Muchas de nosotras, sin desearlo demasiado, nos encontramos frente a un ordenador prácticamente todo el día. Y por mucho que hagamos nuestros descansos cada cierto tiempo, lo cierto es que el cuerpo se resiente si no lo dedicamos al menos una hora al día de ejercicios en casa físicos y realizamos algunos estiramientos.
Y para ello, la práctica de yoga regular desde tu hogar puede ayudarte a estirar esos músculos que más necesitas a diario y que solo tú sabes cuáles son. Porque, cuando permanecemos sentadas durante horas, nuestras rodillas y caderas están flexionadas todo el tiempo, y si nos inclinamos hacia delante para ver una pantalla, nuestros omóplatos y columna también están en tensión.
3 posturas de yoga que alivian la espalda baja
Al final, estar sentadas todo el tiempo puede causar dolor y malas posturas. Estar sentada durante horas, al final, también causa tensiones en la parte baja de la espalda y en las caderas, por lo que es importante encontrar comodidad y una cierta estabilidad en nuestro asiento diario. Parece que no, pero es como sentarte a meditar. Todo lo podemos aplicar a generar una sensación de firmeza y comodidad en la postura que más tiempo adoptamos a diario.
A parte de realizar las posturas, se trata de tomar conciencia física mientras las realizas, es decir, sentir que a medida que practicas una y otra vez la misma secuencia de posturas, notes como tu cuerpo se adapta y responde cuando le sacas de su zona de confort, en este caso de estar sentada. Al principio, si sientes molestias o dolor, respira y mantén la respiración constante constante y tranquila, después, disminuye la intensidad o salga de la postura si es necesario.
1. Adho Mukha Svanasana (postura del perro boca abajo)
Antes de adoptar esta primera postura, busca en casa un espacio cómodo donde sentarte y desconectar ya de todo lo que has hecho estando sentada. Cierra los ojos y comienza a respirar lento y profundo para desconectar y reiniciarte.
¿Por qué es buena esta postura? Para la profesora de yoga Neeti Narula en “ayuda a alargar los isquiotibiales y las pantorrillas y desarrolla la fuerza de la parte superior del cuerpo. La naturaleza invertida de esta asana de yoga también mejora la circulación, lo cual es imperativo después de haber estado sentado todo el día.”, comenta.
Es muy simple: levanta las caderas hacia arriba y vuelve a la posición de perro mirando hacia abajo. Se pueden flexionar las rodillas para que te puedas concentrar en alargar la espalda en lugar de la parte posterior de las piernas.
2. Zancada alta con los brazos en forma de cactus
¿Por qué es buena esta postura? Esta versión de estocada estira los flexores de la cadera. “La variación en la postura de los brazos abre los hombros y proporciona una flexión hacia atrás diferente para liberar el pecho después de estar todo el día de encorvada hacia adelante”, explica.
Se realiza a continuación de la asana del perro que mira hacia abajo, solo tienes que dar un paso con el pie derecho hacia adelante y colocarlo entre las manos. Ten cuidado y fíjate que tu tobillo delantero esté alineado justo debajo de tu rodilla y, al mismo tiempo, mantén levantada tu rodilla trasera. Inhala lentamente y pasa tus brazos por encima de la cabeza, y mientras exhalas dobla los codos 90 grados.
3. Virabhadrasana II (Pose del Guerrero II)
Esta asana es una postura muy buena para abrir la entrepierna y fortalecer tus cuádriceps, espalda y brazos. “La rotación externa de la pierna delantera te ayudará a aumentar la movilidad y flexibilidad en las articulaciones de la cadera”, continúa.
Ponte de pie con los pies paralelos al borde estrecho de tu mat. Estira la pierna derecha hacia delante y dóblala. Estira los brazos y la pierna de atrás con el pie apoyado en la esterilla. Inhala y engancha tus brazos por detrás de tu espalda mientras miras hacia arriba, pues es una forma de movilizar aún más los músculos de tu espada alta.
¿Cómo ves estas poses? ¿Crees que son para ti?