El azúcar es un alimento que siempre ha estado presente en nuestra dieta, pasando desapercibidas sus posibles consecuencias para nuestra salud. Y es que, al contrario de lo que podamos pensar, tomarlo en grandes cantidades puede generar diversas dolencias.
Pero, ¿cómo podemos reducir el consumo de azúcar? ¿Existen alternativas más saludables? Estas son las cuestiones que vamos a abordar hoy así que, si quieres saber la respuesta, lo mejor es que sigas leyendo.
¿Por qué no es aconsejable consumir azúcar?
El azúcar es un ingrediente que, a día de hoy, se encuentra presente en la mayor parte de los alimentos que consumimos. De hecho, si miras la etiqueta de muchos productos, verás como nuestro amigo azucarado suele estar siempre en el listado de los mismos.
Esto nos conduce, de manera inevitable, a un mayor consumo del que pensamos de este alimento y algunos de los problemas que podemos tener si consumimos azúcar en exceso son los siguientes:
- Aumenta el riesgo de tener enfermedades del corazón e hipertensión.
- Mayor probabilidad de sufrir diabetes u obesidad.
- Aparición de problemas de memoria por el fallo de estructuras cerebrales.
- Desarrollo de otros trastornos psicológicos como la ansiedad, la depresión o incluso ciertas demencias como el Alzheimer.
Es decir, se trata de un alimento que puede tener consecuencias muy graves para nuestra salud y, como tal, debemos tratar de limitar su consumo lo máximo posible. A continuación te explicamos la mejor manera de lograrlo.
6 consejos para dejar de tomar azúcar
Dejar de lado el azúcar puede parecer una tarea relativamente sencilla, pero lo cierto es que este alimento puede provocar adicción sin que nos demos cuenta. Es decir, puede activar en nosotros la necesidad de consumirlo por encima de todo.
Esto implica que tenemos que tener mucha fuerza de voluntad e incorporar ciertos hábitos que nos ayuden a dejarlo, pero no te preocupes, hoy te vamos a dar 8 sencillas pautas para reducir el consumo de azúcar.
1. Elimina las tentaciones
Puede parecer algo obvio, pero lo cierto es que se trata de uno de los consejos más efectivos que podemos darte: aléjate de todo aquello que tenga un alto contenido de azúcar o evítalo en la medida de lo posible.
Los bollos, las bebidas azucaradas, las tartas, etc. Pueden resultar muy atractivos, pero lo cierto es que no son para nada beneficiosos para nuestra salud, ya que solamente nos aportan calorías vacías y terminan generando una sensación de necesidad que hace que queramos seguir consumiéndolos.
Por eso te recomendamos tacharlos de tu lista de la compra para que no vuelvas a tener la tentación dentro de tu cocina. Porque, no nos engañemos, si está en un armario de la cocina vas a terminar comiéndotelo más tarde o más temprano.
Relacionado con esto está el hecho de tratar de evitar también aquellos locales en los cuales se venden este tipo de productos. Son ganas de tentarte con productos que sabes que no deberías consumir y lo único que vas a lograr es estropear tu estado anímico.
2. Evita los alimentos precocinados
Nuestro estilo de vida y una elevada carga de trabajo suelen ser dos de los motivos que hacen que muchas veces recurramos a los alimentos precocinados para alimentarnos. Pero, ¿sabías que este tipo de productos también tienen una elevada carga de azúcar?
De hecho, se trata de alimentos que suelen presentar más desventajas que otra cosa porque incorporan muchos conservantes que no son nada adecuados para nuestro cuerpo. Así que ya sabes, elimina estos productos de tu vida.
3. Comienza a cocinar tu comida
Sabemos que es una de las cosas que más cuesta. En primer lugar, porque muchas veces no tenemos el tiempo que nos gustaría como para poder meternos en la cocina y preparar el almuerzo, pero también porque en ocasiones no nos gusta cocinar y lo que ello conlleva.
No obstante, lo primero que debes saber es que cocinar tiene muchos beneficios para la salud. Y, entre ellos, está el hecho de que nos ayuda a comer mejor y además de una manera más consciente. Es decir, sabiendo las propiedades que tiene cada uno de los alimentos que estamos incluyendo en nuestra dieta y también eliminando los conservantes y azúcares que no deberían estar presentes en la misma.
Si no te gusta demasiado cocinar, te aconsejamos que comiences por recetas sencillas que no tengan demasiados pasos ni una excesiva dificultad. Verás como, poco a poco, le vas cogiendo el tranquillo.
4. Conoce bien a tu enemigo
Sí, hablamos del azúcar. Porque, por si no lo sabes, en ocasiones aparece en los alimentos utilizando pseudónimos que pueden hacer que no lo reconozcamos a la primera. Por eso es importante que empieces a detectar aquellos términos que te indican que estás tomando azúcar como son:
- Sacarosa
- Glucosa
- Fructosa
- Melaza
- Miel
- Azúcar moreno
Cualquier producto que contenga alguna de estas palabras, contiene más azúcar del recomendado y puede terminar afectando a tu salud a largo plazo.
5. Opta por snacks más saludables
Seguro que has oído que la fruta es buena para tu salud y que deberías comer varias piezas al día, pues es el momento de ponerlo en práctica. Los motivos son variados, pero principalmente la gran ventaja es que cuentan con una menor cantidad de azúcar y además no es procesado, por lo que es más adecuado para nuestra salud.
Pero, por si esto fuera poco, resulta que también tienen un importante efecto saciante que te va a ayudar a controlar mejor tu dieta par así no recurrir a otros productos menos saludables. Así que recuerda, consume al menos 2 piezas de fruta al día.
6. No bajes nunca la guardia
En ocasiones, cuando pasamos un periodo largo sin consumir azúcar, nos sentimos confiados y pensamos que nunca más vamos a caer en la tentación. Nada más lejos de la realidad.
Recuerda que hemos dicho que el azúcar produce adicción por lo que, por mucho que no quieras, va a llegar un momento en el cual vas a querer consumirlo de nuevo. Incluso puede provocarse un efecto rebote que haga que tengas un atracón de productos dulces.
Por eso lo mejor es tener un equilibrio y reducir la cantidad de azúcar de manera moderada. Es decir, puedes empezar por eliminar algunos alimentos, pero darte un capricho azucarado un día a la semana e ir sacándolo de tu vida cada vez más. Esto hará que te resulte mucho más sencillo decirle adiós.
En resumen, consumir azúcar es algo que no se puede evitar, pero cuyo exceso puede provocar daños en nuestro organismo. Esperamos que estás pautas te ayuden a eliminar los azúcares refinados de tu dieta para así poder cuidar tu salud de una manera mucho más eficaz.