Las manchas de óxido son un problema muy recurrente en el hogar, afectan principalmente nuestras herramientas y superficies que se encuentran expuestas a la humedad o a exteriores. De esta manera, nuestras griferías se encuentran entre los objetos más afectados por la corrosión, al igual que otros elementos de metal como sillas y utensilios de cocina. Incluso, las juntas de nuestros suelos pueden oxidarse también debido a problemas de humedad y, a pesar de realizar una limpieza constante no desaparecen las manchas. Todo esto, no solo hace que nuestro hogar se vea descuidado y con mal aspecto, sino que también, los artículos afectados tienden a deteriorarse con mayor rapidez.
Esto se trata de un problema que ocurre con más frecuencia de la que piensas, pero, por suerte, tiene solución. La mejor parte es que, dependiendo de su nivel de desgaste, puedes utilizar productos naturales que sueles tener en la despensa y que son muy fáciles de adquirir, como el famoso bicarbonato de sodio. Este producto estrella en la limpieza del hogar gracias a su poder desinfectante y blanqueador, puede ayudar a acabar con el óxido de distintas superficies y aquí te enseñamos cómo usarlo tomando en cuenta el área que desees renovar.
Cómo eliminar el óxido en griferías
Estas piezas tienden a usarse diariamente lo cual, combinado con su contacto constante con el agua y la acumulación de cal, fomenta la corrosión de estos elementos. Por ello, debemos ser precavidos y tomar ciertas medidas para extender su vida útil. Pero, si por olvido tu grifería ya presenta signos de oxidación no te preocupes, pues, aun estás a tiempo de solucionarlo. Para ello, usaremos un truco casero con bicarbonato de sodio, al mismo tiempo que potenciamos su acción con otro ingrediente natural que seguro tienes en casa, limón. Así que toma nota de los pasos que debes seguir:
- Corta un limón por la mitad y coloca sobre la pulpa una cucharadita de bicarbonato de sodio.
- La combinación de estos ingredientes creará una reacción química que generar espuma, así que no te preocupes cuando esto ocurra. Seguidamente, frotaremos toda la superficie afectada de nuestra grifería con el limón.
- Espera 10 minutos para que la mezcla puede actuar y eliminar todo el óxido. Luego, usa un paño o un cepillo de cerdas suaves para frotar toda a superficie.
- Finalmente, enjuaga y seca toda la pieza de grifería con una toalla absorbente. Verás como el aspecto de este artículo da un giro de 180 grados. Pero si aún observas algunas diminutas manchas de óxido, te aconsejamos repetir todo el procedimiento hasta lograr los resultados deseados.
Cómo eliminar el óxido en utensilios de cocina
Otro de los artículos que frecuentemente se ven afectados por la corrosión son nuestras ollas y sartenes de cocina. Esto es consecuencia del uso, el calor y la humedad al que están sometidos constantemente, haciendo que el óxido llegue a ellas y pierdan su apariencia reluciente del inicio. A pesar de ello, no tienes que desechar tus utensilios de cocina, ya que, puedes devolverles el brillo y acabar con la corrosión usando una sencilla fórmula casera de bicarbonato sódico y agua oxigenada. Así que, si deseas acabar con este problema, solo debes seguir estas sencillas instrucciones:
- En un recipiente agrega el bicarbonato de sodio y unas gotas de agua oxigenada hasta formar una pasta.
- Aplica la mezcla sobre toda la zona afectada en tus utensilios de cocina y cúbrela con un plástico. Deja actuar permitiendo reposar la pasta sobre el óxido durante 30 minutos
- Transcurrido el tiempo de espera, friega con una esponja y retira los residuos de bicarbonato y óxido con abundante agua ¡Y listo! Será momento de cocinar nuevamente.
Cómo eliminar el óxido en suelo
Es habitual que ciertos adornos o muebles de metal terminen generando manchas de óxido en nuestras baldosas, especialmente cuando estas se ubican en exteriores y en espacios húmedos. Sin duda, no es una tarea fácil deshacerse de estas manchas, pero tampoco imposible. Para ello, necesitaremos nuestro versátil bicarbonato de sodio y un poco de jabón lavaplatos. Teniendo todo o necesario a la mano, es momento de ponernos manos a la obra:
- Espolvorea el bicarbonato sobre las áreas que tengan óxido. Seguidamente, añade unas gotas del jabón lavaplatos y agua caliente sobre el bicarbonato. Lo ideal es formar una pasta con estos tres ingredientes.
- Permite que la mezcla repose durante 30 minutos y, luego, friega la zona con ayuda de un cepillo. Recuerda, aplicar suficiente fuerza hasta que desaparezca por completo la mancha.
- Utiliza una mopa con agua tibia para retirar todos los restos de bicarbonato ¡Y ya está! ¡Finalmente, podrás decir adiós al óxido!
Recomendaciones para prevenir manchas de óxido
Si bien ya conoces los pasos a seguir para eliminar las manchas de óxido en diversas superficies usando bicarbonato de sodio, es necesario tomar algunas medidas preventivas para evitar que suceda la corrosión. Algunos consejos que puedes seguir son:
- Siempre que sea posible, mantén los objetos de metal secos en todo momento. Almacénalos adecuadamente para evitar exponerlos a la lluvia o a lugares húmedos por tiempos prolongados.
- Cubre tus objetos de metal con un revestimiento protector, como pintura, esmalte o barniz. Estos productos permiten formar una barrera entre el metal y el entorno, impidiendo así que el aire y el agua entren en contacto directo con la superficie de metal.
- Lubrica adecuadamente las superficies con partes móviles o en zonas propensas al rozamiento. Para ello, utiliza aceite lubricante o grasa.
- Cuando comiences a notar pequeñas manchas de óxido, encárgate de eliminarlas inmediatamente con los trucos caseros que te enseñamos.