El suelo radiante se ha convertido en una de las opciones más demandadas por los usuarios durante los últimos años, debido sobre todo al hecho de que nos ayuda a reducir el consumo de calefacción y energético de nuestra vivienda, cosa que no nos viene nada mal dados los tiempos que corren.
Además, se trata de un sistema que puede colocarse con suelos de madera o de otro tipo, pero estas no son sus únicas ventajas. Así que, si quieres conocer todo lo que puede aportarte el suelo radiante, continúa leyendo.
¿Qué ventajas tiene el uso de suelo radiante en nuestra vivienda?
El suelo radiante es uno de los sistemas que nos ofrece mayor confort en nuestra casa, de hecho es el único que ha conseguido esta denominación por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Pero sus ventajas van mucho más allá de promover una sensación de tranquilidad y te las vamos a contar en detalle a continuación.
Reduce el consumo energético
Probablemente, lo que más nos importe actualmente sea reducir el consumo de nuestra vivienda y esto es algo que podemos lograr con el suelo radiante. Este sistema necesita consumir menos energía que el resto de opciones que tenemos para calentar nuestra vivienda, al menos si hablamos del suelo radiante que funciona por agua.
De hecho, en un sistema tradicional de radiadores, la temperatura con la que trabaja la caldera es de 70 °C, mientras que en el caso del suelo radiante la temperatura del agua oscila entre los 35º y 45 °C. Así que, como puedes ver, el ahorro energético que conseguimos con este sistema es bastante claro.
Es un sistema invisible
Al contrario de lo que pueda pasar con otros tipos de calefacción, el suelo radiante es una solución que no daña a la estética de nuestra vivienda ni requiere la instalación de radiadores u otro tipo de elementos adicionales, por lo que también nos permite ahorrar espacio. Este tipo de solución energética funciona mediante un sistema de tuberías que se colocan debajo del suelo y que nos permiten distribuir el calor por toda la casa.
Distribución del calor homogénea
Este es uno de los aspectos que contribuye a que sea el único sistema de calefacción que ofrece un gran confort y es que, el hecho de que funcione mediante una red de tuberías ayuda a que el calor se distribuya de una manera más homogénea por toda la vivienda. Esto provoca un calor constante y moderado que nos permite reducir la temperatura de la calefacción.
Pero además, apenas se generan corrientes de aire por convección, por lo que casi no se levanta polvo. Algo ideal para aquellas personas que sufren problemas de alergias.
Crea un ambiente saludable
El funcionamiento del mismo y el hecho de que no haya casi corrientes hace que se trate de un sistema que no disminuye la humedad ambiental. Por lo tanto, no reseca el ambiente, algo que suele afectar a nuestras mucosas y al funcionamiento general de nuestro organismo.
Por otro lado, el hecho de que no existan los radiadores en este tipo de calefacción también contribuye a evitar problemas innecesarios que ocurren con los mismos, como puede ser el caso de las quemaduras.
El calor puede regularse
Al contrario de lo que se pueda pensar, el suelo radiante también nos permite tener un control total de la temperatura de la vivienda al poder regular la climatización de cada habitación de manera aislada gracias a la colocación de termostatos en las distintas estancias.
Además, si cuentas con un sistema de domótica, también podrás programarlo para que comience a funcionar antes de que vayas a llegar a tu casa y que así la misma ya se encuentre caliente.
Compatible con muchos tipos de suelo
Si bien es cierto que la madera es uno de los tipos de pavimento que mejor funciona con suelo radiante, lo cierto es que este sistema funciona con cualquier otro que le puedas instalar, como baldosas, suelos de cerámica, etc. De esta forma, las posibilidades de decoración que nos ofrece esta alternativa son casi ilimitadas.
Puede ayudarnos a refrigerar la casa
Por si no lo sabías, existe una alternativa que nos ayuda a enfriar el suelo de nuestra vivienda y es el suelo radiante refrescante. Por lo que, cuando vayas a realizar la instalación, puedes elegir un sistema 2×1 que te permite incluir también este tipo de función para así poder aprovecharlo durante todo el año y conseguir un mayor ahorro energético.
En resumen, el suelo radiante es un sistema con muchas ventajas para nuestra casa y, sobre todo, para nuestro bolsillo. Esperamos que este artículo te haya ayudado a conocerlas un poco más en detalle.