Las cortinas son un elemento fundamental en decoraciĆ³n. No solo visten las ventanas, sino que pueden aportar un toque de estilo a las estancias. Y no hay que olvidar que, ademĆ”s, mantienen nuestra intimidad en casa y ayudan a filtrar la luz y los rayos solares. Por eso, elegirlas bien es muy importante.
Hay que tener en cuenta tanto la estancia en la que se van a colocar esas cortinas como el estilo que queremos dar a nuestro hogar y, por supuesto, las tendencias en decoraciĆ³n, porque en cuestiĆ³n de cortinas tambiĆ©n hay modas. En ocasiones, basta con cambiarlas para que la estancia se transforme en un espacio mucho mĆ”s actual. Vamos a ver hacia dĆ³nde nos llevan esas tendencias.
Los colores de moda en decoraciĆ³n, tambiĆ©n en las cortinas
Hay un color que nunca pasa de moda si de cortinas hablamos: el blanco. Es un color que combina bien en cualquier estilo y que se puede introducir en cualquier estancia. AdemƔs de ello, es perfecto para crear un cierto equilibrio cromƔtico cuando la paleta de colores elegida para decorar la estancia es intensa o algo atrevida.
Sin embargo, las tendencias en decoraciĆ³n de 2023 apuestan fuerte por introducir el color en las cortinas. Son, por un lado, colores neutros como la gama de los beiges, que ayudan a crear entornos muy acogedores y cĆ”lidos y que son grandes protagonistas en interiorismo desde hace ya algunas temporadas. Por otro lado estĆ”n colores como rosas palo, grises o verdes, pero siempre en tonos muy suaves o lavados.
Cortinas lisas, pero tambiƩn estampadas
La nota dominante son las cortinas lisas, pero eso no significa que los estampados no tengan cabida. Todo aquello que recuerde a la naturaleza es tendencia. Lo son esos colores tierra y ocres, pero tambiĆ©n los motivos vegetales, perfectos si lo que se quiere es introducir en la decoraciĆ³n una pequeƱa nota de alegrĆa. Formas geomĆ©tricas tambiĆ©n se admiten, pero siempre en patrones poco elaborados. Y si preferimos simplemente rayas, mejor que sean discretas y en vertical.
Tejidos con textura
Como seƱalĆ”bamos, lo que se lleva en cortinas son piezas de diseƱo sencillo, aunque con algĆŗn tipo de textura que aporte presencia. Pero los grandes protagonistas son los tejidos naturales y, de manera muy especial el lino. Es el autĆ©ntico rey en todas sus posibilidades, desde esas cortinas con poca densidad de hilos que aportan luminosidad y frescura a las estancias hasta esas otras muy tupidas, pero con una gran caĆda.
En algunos casos, ese tejido de lino se combina con faldones o ribetes decorativos. En otros se juega con dobles cortinas de otros tejidos de gran prestancia, como son el terciopelo o la lana, otro material natural que marca las tendencias en lo que a textiles del hogar se refiere. Cualquiera de las combinaciones aporta volumen y presencia a las cortinas.
Y, si lo que prefieres es la mĆ”xima sencillez, los visillos de tacto grueso, tanto lisos como estampados tambiĆ©n estĆ”n muy de moda. O la combinaciĆ³n de estores de telas muy ligeras (tambiĆ©n en lino) con cortinas a los laterales. En este Ćŗltimo caso, un aspecto que debes tener en cuenta es el espacio, si la habitaciĆ³n es pequeƱa o la pared estrecha, lo ideal es que optes bien por cortina, bien por estor. Y una Ćŗltima tendencia que cada vez toma mĆ”s protagonismo dentro de los tejidos para cortinas: los textiles reciclados.
Cortinas extralargas
Si vas a cambiar las cortinas de casa, no tengas miedo a que rocen el suelo. No solo eso, sino que lo que se lleva son esas cortinas que se posan en el suelo, que arrastran. DĆ©jalas que se apoyen en el suelo 10 -15 cm, es una forma de darles protagonismo y conseguir caĆdas con mĆ”s movimiento. Lo ideal en este caso es colgarlas desde el techo y en una sola barra, aunque se vaya a colocar una cortina doble.
Una forma diferente de dividir espacios
Una tendencia que tambiĆ©n se va a ver mucho en los prĆ³ximos meses es el uso de cortinas para separar espacios. Son cortinas con gran presencia, pero a la vez muy versĆ”tiles y en tejidos pesados pero elegantes como es el caso del terciopelo. Son perfectas para separar el vestidor del dormitorio o la entrada del salĆ³n, por poner solo dos ejemplos.