Increíbles dosis de grasas monoinsaturadas y de vitamina E (25.63 mg), las almendras (Pyrus communis) son además unas exponentes que llevan la batuta en cuanto a minerales como el calcio (269 mg) para que logren una efectiva protección del corazón y de todo el sistema óseo, adicionalmente son exquisitas y ofrecen una textura y un sabor perfecto para ser empleadas en recetas saladas y dulces, logrando proporcionar incontables beneficios sobre tu salud.
Tan antiguas como la misma civilización las almendras son capaces de proporcionar un alimento saludable y sabroso al alcance de todos, la almendra destaca en la repostería española donde efectivamente mantiene un amplio uso como un ingrediente básico en muchos postres tradicionales como los turrones, los mazapanes y las tartas, pero también en helados y hasta en forma de harina, además de ser utilizada como un aperitivo ya sea de forma asada o frita contribuyendo con un sistema inmune fuerte mediante sus dosis de manganeso (2.179 mg).
Una fruta colmada de propiedades benéficas
Catalogadas como unas auténticas píldoras nutritivas que no tienen nada de desperdicio, las almendras colaboran de manera eficaz en la nutrición y en aportar oligoelementos, minerales y vitaminas en cantidades suficientes para que no falten en tu dieta.
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Una fruta proteica
Al disponer de cerca de 20 gramos de proteínas por cada 100 gramos consumidos las almendras permiten ser catalogadas como una fuente de aminoácidos esenciales, la proporción en la que estos se encuentran en las almendras las hacen las más adecuadas para suplir muchas de las específicas necesidades del cuerpo humano.
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Energía de altísima calidad
Aunque sus aportes de hidratos de carbono no son de gran significancia (9.4 %) es importante mencionar que la gran mayoría está compuesta por glúcidos de lenta absorción, de allí que el índice glucémico de las almendras sea muy bajo y perfectamente tolerado por las personas que sufren de diabetes.
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La gran mayoría son grasas saludables
Su riqueza en grasas es otra característica fundamental de las almendras, un impresionante 54 % del peso total de la almendra seca está constituido por ácidos grasos y lo mejor de todo es que el tipo de ácido graso responde a ser de los más saludables. De allí que mantengan un 65 % de grasas monoinsaturadas al igual que el aceite de oliva, logrando beneficios excepcionales para la salud del ser humano.
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Minerales y calcio en gran abundancia
Tan solo unos 30 gramos de almendras son capaces de cubrir las necesidades de calcio (10 %) diarias del cuerpo humano, si bien la cantidad podría no resultar llamativa, pero representa el doble de lo que puede proveerte la misma cantidad de leche. Además de proporcionarte el 16 % del magnesio necesario y el 18 % del fósforo sin olvidar que podrás cubrir cerca del 10 % del hierro que necesitas.
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Antioxidantes gracias a la vitamina E
También disponen de un gran poder antioxidante gracias a sus grandes dosis disponibles de vitamina E, este efecto es ideal para contrarrestar los dañinos efectos de los radicales libres y una única ración de solamente 30 gramos de almendras te permite cubrir las necesidades diarias en un 64 %. Esta vitamina logra un efecto positivo en todas las enfermedades degenerativas así como en la piel y cabello al ser liposoluble y lograr inhibir la oxidación de las grasas.
Las almendras también contienen flavonoides entre los que destacan la quercetina, un potente antiinflamatorio y que mantiene un efecto comprobado contra las alergias. Las vitaminas del grupo B también dicen presentes en las almendras, en especial la riboflavina o comúnmente denominada vitamina B2 responsable de entregarte una buena visión al ser de gran ayuda en preservar la salud cornea.
Las almendras son especialmente recomendadas en las siguientes situaciones
1. Para las mujeres embarazadas
Al ser ricas en minerales como el calcio y el magnesio son ampliamente beneficiosas para apoyar las dietas en los periodos gestacionales además tiene una propiedad denominada “galactógena”, es decir que estimula la producción de leche materna.
2. Una especial alternativa a los lácteos
Su gran aporte de calcio la hacen una sustituta perfecta para los lácteos, en especial para aquellas personas de problemas de tolerancia o para los veganos. Adicionalmente, es indicada para la correcta formación y regeneración de los dientes y del sistema óseo gracias a incluirte fósforo y magnesio. En las personas de la tercera edad su ayuda es muy destacada, ya que colabora de forma directa en corregir la fragilidad ósea y en la aparición de la osteoporosis.
3. Una fruta vigorizante (deportistas y jóvenes)
Al ser una excelente fuente de proteínas es un alimento catalogado como tonificante y reconstituyente muy especialmente en niños y en adolescentes así como para los deportistas. Su gran riqueza en ácidos grasos y en fósforo la hacen un alimento ideal para cultivar el intelecto y un alimento insuperable para el bienestar cerebral. Previniendo en bajo rendimiento intelectual, la pérdida de memoria y los molestos y súbitos cambios de humor.
4. Cualidades cardiosaludables
Si quieres conseguir un alimento que sea un bálsamo para tu corazón, las almendras deberán de mantener un sitial de honor debido a sus ácidos grasos monoinsaturados, esta saludable proporción grasa muy parecida a la del aceite de oliva permite la disminución del colesterol malo “LDL” y favorece el correcto aumento del colesterol bueno “HDL” previniendo de este modo con los nefastos accidentes cardiovasculares.
Además te incluye flavonoides, catequinas, quercetina y rutinósidos que favorecen de forma directa en que pueda disfrutar de un sano sistema circulatorio y por ende una correcta prevención de todas las enfermedades derivadas de ello. Aquí puedes ver un completo análisis de los beneficios de las almendras para la salud general.
5. Ideal para reformar tu sistema inmune
Las altas dosis de vitamina E así como de muchos compuestos catalogados como oligoelementos la convierten en una fruta que evidentemente logra relanzar las funciones de tu sistema inmunitario, con ello podrás lograr un sistema de defensa contra bacterias y virus así como de muchas enfermedades estacionales y virales.