La gastronomía francesa es representativa de exquisitos y famosos platos a nivel mundial y la sopa de cebolla forma parte de ella. Originaria de la ciudad de Lyon debe su fama a ser una especialidad puesta de moda por los hortelanos del norte de Francia donde es común el cultivo de la cebolla. Gracias a ser una rica fuente de alimentación, a su popularidad y a su exquisitez logro extenderse por todo el país y expandirse más allá de sus fronteras donde se enriqueció y se hizo muy popular servirla con el delicioso y llamativo queso gratinado sobre algo de pan rústico.
Sopa de cebolla gratinada, sencilla y rápida
Las variables para esta receta son infinitas y en sí no existe una normativa o una receta única que pueda tomarse como la primigenia de todas, en muchos lugares se añade harina para lograr espesar de forma eficiente la sopa y en otras se incluyen desde patatas hasta brandy o vinos para potenciar su sabor. Lo que sí es protagónico es la sencillez de su preparación así como ingredientes asequibles que la convierten en un plato de gran humildad y de un sabor protagónico en la historia de la alimentación humana.
Los cocineros experimentados recomiendan una mezcla de quesos para potenciar el efecto y el sabor del gratinado. Los más idóneos para trabajarse en caliente son el comté, gruyer, emmental o simplemente puedes hacer uso de un buen parmesano.
Ingredientes necesarios para la sopa de cebolla
- 750 gramos de Cebollas.
- 90 gramos de Mantequilla.
- 1.5 litros de Caldo De Pollo.
- 150 gramos de Pan rústico.
- 225 gramos de Queso (gruyer, emmental y comté o parmesano).
- Sal y pimienta.
Cómo hacer sopa de cebolla gratinada – La receta top de Francia
- Comienza cortando rebanadas de pan y hornéalas. Estas rebanadas deben de mantener un espesor de 1.5 centímetros. Debes de tener en consideración que si vas a utilizar cazuelas individuales para servir la sopa es mejor utilizar un pan de estilo baguette. Hornéalo por 5 minutos con el horno precalentado a 250° centígrados por ambos lados y siempre manteniendo la correcta vigilancia para evitar que se quemen, una vez listos puedes reservarlos.
- Corta la cebolla y ralla el queso. La cebolla debes de cortarlas en juliana tratando de que sean lo más finas posibles. Adicionalmente rallas el queso y reservas.
- Pochas la cebolla y agregas el caldo. En una cazuela a fuego medio derrites la mantequilla y añades la cebolla, remueves bien para que la cebolla se mezcle de forma perfecta con la mantequilla y salpimientas. Luego de rehogarse por al menos 25 minutos incorporas el caldo de pollo y cocinas otros 15 minutos.
- Hornea y gratina la sopa. Mezcla muy bien y sirves la sopa en cazuelas individuales aptas para el horno. Sobre la sopa colocas 2 o 3 rebanadas de pan tostado y añades abundante queso rallado sobre el pan. De inmediato llevas al horno a gratinar hasta que el queso este dorado y trata de servir de inmediato mientras aún está caliente.
Consejos para una sopa de cebolla perfecta
Existen ciertas recomendaciones a tener en consideración para que puedas mejorar el sabor de esta sopa y para mantener los más altos estándares culinarios, lo que te permitirá gozar de resultados de calidad gourmet y disfrutar a plenitud de una inmejorable salud gracias a la cebolla como ingrediente principal de esta sopa.
- Una cebolla de gran calidad te permitirá que el resultado final sea excelente, trata de que las cebollas estén tiernas, de esta forma podrán integrarse perfectamente bien con los demás ingredientes.
- Puedes añadir un ingrediente para aromatizar aún más esta sopa, muchos integran algo de brandy o vino para ofrecer un toque especial y muy distintivo. Es importante que puedas verificar que se haya evaporado antes de añadir el caldo a la sopa.
- Debes de servir caliente y directamente del horno, esto te garantizará la textura adecuada tanto del gratinado como de lograr los distintivos y únicos sabores de esta deliciosa sopa de cebollas a la francesa.