Los bizcochos a la taza se han convertido en una tendencia en los últimos años, sobre todo por lo fáciles que son de preparar. De hecho, lo pueden hacer hasta los niños (eso sí, con supervisión). Si te apetece un postre esponjoso y suave y no tienes mucho tiempo, es una fórmula muy buena.
El tamaño de este bizcocho suele dar para dos personas, así que es mejor utilizar una taza grande para que no se desborde por los lados. En caso contrario, puedes reducir la cantidad de cada ingrediente a la mitad y hacerlo en una taza más pequeña. Si quieres aprender cómo prepararlo, sigue leyendo.
¿De dónde viene la idea de este postre?
Esta receta circula desde hace tiempo por muchos blogs de cocina anglosajones, y se ha popularizado principalmente porque, en estos tiempos, la gente está muy ocupada todo el tiempo, y por ello requiere de preparaciones sencillas y rápidas. Esta forma diferente de preparar el bizcocho también ha marcado tendencia por su sabor, que al final es lo fundamental. Si algo no está bueno, por muy rápido que se pueda preparar, no sirve de nada.
Cómo preparar un mug cake o bizcocho a la taza de chocolate
La preparación del bizcocho a la taza no suele llevar más de 5 minutos. Este dato es increíble, porque prepararlo a la manera tradicional puede consumir mucho tiempo y energía. A continuación, te explicamos todo lo que debes saber para que puedas disfrutar de un postre delicioso y muy fácil de preparar.
Ingredientes necesarios
- 1 taza grande
- 4 cucharadas de harina
- 4 cucharadas de azúcar
- 2 cucharadas de cacao
- 1 huevo
- 3 cucharadas de aceite de oliva suave
- 3 cucharadas de leche
- 1/4 de taza de trocitos de leche
- Un chorrito de extracto de vainilla
Elaboración
Te sorprenderás de lo fácil que es hacer un bizcocho de este tipo. Sigue estos pasos y podrás disfrutar de un postre único:
- Agrega todos los ingredientes secos a la taza y mézclalos bien.
- Añade el huevo y vuelve a mezclar todo bien. Después, añade el chocolate y la vainilla y mezcla de nuevo.
- Pon la taza en el microondas y programa 3 minutos a 1.000 vatios. El bizcocho se elevará por encima, pero no tienes por qué alarmarte: es lo que debe pasar.
- Una vez esté listo el bizcocho, sácalo del microondas y espolvorea por encima chispas o trozos de chocolate. También puedes añadir azúcar glas, nata o lo que más te guste.
- Déjalo enfriar un poco y… ¡a disfrutar! ¡Qué aproveche!