Puede que aún tengas pendientes tus vacaciones o que el fin del verano venga con un cambio de vida lejos de las fronteras españolas. Sea como fuere, si pensabas meter jamón ibérico en tu maleta para llevar mejor la nostalgia, asegúrate de que tu país de destino no te obligue a despedirte de él en la aduana.
Resulta que el jamón, ese tesoro de nuestra alimentación que tanto amamos y que es capaz de llevarnos de vuelta a casa estemos en la parte del mundo en la que estemos, puede ser motivo de controversia y sanciones en algunos rincones del mundo.
En Australia el jamón pone en peligro la bioseguridad
¿Te imaginas que un kilo de carne de cerdo curada pueda generar un problema grave en tu aventura? pues eso es lo que te puede ocurrir en Australia, un país al que no te permitirán pasar con tan preciado equipaje gastronómico si no prestas atención a las normas. En este país las reglas son estrictas por una razón.
Australia está obsesionada con la bioseguridad, buscando frenar la entrada de enfermedades y plagas. Incluso algo tan inofensivo como un jamón requiere ser declarado y evaluado. Y ojo, no es el único.
En Estados Unidos la carne de cerdo está entre lo prohibido
Cuidado con querer cruzar la frontera estadounidense con jamón en tu equipaje. Puede ser una de esas situaciones que hagan que tu aventura comience de una manera un tanto amarga. Estados Unidos toma muy en serio lo que entra en su territorio y los controles son exhaustivos. Declarar todos los alimentos es fundamental, y la falta de cumplimiento puede resultar en multas que alcanzan hasta los 10,000 dólares. Aunque su web de Aduanas y Protección Fronteriza lista algunos alimentos «generalmente admisibles», la carne de cerdo, sobre todo en su forma enlatada, está entre lo prohibido.
Si sin jamón no vas a ninguna parte, estos países son tus destinos ideales
A pesar de estos países con normas estrictas a la hora de dejar entrar el jamón en sus territorios, existen destinos más indulgentes. Brasil, Argentina, México y China entran en la categoría de países permisivos. Eso sí no pienses en llevar un jamón entero en tu maleta. Por lo general, aceptan embutidos envasados al vacío y en porciones. Siendo un país fuera de la UE, Suiza permite hasta medio kilo de carne por persona y día, ¡incluyendo el jamón! Pero claro, todo esto depende de las reglas y tasas específicas. Si viajas dentro de la Unión Europea, estás en terreno seguro cuando se trata de llevar tu jamón de un país a otro.
Todo esto después de haber cumplido con las condiciones de las líneas aéreas
El jamón serrano o cualquier embutido puede ser tu compañero de viaje siempre que antes de llegar a tu país de destino cumpliendo sus normas, antes hayas seguido las de las líneas aéreas en cuanto a peso y volumen. Por otra parte, ten cuidado si vuelves a Europa desde fuera, las leyes pueden ser menos amigables, preocupadas por protegerte de posibles amenazas sanitarias.
Total que los españoles que amamos nuestro jamón ibérico somos unos incomprendidos y no todo el mundo lo recibe con los brazos abiertos. No saben lo que se pierden. Desde Australia hasta Estados Unidos, las normas varían y es importante conocer las reglas antes de empacar tu embutido favorito. Si te aventuras hacia tierras más lejanas, recuerda investigar y declarar para que tu jamón llegue a destino sin problemas y puedas disfrutarlo donde sea que vayas.