Si hay algo que haya llamado la atención de manera constante en cada aparición pública de la Reina Letizia, han sido los diferentes looks que ha lucido acorde a cada evento. La monarca española se ha convertido en inspiración y un icono del mundo de la moda, a través de los distintos estilismos que han despertado todas las miradas consiguiendo una imagen perfecta que siempre ha terminado de completar de manera idónea a través de los accesorios.
Puede parecer un aspecto insignificante en comparación a lo llamativas y el protagonismo que adquieren siempre las prendas de vestir, pero los accesorios en general y las joyas en particular, siempre han sido el broche de oro a un look perfecto del que no haya nada que reprochar. Por supuesto la Reina Letizia jamás descuidó ese detalle y tras grandes exhibiciones, ahora ha sido la princesa Leonor quien se ha encargado de rescatar algunas de las piezas más icónicas que lució en el pasado la monarca española.
Una digna heredera del joyero de Letizia
Entre los diferentes actos y compromisos a los que acude la Familia Real española, hay una fecha que sin duda está marcada en rojo en el calendario año tras año. Se trata de la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias, una de las tardes más esperadas para los seguidores de la monarquía que en esta ocasión se celebró el pasado 28 de octubre. Como no podía ser de otra manera, Oviedo se encargó de acoger a los Reyes y a sus hijas, mientras que el Teatro Campoamor fue el lugar escogido para la entrega de premios.
Felipe y Letizia comparecieron junto a sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, manteniendo el plan habitual para la entrega de estos importantes galardones, que se encarga de organizar la Fundación Princesa de Asturias. Para la ocasión toda la Familia Real española aparece con sus mejores galas, a una cita que reunió en total a más de 1300 personalidades entre las que la moda no pasó desapercibida a lo largo de la alfombra azul que se desplegó a las puertas del emblemático teatro, para recibir a los invitados.
Sin embargo, la gran protagonista de la jornada fue, sin lugar a dudas, la Princesa Leonor. Desde que se convirtió en la heredera al trono, la joven siempre ha estado en el foco de atención y en esta ocasión se llevó todavía más protagonismo con su elección. La princesa se decantó por un impecable vestido de Michael Kors que lució a la perfección con la ayuda del joyero de su madre, la Reina Letizia.
La heredera de la Corona abrió el baúl de las joyas de la Reina, para pedirle prestado una de las joyas más valiosas que guarda la monarca española en su colección personal: unos pendientes de Chanel que Letizia cedió a su hija, pese a ser una de sus piezas favoritas ya que la hemos visto lucir esos pendientes en un sinfín de ocasiones durante sus actos públicos.
Leonor sigue los pasos de su madre
La imagen no pudo ser más representativa y al mismo tiempo, se encargó de demostrar una evidencia de la que ya no hay dudas: la Princesa Leonor sigue los pasos estilísticos de su madre, sin olvidar su propio estilo. Y es que la heredera a la Corona ha demostrado su capacidad para adaptar las tendencias a su gusto personal, sabiendo que para ello ha tenido una buena guía. La Reina Letizia ha sido inspiración y es que de vez en cuando, ya habíamos visto a la joven rebuscar en el armario de su madre, como lo ha hecho ahora en su joyero.
En cuanto a la pieza que ha rescatado Leonor, se trata del modelo Plume de Chanel, y como su propio nombre indica, son unos pendientes en forma de pluma. La joya fue adquirida hace años y en su momento su valor oscilaba sobre los 6.800 euros, mientras que ahora la icónica marca francesa los presenta en su página web en una clara tendencia ascendente que los sitúa en 8.350 euros.
Se trata de una pieza especial, que ha sido realizar en oro blanco de 18 kilates y diamantes. Esta joya fue un regalo que la Reina Letizia recibió por parte de los Reyes de Jordania durante su viaje oficial a España en noviembre de 2015. Fueron adquiridos por Rania de Jordania en el propio París, justo antes de aterrizar en territorio español, y la monarca española decidió estrenarlos en noviembre de ese mismo año durante un encuentro con la monarca jordana.
Desde entonces hasta ahora, han sido múltiples las ocasiones en las que Letizia ha utilizado esta pieza, la cual, no es la primera que comparte con su hija Leonor. La princesa ha abierto en alguna que otra ocasión el joyero de su madre, sin ir más lejos, el pasado viernes por la mañana hacía lo propio para acudir a las audiencias que mantuvieron con los galardonados de los Premios Princesa de Asturias en el Hotel Reconquista.
Para esa ocasión la princesa lució un conjunto de tweed, en el que decidió incluir otros pendientes también pertenecientes a la Reina Letizia. De nuevo apostaba por la forma de lágrima, en esta ocasión con una pieza de diamantes que, casualmente, la monarca española estrenó en esa misma audiencia en el año 2014. Justo después de haberse convertido en la Reina de España.