La avena es un alimento altamente nutritivo y beneficioso para la salud. Por lo que su consumo como parte de la dieta es muy recomendable.
Las intolerancias suelen ser un obstáculo a la hora de integrar alimentos en la dieta. En el caso de la avena, una duda habitual es su contenido en gluten y si las personas que padecen celiaquía pueden beneficiarse de las propiedades nutritivas de este cereal.
La avena forma parte de la alimentación desde hace milenios
La vena es un cereal que se ha utilizado en la alimentación humana desde hace miles de años y en todas las civilizaciones y etapas de la historia ha sido apreciado por sus propiedades nutritivas y saludables.
Ha formado parte de la alimentación del ser humano desde la Edad de Piedra. Los antiguos egipcios y los romanos la consumían regularmente. Y en la Edad Media, la avena era un alimento básico en muchos países europeos, especialmente en Escocia e Irlanda.
La avena es rica en fibra y proteínas
La avena es un alimento rico en nutrientes que incluyen proteínas, fibra dietética, vitaminas B, fósforo, hierro, magnesio y zinc. Además, es bajo en grasas y colesterol y es una fuente importante de carbohidratos complejos, es decir, aquellos de absorción lenta y que evitan los picos de energía y de azúcar en sangre.
Es conocida por sus cualidades nutritivas y beneficios para la salud, ya que al tratase de una excelente fuente de fibra, ayuda a mantener el sistema digestivo saludable y reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes, además de ayudar a controlar los niveles de colesterol en la sangre y a mantener un peso saludable. También contiene beta-glucanos, un tipo de fibra soluble que se ha demostrado que reduce los niveles de colesterol en la sangre y mejora la salud del corazón.
El gluten en la avena
Llegamos a la gran cuestión. ¿Pueden las personas celíacas llevar una dieta que contenga avena? Según los organismos reguladores de la Unión Europea, la avena está reconocido como un cereal sin gluten. Sin embargo, existe el riesgo de que se contamine debido al almacenamiento y procesado con otros cereales como el trigo o el centeno, que sí contienen la proteína. En cambio, si tenemos la certeza total de que el cereal no ha estado en contacto con otros cereales que sí contengan gluten, la avena es sin duda el cereal ideal para una dieta saludable y equilibrada en personas celíacas.
Para ello es necesario comprar la avena en algún establecimiento especializado que certifique el cereal no se ha cultivado en campo en el que se cultiven otros cereales, no hayan sido transportados o procesados en espacios o equipos en los que se trabajen también cereales con gluten.
Cómo integrar la avena en tu dieta
La avena se puede consumir de muchas formas diferentes. Se puede cocinar para hacer avena caliente, se puede mezclar con yogur o frutas para hacer un desayuno saludable, o se puede utilizar para hacer barras de granola caseras. También se puede utilizar como ingrediente en panes, galletas y otros productos horneados.
La forma más común de tomarla en dietas equilibradas es en el desayuno. Mezcla en un bol yogur natural, que sea sin azúcar y 0% materia grasa. Añade algunas frutas de temporada troceadas al gusto, aunque suele ir muy bien y dar resultados muy nutritivos con plátano, fresas o arándanos, y añade tu avena libre de gluten, De esta forma tendrás un desayuno con avena, saciante para tener energía y evitar el picoteo entre horas toda la mañana y muy nutritivo.