Las hipotecas de vivienda son la solución más buscada por los que necesitan de acceso a recursos para comprar una casa que satisfaga las necesidades actuales de techo y seguridad familiar y social. Pero suponen un gigantesco desembolso de económico y un largo compromiso financiero que requiere resolver todas las dudas que puedan surgir en el camino a transitar del llamado proceso hipotecario, y mucho mejor si estas dudas son aclaradas antes de contratar.
Una hipoteca de vivienda crea un compromiso que incluye una buena parte de los ingresos mensuales durante un largo tiempo para conseguir cumplir con las obligaciones económicas y financieras de las cuotas mensuales. Los expertos y asesores recomiendan solucionar cualquier duda o pregunta antes de dar este importante y riesgoso paso, además la aclaración de estas dudas te permitirá escoger la mejor hipoteca basada en tus personales necesidades de vivienda.
Dudas claves antes de contratar una hipoteca de vivienda
Dentro del gran universo de las hipotecas es importante que conozcas que existen un par de modalidades de hipotecas, basadas en el tipo de interés a cancelar: las hipotecas fijas, las cuales permiten que el comprador conozca de antemano el valor preciso de las cuotas, ya que el mismo no variará a lo largo de la vida útil del préstamo hipotecario de vivienda.
En contraparte, también existen las hipotecas variables, acá el tipo de interés varía en dependencia de un índice referencial. La mayoría de los bancos incluyen al euríbor como índice de referencia, este se revisa periódicamente (los tiempos van desde los 6 meses hasta el año). Y para finalizar un tipo de hipoteca que está a medio camino entre las fijas y las variables y son las denominadas hipotecas mixtas, estas soportan una mezcla entre interés fijo e interés variable.
Otras consideraciones previas a una hipoteca de vivienda
Más allá del tipo de hipoteca, de las posibles comisiones y de la manera correcta del cálculo de las cuotas de una hipoteca, se tiene que manejar la máxima información concerniente a cualquier duda que el cliente tenga con relación a las hipotecas de vivienda. Un contrato financiero que involucra importantes recursos económicos por parte del cliente y que lo mantendrá atado a cuotas por un largo periodo de tiempo.
¿Qué cantidad de dinero tengo que tener ahorrado?
Los potenciales contratantes de una hipoteca deben tener muy claro que por regla general las instituciones bancarias ofrecen como financiación máxima el 80 % del valor de compra o de tasación de la vivienda a ser adquirida. Esto obliga al comprador a disponer de ahorros de al menos un 20 % para cubrir lo faltante por el banco y además hay que sumar un 10 % o un 15 % relacionado con el pago de impuestos de Ley, pagos de notarías y registros.
¿Qué tipo de hipoteca es la más conveniente?
El tipo de hipoteca también es crucial porque existen diversos tipos de interés al momento de decidirte por una hipoteca, así que nada mejor que conocer el impacto económico que representa una hipoteca con un interés de tasa de tipo fija o con un interés de tasa del tipo variable. Ambas variables tienen que ser sometidas a consideración antes de tomar una decisión, ya que la hipoteca será una inversión cuantiosa y que además es a largo plazo.
¿Cuál es la cuota real de una hipoteca?
La cuota hipotecaria es la mensualidad que el contratante debe pagar periódicamente para devolverle al banco el préstamo, a este dinero hay que sumarle los intereses generados por la hipoteca. Estas cuotas están determinadas según el criterio de un diferencial y de un indicador como el euríbor y en dependencia del tipo de hipoteca (fija o variable).
El banco maneja como criterio principal para la fijación de la hipoteca los ingresos mensuales del cliente, los expertos recomiendan una capacidad máxima de endeudamiento que no exceda el 30 % de los ingresos totales del mes. Esto para los tipos de hipotecas que no mantienen ningún tipo de gravamen adicional, porque de ser así, entonces se incluiría otro 30 % adicional de gastos.
Los gastos de contratación de una hipoteca ¿Quién los paga?
La Ley hipotecaria establece que el banco y el cliente deben repartirse los gastos asociados con la contratación de una hipoteca de vivienda, el modo en el que serán repartidos estos gastos será: El banco se encargará de los gastos de la notaria, del registro, del impuesto sobre actos jurídicos documentados (AJD) y de la gestoría. El cliente se hará cargo de los gastos de tasación y de los aranceles notariales que se derivan de las copias de la escritura de la hipoteca.