A nadie se le escapa que el jamón ibérico es uno de los alimentos clave de la gastronomía española. Lleva desde hace mucho tiempo siendo uno de los mejores aperitivos que se pueden consumir en España. Tanto ha sido el impacto que ha tenido en su tierra de origen que cabe preguntarse: ¿Qué pensarán en el extranjero de este producto cárnico tan bueno?
Porque sí: el jamón ibérico ha traspasado fronteras y ha llegado a los lugares más recónditos del planeta, entre los que destacan gigantes como China. Si quieres saber qué opinan fuera de España de uno de sus productos alimenticios más simbólicos e importantes, continúa con tu lectura. Estamos seguros de que te resultará un tema muy interesante.
Qué piensan sobre el jamón ibérico más allá de las fronteras de España
Nos centraremos sobre todo en las opiniones de los ciudadanos de los principales mercados internacionales, que son Estados Unidos y China. La gran mayoría de ellos, tanto de un país como de otro, piensan que el jamón ibérico es pollo, toro o incluso pescado. Tampoco tienen mucha idea al principio de cómo es mejor consumirlo: si en frío, si demasiado salado, si dulce, si cocinado o en crudo… Por lo tanto, la primera reacción que tienen cuando se plantan delante del jamón ibérico es de desconcierto y confusión.
No obstante, los que lo prueban de la forma más adecuada acaban enamorados de este producto cárnico. No es para menos, y es que es una auténtica delicatessen por su sabor y su textura. De todos modos, los embajadores del jamón ibérico creen que la primera impresión de este alimento en el extranjero se tiene que cambiar. Por tanto, recomiendan una estrategia con objetivos muy claros: la estandarización del lenguaje, la formación para que la gente conozca el producto bien, una mejora de la imagen internacional del jamón… En definitiva, a pesar de que este producto cada vez tenga más aceptación fuera de España, aún queda mucho trabajo por hacer.
Un formato de consumo de jamón ibérico que ha triunfado
Para incrementar la frecuencia del consumo de jamón, se ha inventado el concepto de Mini Tapa. Combinar un pedazo del mejor jamón ibérico con un buen pan, unos huevos de codorniz… por poner algunos ejemplos, ha funcionado muy bien tanto en España como en el extranjero. Sin duda, esta es una muy buena manera de introducir este productazo español en los mercados internacionales, y es que todos se chupan los dedos con estas elaboraciones. ¡El jamón ibérico es reconocido como se merece!