Si acudes a una charcutería y ves una paleta ibérica, seguramente pienses que se trata de una pata de jamón serrano de menor tamaño. Esto es algo totalmente normal si no conoces las diferencias entre un embutido y otro.
La principal diferencia radica en el lugar de procedencia. Mientras que el jamón ibérico se obtiene de las patas traseras del cerdo, la paletilla o paleta ibérica proviene de las patas delanteras. Sin embargo, no se trata del único elemento diferenciador: hay más que explicaremos más adelante en este mismo artículo.
Las diferencias entre el jamón y la paleta ibérica
Como hemos dicho en la introducción, son embutidos muy parecidos, pero con diferencias palpables, entre las cuales encontramos como las más destacables las siguientes:
- Tamaño y peso: los jamones son más largos que las paletillas, con una longitud que puede llegar hasta los 90 centímetros aproximadamente. La longitud de la paletilla suele estar entre los 60 y los 70 centímetros. Esta diferencia en sus tamaños lógicamente repercute también en su peso: las paletillas rondan los 5 kilos de media, y los jamones suelen oscilar entre los 7 u 8 kilos.
- Sabor: no queremos incidir en el gusto de nadie, porque sobre ello no hay nada escrito, como se suele decir; pero es cierto que el jamón ofrece una experiencia más variada y compleja en cuanto a sabores, mientras que la paleta ibérica tiene un sabor más intenso y libre de matices, ya que su tiempo de curación es diferente.
- Curación: este punto está directamente relacionado con el anterior. Los jamones ibéricos necesitan de 15 a 36 meses y minuciosos cuidados para su curación. En cambio, las paletillas, al ser más pequeñas, necesitan de 12 a 24.
- Cantidad de carne: en la paletilla, la porción de tocino es mayor, así como la de hueso. Este hueso ocupa una superficie importante, por lo que la pieza cuenta con menos carne: tanto es así que su proporción de grasa y hueso puede alcanzar hasta un 60%. Por lo tanto, con el jamón disfrutarás de una mayor cantidad de carne.
- Precio: la paletilla suele ser más económica por ser más pequeña y ligera. Además, como hemos explicado antes, tiene una menor cantidad de carne que el jamón ibérico, y por tanto es menos rentable.
¿Qué es más recomendable comprar: jamón o paletilla?
Responderemos a esta cuestión sin tener en cuenta las preferencias de cada uno. Puede que te guste más el jamón o la paletilla, pero estos criterios que te daremos son 100% objetivos:
- Cantidad de personas: si no somos muchos en casa, lo recomendable es comprar una paleta ibérica. Si, por el contrario, somos muchos y nuestro consumo es más elevado, es mejor decantarse por el jamón.
- Precio: por lo general, siempre es más económica la paleta ibérica que el jamón, y, por tanto, si estamos pasando una mala etapa económica, es mejor decantarse por ella.
- Comodidad del corte: si para nosotros es fundamental cortar este embutido en casa, es mejor comprar jamón, porque su corte es mucho más práctico.
- Variedad y potencia de sabores: no hay duda de que el jamón es el rey absoluto en este aspecto. No es que la paleta ibérica tenga un sabor desagradable (ni mucho menos), pero no hay comparación entre una pieza de embutido y otra.