todos los detalles. También, puedes plantar una higuera en el jardín.

¿Cómo plantar aloe vera?

sembrar aloe vera

Preparación necesaria antes de plantar

Si quieres tener tu planta de aloe vera dentro de tu casa, debes elegir el tipo correcto de contenedor. Se recomienda una maceta hecha de terracota o un material poroso similar a este, ya que permitirá que el suelo se seque completamente entre riegos y también será lo suficientemente pesado como para evitar que la planta se caiga. Pero, también puedes usar una maceta de plástico o vidriada, aunque estas retendrán más humedad y deberás ser más cuidadoso.

Al elegir un contenedor, asegúrate de que tenga al menos un orificio de drenaje en el fondo. Esto es clave, ya que permitirá que se drene el exceso de agua. Las plantas de aloe vera son resistentes, pero la falta de un drenaje adecuado puede causar pudrición y marchitamiento, que es la causa más común de muerte de esta planta. Selecciona un recipiente que sea tan ancho como profundo. Si su planta de aloe tiene un tallo, elija un recipiente que sea lo suficientemente profundo para que pueda plantar todo el tallo debajo del suelo.

Ahora hablemos un poco del sustrato, las plantas de aloe vera son suculentas, así que usa una mezcla para macetas que drene bien, como las hechas para cactus. No utilices tierra de jardinería. Esta mezcla debe contener perlita, roca de lava, trozos de corteza o los tres. No es necesaria una capa de grava, bolas de arcilla o cualquier otro material de drenaje en el fondo de la maceta. Esto solo ocupa espacio que las raíces podrían estar, el orificio será suficiente.

Proceso para plantar o trasplantar una planta de aloe vera

Prepara tu recipiente colocando un pequeño trozo de malla sobre el orificio de drenaje, esto evitará que la tierra se caiga por el fondo y permitirá que el agua drene correctamente. Una toalla de papel doblada o un periódico también pueden funcionar en caso de necesidad, aunque se descompondrán con el tiempo.

Ahora prepara tu planta, retirándola de su maceta actual y eliminando el exceso de sustrato de las raíces, ten cuidado de no dañar las raíces. Si su planta tiene hijos, quítalos ahora y si su planta tiene un tallo muy largo y delgado que no cabe en la maceta, puedes cortar el tallo parcialmente. Ten en cuenta que esto es arriesgado, pero este tipo de plantas lo soportan. Si vas a cortar el tallo, colocándola en un área cálida que reciba luz indirecta. Después de varios días, se formará un callo sobre la herida. En este punto, continúe con las instrucciones de trasplante a continuación.

Continúa, llenando la maceta aproximadamente un tercio con la mezcla, luego coloca tu planta y sigue llenando el recipiente con tierra alrededor de la planta, teniendo en cuenta que hay que dejar al menos 2 cm de espacio entre la parte superior de la tierra y el borde de la maceta. Las hojas inferiores de la planta de aloe también deben descansar justo por encima del suelo.

No debes regar después de plantar, ignora tu planta por un tiempo. Después de colocar el aloe en su maceta nueva, no la riegues durante al menos una semana. Esto disminuirá la posibilidad de inducir la pudrición y le dará tiempo a la planta para echar nuevas raíces.

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