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9 formas prácticas e inesperadas de usar suavizante de telas

Ambientador con fresco aroma, limpiacristales, limpiador para el baño ¡Y más!

Todos alguna vez en la vida hemos usado suavizante para darle un aroma agradable y un tacto suave a nuestras prendas, sin embargo, por si no lo sabías, verter más de lo indicado podría afectar los tejidos y causar el efecto contrario, dejándolos rígidos y con manchas. Ha llegado la hora de que reduzcas la cantidad que aplicas en cada colada y aproveches este producto para otras tareas de limpieza en casa bastante interesantes.

Sí, además de ser capaz de limpiar, perfumar y reducir las marcas en prendas arrugadas y maltratadas dentro del tambor, tiene otras aplicaciones a la hora de limpiar que te dejarán boquiabierto/a. Sigue leyendo y conoce cuáles son los usos del suavizante de ropa en el hogar que ni te imaginabas y que sin duda te sacarán de apuros en más de una ocasión. ¡La número 7 te encantará!

Usos alternativos del suavizante de ropa

A pesar de que no es recomendable en telas deportivas, delicadas, prendas íntimas y toallas, el suavizante sigue siendo uno de los productos más vendidos cuando se trata de lavar la ropa. Ahora bien, ¿sabías que también puede utilizarse de otras maneras sorprendentes? ¿Como por ejemplo, ablandar residuos de comida pegados en la batería de cocina, limpiar cristales e incluso como ambientador casero ¡Sí, y otros que a continuación te contamos!suavizante telas usos alternativos

Suaviza los restos de grasa y comida pegados

Bien sea en cacerolas, sartenes, vajilla o utensilios de cocina, si los dejas sumergidos en agua con suavizante durante una o dos horas, todos los residuos incrustados al fondo se reblandecerán y será mucho más sencillo deshacerte de ellos.

Ambientador casero en instantes

Aprovecha al máximo su fragancia diluyendo media taza de suavizante y 2 cucharadas de bicarbonato en un litro de agua, vierte en una botella con spray y rocía con cierta distancia sobre las cortinas, sábanas, alfombras o sofá que quieras perfumar. ¡El aroma durará horas!

Tu propio limpiacristales

¿Cansado/a de que tus ventanas, mampara o espejo queden manchados? Aunque no lo creas, es posible preparar un limpiador para esta zona disolviendo una cucharada de suavizante en medio litro de agua. Vierte esta mezcla en una botella con pulverizador y limpia con un paño de microfibra. ¡El resultado te encantará!

Abrillantador de muebles

Si quieres que tus muebles de piel se vean brillantes, ¡prueba este truco! Mezcla 1 litro de agua con un chorrito de alcohol y una cucharada de suavizante, vierte esta solución en una botella con vaporizador y rocía. Al final, pasa un trapo de algodón para pulir y secar.

Limpia el cuarto de baño

Prepara una solución limpiadora con agua caliente, un buen chorro de alcohol y un tapón de suavizante y limpia con ayuda de una bayeta, los azulejos, la ducha, bañera, el lavabo y el exterior del inodoro para desinfectar, abrillantar y dejar un aroma agradable en la superficie.

Suelo impecable y con buen olor

¿Se te ha acabado el desinfectante? ¡No hay de qué preocuparse! Añade un poco de suavizante en el cubo de la fregona antes de limpiar el suelo y trapea con él para recoger polvo, mugre y aromatizar el ambiente.

Por si lo preguntabas: No, no dejará el suelo resbaladizo.

Mejora la textura de alfombras y moquetas

Si tienes alfombras en casa, sabrás que cuando están recién lavadas se vuelven ásperas y rígidas, perdiendo así la sutileza que las caracteriza. Si quieres que su textura sea confortable y esponjosa nuevamente, lo ideal es esparcir una mezcla de 2 litros de agua y 1 taza de suavizante, sobre ella, masajear con delicadeza o frotar con una esponja suave. Una vez se seque por completo, notarás la diferencia.

Combate la electricidad estática

En caso de que tu sillón favorito, tu ropa o las alfombras estén originando la incómoda electricidad estática y los chispazos repentinos, vaporiza el objeto con suavizante diluido en agua y se disipará este problema como por arte de magia.

Despega el papel pintado de la pared

Para nadie es un secreto que es un verdadero dolor de cabeza deshacerse del papel de la pared, por suerte, una técnica muy sencilla y económica de hacerlo sin sufrir en el intento es rociarlo con agua caliente y suavizante, dejar actuar durante 15 minutos y luego comenzar a despegar por la parte inferior. ¡Saldrá sin esfuerzo!

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