Por si te has preguntado alguna vez por qué se le llama jamón serrano a uno de los embutidos más consumidos y mejor valorados en España y en otras partes del mundo, es porque procede de la sierra y se refiere a la costumbre de curar la carne en parajes elevados de las sierras, como por ejemplo la Cordillera Británica, ya que su clima frío y seco es el que más favorece el proceso de curación.
Hay distintas marcas e incluso distintos tipos de jamón serrano, por lo que muchas veces, sobre todo sin conocimiento, es muy complicado elegir uno que realmente valga la pena. Si no conoces las claves para elegir el mejor ejemplar posible de este embutido, no te preocupes, porque a continuación te las contaremos con todo lujo de detalles. Es muy importante que en Navidad elijas el mejor jamón, y para eso tienes que ir informada o informado a comprar. ¡Vamos allá!
Claves para que elijas el mejor jamón serrano esta Navidad
La Fundación Jamón Serrano Español ha compartido sus consejos y su sabiduría para que los consumidores puedan hacerse con el mejor embutido posible y, de esta manera, triunfar en Navidad con sus seres queridos. Lo primero que recomiendan es que tengamos acceso a una cata del alimento, algo que es normal, porque si no nos gustase lo descartaríamos de forma automática. Sin embargo, esto muchas veces no es posible, por lo que proponen otros consejos o claves que son igualmente útiles si se conocen bien.
El primer detalle en el que debes fijarte es en la etiqueta del embutido en cuestión, porque ahí es donde debería figurar la denominación «jamón serrano»; al igual que sus meses de curación. Los de mayor calidad son los jamones que hayan tenido un tiempo de curación superior a 7 meses. Otro aspecto al que debemos prestar atención es la pieza en sí y sus características visibles: es deseable que el color de la grasa sea blanco amarillento, que presente una homogeneidad tanto en la superficie como en el color, que el espesor de la grasa sea de al menos un centímetro y medio… Para acabar, si el jamón presenta una forma alimonada, eso indica que ha sido tratada con mimo a lo largo del proceso de maduración.
Los beneficios del jamón serrano
Algunas personas acusan falsamente a este embutido de ser un cúmulo de grasa y sal poco saludable, pero ese concepto no puede estar más lejos de la realidad. Es cierto que no hay que abusar de su consumo al tratarse de una carne roja curada en sal, pero comer este jamón con moderación puede aportar beneficios a nuestra salud por sus componentes: vitamina B2, B3 y B6; trazas de vitamina D; minerales esenciales como el fósforo, el calcio y el zinc… Por eso, su consumo contribuye a superar y prevenir situaciones de depresión o estrés o a aumentar el nivel de colesterol bueno (HDL), entre otras cosas.