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5 aceites esenciales únicos para calmar el estrés y la ansiedad

Está comprobado que la aromaterapia es un bálsamo muy potente

Aceites esenciales calman estres ansiedad

Una de las causas del estrés más generalizada es provocada por las prisas, los agobios, el querer llegar a todo y sentir que te faltan horas en el día. Sobre todo, en estas fiestas navideñas que acaban de terminar; los distintos compromisos como cenas, comidas etc.., y, en definitiva, el desear estar al día y querer controlarlo todo es complicado, por lo que, además de estrés, pueden asomar la temida ansiedad.

Y ¿cómo podemos tratar de controlar rápidamente estos molestos síntomas? Se puede tratar de controlar la ansiedad mediante terapia, meditación, ejercicios de respiración e, incluso, con la aromaterapia. De hecho, estudios muy recientes, como el publicado en la revista científica ScienceDirect hace apenas dos años, demuestra que los aceites esenciales pueden ayudar a reducir los síntomas de la temida ansiedad.

¿Qué es la aromaterapia?

La aromaterapia es una forma antigua de tratar tu mente y tu cuerpo a partir de los olores naturales. Según Johns Hopkins Medicine, cuando inhalas estos aceites de origen vegetal, se envían señales directas a tu cerebro y van directamente a la amígdala cerebral responsable de tus emociones.

Qué es aromaterapia

Esta es la razón principal por la que muchísimas personas recurren a los aceites esenciales, para aliviar los síntomas de nerviosismo o, directamente, como tratamiento para la ansiedad y el estrés si eres de las que no recurren en seguida a ir al médico para que te recenten algún medicamento.

Los mejores aceites esenciales para la ansiedad

En la investigación citada anteriorimente, se citan algunos en concreto para la ansiedad y la mejora del sueño. Y entre ellos se encuentran los siguientes:

Lavanda

La lavanda es uno de los aceites esenciales más frecuentes y populares para la relajación. Está demostrado que inhalar su aroma reduce los niveles de ansiedad y mejora la inducción al sueño. Además, promueve una mente más serena y tranquila, sin pensamientos rumiantes. El aceite de lavanda actúa con tu sistema límbico, el que controla los sentimientos, por lo que lo recomendable es inhalar unas gotitas o ponerlas debajo de la almohada.

Sándalo

El sándalo, al igual que la lavanda también reduce los niveles de estrés y ansiedad. El sándalo lo puedes combinar con la lavanda en un difusor para obtener el máximo efecto sobre la relajación y una correcta higiene de sueño. Además, la mezcla de los dos, huele muy bien y te puede teletransportar a la naturaleza.

Rosa

El aceite esencial de rosa se suele usar para los masajes, pero también se ha demostrado que reduce la ansiedad y el dolor, específicamente, el dolor relacionado con el ciclo menstrual y el embarazo. Intenta mezclar este aceite esencial a una de tus cremas y masajea la planta de tus pies. Después, ponte unos calcetines, verás como la ansiedad se reduce.

Ylang-Ylang

Ylang-ylang se usa para una gran variedad de cosas. Este aceite aparte de reducir el estrés, funciona también como un sedante. Contiene linalool, que tiene propiedades antiinflamatorias y puede ayudar a reducir la inflamación. Este aceite esencial funciona bien cuando se inhala, así que, puedes introducirlo en difusores en distintas estancias de tu casa para conseguir una atmósfera relajante.

Bergamota

La bergamota es un aceite esencial que puede hacer maravillas con tu estrés. La bergamota influye y va directamente a indicarle a tu cerebro que libere dopamina, disminuyendo el estrés y mejorando tu estado de ánimo. Este aceite también puedes meterlo en un difusor en casa o comprarlo en un pequeño botecito que viene en los herbolarios.

Pachulí

El pachulí se usa de manera tradicional en la medicina ayurvédica como un poderoso calmante para el estrés, aunque la investigación sobre él, en realidad, es bastante limitada. Sin embargo, se le considera por excelencia otro de los aceites imprescindibles para controlar y mejorar los niveles de estrés y ansiedad.

Geranio

El aceite esencial compuesto de la flor de geranio se ha estudiado, sobre todo, en mujeres embarazadas y se ha llegado a demostrar que es útil para reducir el estrés y la ansiedad durante el proceso del parto. Se cree que tiene efectos calmantes, y que también pueden ayudar a reducir los alto niveles de estrés. Este aceite puede usarse de forma muy sencilla, oliéndolo directamente de la botellita. Puedes llevarlo en el bolso y, cuando lo necesites, puedes ponerte unas gotas en la muñeca y olerlo de vez en cuando si te sientes estresada.

Naranja

El aceite esencial de naranja también se ha revisado en estudios relacionados con las mujeres embarazadas. En dichos informes, se ha llegado a corroborar cómo inhalar este aceite esencial a diario reduce los niveles de estrés y ansiedad en las mujeres que pasan por embarazos algo complicados. En concreto, llegaron a demostrar como el inhalar este aceite combinándolo con otros como el sándalo era muy beneficioso durante el proceso del parto.

¿Son seguros los aceites esenciales?

A grandes rasgos, sí. Pero también es cierto que los aceites esenciales no están del todo regulados, por lo que la calidad de un producto, según las marcas en el mercado, pueden variar mucho. Según Johns Hopkins, la difusión de aceites esenciales en los espacios públicos, o incluso en las casas difiere según las personas, pues hay a gente que, incluso, este tipo de olores les molesta.

Un ejemplo de esto es que, el aceite esencial de menta suele recomendarse mucho para los dolores de cabeza, pero los bebés menores de 3 años pueden revolverse mucho. Siempre lo más recomendable es acudir a un herbolario o un médico.

¿Cuáles son los efectos secundarios?

Entre ellas se encuentra: las reacciones alérgicas, la irritación y ardor de la piel, los dolores de cabeza y los taques de asma.

¿Qué aceite se considera mejor para la ansiedad?

Puedes aplicar, aparte del aceite de lavanda, el más poular de todos, aceite de coco, pues también es muy bueno. Puedes echarte un par de gotitas en cada muñeca y frotar ambas piel con piel para que el olor penetre, y oler de vez en cuando.

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