Una de las mayores preocupaciones de la ciudadanía en la actualidad es la incesante subida del precio de la compra en el supermercado a lo largo del último año.
El repunte de febrero no ha hecho más que reforzar esa preocupación, al tratarse de la subida más alta hasta la fecha y que ha afectado a alimentos básicos como el arroz, con una subida del 2,2%, o algunos cereales, que son ahora un 5,2% más caros. Pero una de las subidas más disparatadas y que más llaman la atención ha sido la de los limones.
El aumento de precio de los limones no tiene sentido
La subida notable del precio al que se paga hoy el kilo de limones no es lo único que llama la atención. El verdadero misterio está en que, como ha explicado el periodista Javier Ruíz en La Ser, «en el campo, se pagan menos. Han bajado mucho de precio en el último año. A cambio, en el supermercado, han subido de precio y mucho».
Atendiendo a los datos facilitados por los propios agricultores, el kilo de limones se vendía el año pasado 0,24 euros, y este año ha bajado a 0,20 euros. Sin embargo, explican «luego tú te vas al supermercado y las cifras son absolutamente disparatadas, de 2 o 2,05 euros de 2022, frente a los 2,74 euros que cobran ahora». ¿Por qué se paga más por un producto cuyo coste de producción es más bajo que antes?
Esto es lo que podría estar ocurriendo con el precio de los limones
Según ha razonado el periodista tras estudiar los datos y escuchar a los agricultores, lo único que se sabe acerca de este aumento en el precio de venta final de los limones es que el margen de beneficio ha subido con lo que se paga. Si el año pasado el margen era de 756%, este año es del 900%.
Para Ruiz, la explicación no es otra que «a lo largo de la cadena, alguien se lo está embolsando». De momento no se sabe a qué responde exactamente esta subida ni a dónde va ese beneficio. Solo se sabe que el agricultor gana menos dinero y el consumidor paga más.
El efecto yoyó del IVA
Otro de los temas interesantes tratados durante el espacio radiofónico fue el del efecto yoyó de los precios. Tras la rebaja del IVA, el aumento en el coste de los alimentos de este mes ha sido igual a la bajada que se produjo con la medida, que queda así totalmente anulada.
En algunos caso, como el que hemos visto con los limones, la subida, más que a un efecto yoyó responde a un efecto rebote en el que hemos perdido más de lo ganado. Algunos de los alimentos básicos que han aumentado su precio más de lo que bajaron en enero son la leche, con una diferencia negativa del 0,2%, las patatas con un,4%, el queso con un 1,3% y la fruta, con una media del 9,6%.