La falta de tiempo es una constante en la sociedad actual y los hogares cargan con la peor parte de esta problemática, el orden y la limpieza son relegados frente a otras actividades que la sociedad considera más importantes y es allí donde comienza el desorden, la enfermedad y el desastre. Métodos de limpieza existen por doquier y a montones, desde famosos como el KonMari de Marie Kondo y muchos otros que sin dudas emplean otro tipo de técnicas.
Trabajo, estudio y compromisos sociales dejan a las personas sin posibilidad de margen de error para el tiempo diario, de allí que surjan métodos de orden, organización y limpieza que además de conseguir el pleno objetivo de organizar, también ahorren valioso tiempo. El método Power Hour contrasta con el de Marie Kondo gracias a su intensidad y rapidez, conjugando el máximo ahorro de tiempo para no interferir con las actividades planificadas.
Ordenando a lo Marie Kondo en solo una hora
Una mirada a este proceso de orden y limpieza permite afirmar que reduce drásticamente el tiempo dedicado a las tareas de limpieza y organización de los hogares. El proceso consiste básicamente en aplicar todo el empeño posible y la máxima atención en desarrollar una tarea específica a lo largo de una hora. Evitando las distracciones y logrando orden y comodidad con la máxima rapidez.
Una de las claves fundamentales del método Power Hour al igual que el de Marie Kondo es establecer metas realistas, reconociendo que si los espacios están muy desordenados es imposible conseguirlo de un modo óptimo en solo una hora de tiempo. Sin embargo, lo importante es lograr avances significativos en estos 60 minutos, mediante el uso de la priorización y tomando en consideración que no es una tarea a profundidad.
Orden con mayor intensidad que Marie Kondo
Lo ideal es comenzar por la priorización y atender aquellos lugares que necesitan de la urgencia del caso, manteniendo presente que se debe cumplir con el cronograma establecido y que las cosas tienen que hacerse sí o sí. Y por supuesto, al ser una limpieza y un ordenamiento de todo el hogar es importante que la familia se involucre, de esta manera se tendrá la plena intencionalidad de conseguir un mantenimiento a futuro para evitar que el desorden regrese.
Las herramientas y los materiales para llevar a cabo el proceso de limpieza tienen que estar listas antes de comenzar a limpiar y a ordenar, con ello estarás eliminando la posibilidad de paralizar tus actividades por falta de un determinado producto o artículo. Recuerda que es solo una hora de trabajo intensivo y debes aprovechar al máximo cada minuto de este tiempo.
Lo ideal es utilizar una cesta o un cubo de buen tamaño para incluir todo lo necesario para la limpieza, esta organización permitirá siempre ir en una dirección “Avanzar” y no estar retrocediendo o dejando las tareas a medias. La recomendación es diseñar con antelación un perfecto circuito que recorra toda la casa, tomando en consideración que las diversas estancias necesitarán de diversos grados de atención.
Un circuito de orden y limpieza por todo el hogar
Primeramente tienes que realizar un recorrido por la habitación o estancia a ser limpiada y recoger con ayuda de una cesta todo lo que no esté en su lugar y devolviéndolo a su respectivo sitio de almacenamiento. Aprovecha esta ocasión para eliminar todas aquellas cosas que tienen que ser desechadas, ahora tendrás simplemente una superficie ordenada, con menos objetos y dispuesta a ser limpiada para eliminar la suciedad.
Los baños y las cocinas merecen una especial atención porque el método Power Hour se centra en las encimeras y en el fregadero como puntos focales a mantenerse en perfecto estado de limpieza, siempre fregando los útiles de cocina después de cada uso y guardarlos en sus respectivos lugares de inmediato. La nevera es igualmente un espacio de mucha atención para evitar que los alimentos caduquen y disfrutar de ahorros y de una alimentación sana.
Cambiar las toallas y mantener la ducha en perfectas condiciones de higiene permite disfrutar de un espacio saludable para consentir el cuerpo. La grifería y los azulejos tienen que mantenerse secos y libres de humedad para que la suciedad y el moho no regresen. Abre las ventanas de los dormitorios con frecuencia para liberar las energías negativas y lleva a cabo una meticulosa limpieza para esta área de recuperación de las energías perdidas en las jornadas diarias.