De todos los postres que circulan alrededor del mundo, el famoso Brownie originario de Estados Unidos, se lleva el primer lugar, pues su elaboración es muy sencilla y requiere muy pocos ingredientes. Básicamente, es un bizcocho y chocolate, es muy versátil para servir solo o acompañado, lo cual lo hace muy apetecible como postre de los grandes manjares de esta temporada de fiestas de navidad.
¿Cómo prefieres el brownie, solo o con frutos secos?
Si activas al máximo tu imaginación podrás obtener combinaciones que causen delirios en pequeños y grandes, capaces de seducir a los paladares más exigentes. Pues desde su versión más sencilla, producto de la mezcla y el horneado más simple, hasta la que combina su sensación crujiente y adecuado tostado con frutos secos o incluso al combinar calor y frio al servirla con una porción de helados, se trata de ajustarlo a gustos muy diversos.
Además de sus variantes, como en la que se utiliza como base chocolate blanco, para los amantes de un estilo de vida más saludable también puede usarse un chocolate bitter o amargo, con muy poca azúcar o usando algún sustituto del dulce. Logrando así bajar los niveles de calorías y los efectos de consumo excesivo de azucares refinados.
Y si ¿Piensas que ya se acabó la navidad y tienes morriña? Mira esta receta de Buñuelos y diviértete haciéndola, no importa la época del año en la que decidas prepararlo.
Manos a la obra para preparar tus brownies
El resultado final de la receta que presentamos puede variar mucho según la calidad de los ingredientes y el tiempo de horneado, además de un ingrediente muy especial que se trata de la intención con la cual se vaya a la acción, pues desde la emoción inicial hasta el ambiente que rodea la elaboración son determinantes. Los ingredientes a considerar son los siguientes:
- 1 barra de chocolate para fundir (200 gramos)
- 3 huevos grandes.
- 4 cucharadas de azúcar morena.
- 3 cucharadas de harina de trigo.
- 150 gramos de mantequilla.
- 2 cucharadas de esencia de vainilla.
- 1 cucharada de canela en polvo.
- 100 gramos de nueces.
Al reunir todos los ingredientes puedes proceder siguiendo cada paso que sigue:
- Lo primero es derretir la barra de chocolate, que puedes hacerlo en baño de María, es decir, en un bol encima de una arrocera o cacerola con agua hirviendo o en el horno microondas. Por experiencia, recomendamos la primera opción pues es mucho más controlable en la medida en que vamos percibiendo la mágica transformación del chocolate al pasar por diferentes estados antes de diluirse completamente.
- Luego, en un bol grande colocamos los huevos, el azúcar, la esencia de vainilla y la canela en polvo. Con una batidora eléctrica o manual mezclar todo durante 3 o 4 minutos.
- Antes de mezclar todo lo anterior asegúrate de que el horno empiece a calentar a una temperatura de 150 grados, luego en el bol grande donde hicimos la primera mezcla vamos añadiendo la harina y progresivamente las nueces y el polvo de canela.
- En un recipiente rectangular rociar un poco de mantequilla o harina para evitar que la mezcle se pegue y verter toda la mezcla del chocolate fundido y los ingredientes mezclados y se dejan al horno durante 20 minutos aproximadamente.
Por último, es muy importante dejarlo enfriar de forma natural para consumirlo temperatura ambiente, y luego de unos minutos ya estará listo para cortarlo y deleitar a la familia con un postre muy sencillo, saludable y sobre todo que llenará de alegría los corazones de todos en una de las cenas más importante del año.