Los pimientos tienen una temporada de crecimiento larga, por lo que la mayoría de los jardineros compran plantas de pimientos iniciales en el vivero en lugar de cultivarlas a partir de semillas. Sin embargo, los expertos en jardinería dicen que puedes hacer la siembra de semillas de pimiento en interiores y cultivarlas tú mismo si tienes tiempo suficiente.
Los pimientos rojos y verdes son buenas fuentes de vitamina C, algo de vitamina A y pequeñas cantidades de varios minerales. Son maravillosos, crudos en ensaladas o como refrigerio con salsa o hummus, también puedes rellenar los pimientos y hornearlos. A continuación, te daremos los mejores consejos para plantar pimientos dulces, pero muchas de estas recomendaciones sirven para sembrar pimientos picantes.
Donde plantar pimientos
Cultiva pimientos en un espacio con pleno sol y suelo húmedo, no empapado, con buen drenaje. Un equilibrio entre suelo arenoso y arcilloso asegurará que el suelo drene bien y se caliente rápidamente. Mezcla grandes cantidades de materia orgánica en el suelo, especialmente si está trabajando con arcilla pesada.
Evita plantar pimientos en lugares donde hayas cultivado recientemente otros miembros de la familia de las solanáceas, como tomates, papas o berenjenas, ya que esto puede exponer los pimientos a enfermedades.
Cuando plantar pimientos
Para plantar pimientos en maceta en el interior, siembra las semillas de 8 a 10 semanas antes de la fecha de la última helada de primavera. La planta de pimiento debe trasplantarse al aire libre alrededor de 2 a 3 semanas después de que haya pasado la amenaza de las heladas y la temperatura del suelo haya alcanzado los 18 °C.
Cómo plantar pimientos en el interior
Para comenzar toma las semillas de pimiento y siembra a 1 cm de profundidad, tres en una maceta con sustrato, el indicado para la germinación. Para un proceso más rápido, mantén el suelo a 21 °C o más. Para lograr este tipo de temperaturas, probablemente necesitarás un propagador calentado o una estera térmica y algunas luces de crecimiento.
Las condiciones ideales deberían hacer que las plántulas aparezcan en unas dos semanas, pero algunas variedades tardan hasta cinco semanas. No olvides descartar la plántula más débil, deja que las dos plantas de pimiento restantes en cada maceta crezcan como una sola. Las hojas de dos plantas ayudan a proteger los pimientos y, a menudo, son más grandes que las de dos plantas separadas.
Cómo plantar pimientos al aire libre
Si decidiste comprar las plántulas de pimientos, elige las que tengan tallos rectos y resistentes, de 4 a 6 hojas y sin flores ni frutos. Para endurecer las plantas antes de sembrar, colócalas al aire libre una semana o más después de la fecha libre de heladas o cuando la temperatura promedio diaria alcance los 18 °C. Antes de trasplantar en el jardín, mezcla compost en el suelo a una profundidad de aproximadamente 20 a 25 cm y rastrillo varias veces para romper los terrones grandes. Lo mejor es trasplantar los pimientos por la noche o en un día nublado. Esto evitará que las plantas se sequen demasiado y se marchiten.
Haz los agujeros de trasplante de 6 a 10 cm de profundidad y con una separación de 30 a 40 cm en la fila. Separa las filas a una distancia de 60 a 90 cm. Antes de plantar, llena los hoyos con agua y deja que drene. En cada hoyo de plantación, coloque dos o tres cerillas de madera (para el azufre) y 1 cucharadita de fertilizante bajo en nitrógeno y alto en fósforo.
Cuando saques el trasplante de su maceta sé cuidadoso y deja la mayor cantidad de tierra posible alrededor de las raíces. Coloca los trasplantes aproximadamente 2 cm más profundos de lo que estaban en su recipiente original. Llena el hoyo con tierra y aplánalo sin apretar alrededor de la planta. Deja un área ligeramente hundida alrededor de cada planta para retener el agua.