El aceite de oliva es, sin lugar a dudas, uno de los productos principales dentro de la dieta mediterránea. Y no es para menos, son muchos los estudios que han demostrado que este alimento puede ser muy beneficioso para la salud ya que nos ayuda a reducir el colesterol, a retrasar el envejecimiento y a reforzar nuestro sistema inmunológico.
Como ves, existen razones más que de sobra para que lo incluyamos dentro de nuestra dieta. Pero puede que te preguntes, ¿qué ocurre si tomo demasiado aceite de oliva? ¿Puede tener repercusiones para mi salud?
No te preocupes porque te vamos a resolver todas estas dudas a continuación, por eso te aconsejamos que si quieres descubrirlo sigas leyendo.
¿Qué ocurre si nos excedemos al consumir aceite de oliva?
Han sido muchos los estudios que han demostrado que el aceite de oliva puede tener muchos beneficios para nuestra salud, incluso pueden potenciarse combinándolo con otros alimentos como el limón. Aunque también es cierto de que debemos ser conscientes de que se trata de un alimento con mucha grasa y, como tal, debemos tener cuidado a la hora de tomarlo y hacerlo con moderación. Pero, ¿cuál es la ración más recomendable?
Habitualmente se habla de unos 50 gramos al día, lo que vendría a equivaler a unas 4 cucharadas de este producto al día. Sin embargo, si nos excedemos con la cantidad podemos sufrir una consecuencia muy clara: el aumento de peso.
Lo que ocurre es que el aceite de olivas, pese a contener grasas buenas, tiene un alto aporte calórico. De manera que, si tomamos una cantidad muy elevado a diario, podemos provocar el aumento de peso e incluso llegar a sufrir obesidad.
Fue una doctora española la que recalcó la importancia de esto pero, a su vez, de seguir consumiendo aceite de oliva con regularidad dentro de nuestra dieta por los múltiples beneficios que ofrece. Entre ellos:
- Cuida la salud de nuestro corazón. Son muchas las investigaciones que han comprobado el poder que tiene este aceite para hacer que el colesterol malo disminuya y así evitar el riesgo de aparición de enfermedades cardiacas el día de mañana. Esto es debido, sobre todo, a los ácidos grasos monoinsaturados que estas presentes en el mismo y que no están en otros tipos de aceite como puede ser el de palma o el aceite de aguacate.
- Reforzar el sistema inmunológico. La gran cantidad de antioxidantes y vitaminas que contiene el aceite de oliva son claves también para cuidar nuestro organismo, ya que nos permiten retrasar el envejecimiento y cuidar nuestras defensas para reducir la posibilidad de que podamos sufrir enfermedades el día de mañana.
- Podrías ayudar a evitar la aparición de cáncer. Al trabajar protegiendo las células, otro de los efectos que podría tener el aceite de oliva en nuestra salud es el de reducir la probabilidad de aparición de ciertas enfermedades como el cáncer. No obstante, aunque se está investigando y los resultados son prometedores, aún no hay pruebas definitivas sobre este hecho.
Como ves, existen muchas razones para consumirlo aunque debamos hacerlo con cuidado para evitar sufrir un aumento de peso, el cual podría terminar derivando también en afecciones como la obesidad y todos los problemas de salud asociados a la misma.
Además, existen otros tipos de aceites vinculados al aceite de oliva que tienen también múltiples beneficios para la salud y cuyo coste es más económico como es el aceite de orujo de oliva.
Así que ya sabes, toma nota e incluye este producto en tu dieta pero con moderación para evitar sufrir posibles problemas relacionados con el peso el día de mañana.