¿Cada cuánto tiempo reemplazas el cepillo de dientes? Lo recomendado por los expertos en salud es hacerlo cada 3 meses como máximo, sin embargo, aunque si es importante cambiarlos en este tiempo, no deberías tirarlo a la basura. De hecho, existen muchas formas de reutilizar este utensilio de higiene bucal en la limpieza de casa e incluso de prendas de vestir.
Es verdad, ya no sirve para la salud dental, pero puede convertirse en un aliado del hogar muy bueno. Si estás aquí porque tienes dudas sobre qué hacer con tu cepillo de dientes viejo para no desecharlo ¡Enhorabuena! Te contamos los usos más interesantes que puedes darle a este instrumento esencial. ¡Presta atención!
8 usos que le puedes dar a tu antiguo cepillo de dientes
Darle una segunda vida al cepillo dental una vez las cerdas se hayan desgastado no solo es una forma de aprovecharlo en otras tareas domésticas, sino que, aunque parezca un gesto pequeño, le estarías haciendo un favor al medioambiente contribuyendo a la reutilización del plástico (la mayoría son fabricados en este material) y a la disminución de desechos. Toma nota y conoce como aprovechar este instrumento imprescindible en el aseo y cuidado del hogar:
- Limpia los zapatos: Si las suelas de tu calzado se han ensuciado con barro, caca, agua sucia o mugre común de la calle, puedes utilizar el cepillo para frotar los surcos y las zonas más delicadas sin maltratarlas.
- Limpia los aparatos electrónicos: Si notas polvo o suciedad en el teclado del ordenador o portátil, pasa un cepillo de dientes con cerdas suaves en los espacios más estrechos para hacer más fácil su eliminación. También funciona para el control remoto de la TV y otros mandos a distancia.
- Quita los restos del rallador: ¿Quién no tiene un rallador en casa? Bien sea para rallar verduras, queso o para obtener la ralladura de limón. Ahora bien, siempre quedan residuos en las rendijas y dejarlo impecable es difícil, es ahí cuando este utensilio es de gran ayuda.
- Limpia los eslabones de la cadena de la bicicleta o moto: Estas piezas ameritan una limpieza precisa para su correcto funcionamiento, para ello, un cepillo dental viejo es la mejor herramienta.
- Remueve mugre de los bordes de los grifos y desagüe: Solo tendrás que humedecerlo con un poco de vinagre blanco y restregar para desprender la suciedad y manchas de humedad.
- Desaparece el moho en rincones del baño: Por ejemplo, en las esquinas de la bañera, las bisagras del asiento del inodoro, las juntas de los azulejos ¡Y donde quieras!
- Quita manchas en la ropa: Tallar la tela con un cepillo de dientes es una de las maneras más eficaces de remover las manchas de vino, café e incluso de grasa (con un poco de quitagrasa). También es excelente para frotar zonas manchadas en la tapicería de muebles o alfombras sin hacer daño al material.
Además de los trucos anteriores, puedes usarlo para limpiar las uñas llenas de grasa o pintura y exfoliar zonas ásperas de la piel (como es el caso de los codos y rodillas). Así que si pensabas tirar el antiguo cepillo de dientes ¡Que ni se te ocurra!