La almendra es reconocida por sus propiedades saludables, especialmente por aportar al organismo grasas insaturadas buenas que protegen al corazón y disminuyen el colesterol LDL, que es nocivo. Sin embargo, existen contraindicaciones si sobrepasas la cantidad diaria de consumo, ya que comer almendras en exceso podría causar, por ejemplo, problemas intestinales, aumento de peso o una sobredosis de vitamina E.
La dosis diaria recomendada por autoridades sanitarias está entre 25 y 28 gramos, que equivale a 20 o 23 almendras; esto aporta alrededor de 147 calorías, 13 gr de grasas insaturadas, 6 gr de proteína, 4 gr de fibra, 7.3 mg de vitamina E, 210 mg de potasio, 75 mg de calcio, 81 mg de magnesio, entre otros minerales. Como ves, es una cantidad idónea de nutrientes cuyo beneficio te presentamos a continuación.
8 razones de por qué comer almendra
- Porque es rica en grasas insaturadas que ayudan a mantener los niveles normales de colesterol y reducen el colesterol LDL que daña el organismo. Esto contribuye directamente a prevenir enfermedades cardiovasculares.
- Porque presenta flavonoides y fenólicos que disminuyen el riesgo de padecer enfermedades coronarias. Al consumir una ración es como si estuvieras comiendo una taza de brócoli al vapor.
- Porque la almendra es una fuente de proteína vegetal, especialmente para aquellos que llevan una dieta vegana o vegetariana.
- Porque contiene vitamina E: Entre las razones por las cuales es uno de los frutos secos más demandados es por su elevado contenido de vitamina E, la cual funciona como antioxidante que protege el sistema inmunológico, evita enfermedades crónicas, cuida la piel y preserva el sistema nervioso, gracias a que evita la oxidación de las células. De hecho, en esta forma natural la vitamina actúa mucho mejor que las presentaciones sintéticas de suplementos que venden. Mira cómo se prepara este smoothie bowl de almendras, kiwi, mango y papaya, ¡una fiesta de vitaminas y minerales!
- Porque posee fibra e hidratos de carbono de lenta absorción, como el almidón por ejemplo, lo cual hace que la almendra tenga un índice glucémico bajo. En otras palabras, es perfecta para diabéticos.
- Porque su fibra insoluble actúa como una escoba que va limpiando el tracto digestivo y los intestinos, en especial si la comes con cáscara; mientras que la fibra soluble se encarga de regular el azúcar en la sangre.
- Porque tiene propiedades prebióticas que permiten la proliferación y conservación de bacterias sanas para los intestinos; de manera que favorecen los procesos digestivos.
- Porque la almendra es fuente de minerales como magnesio, potasio o calcio que protegen el sistema óseo, las funciones cognitivas y contribuyen a disminuir el cansancio.
4 razones de por qué no exagerar el consumo de almendra
- Porque es rica en calorías, así que comer en cantidades exageradas solo te aumentará de peso. Por ejemplo, por cada 100 gr de almendras – que es la medida usada casi siempre para preparar recetas – obtienes 589 kcal, que aunque en su mayoría significan grasas saludables igual pueden hacerte engordar.
- Porque puede generarte distensión abdominal por la fibra soluble e insoluble que contiene, que ingerida en grandes cantidades resulta contraproducente.
- Porque la vitamina E en exceso provoca somnolencia, hinchazón abdominal, diarrea e incluso episodios de visión borrosa.
- Porque el manganeso que contiene la almendra, consumido en demasía, podría disminuir la efectividad de ciertos medicamentos antihipertensivos, relajantes o laxantes.
Ten cuidado con la almendra amarga
Son pocas las personas que conocen la existencia de un tipo de almendra amarga, la cual se vende sobre todo en farmacias y herbolarios porque es usada para obtener ácido cianhídrico, a partir de una sustancia que contiene este fruto seco denominada amigdalina.
La amigdalina es altamente tóxica para el organismo, puede llegar a producir fuertes dolores abdominales, dificultad para respirar, hinchazón y otros síntomas propios de una intoxicación. Claro, este tipo de almendra tiene usos puntuales y quien la adquiere sabe que debe cocinarla antes de usar, de esta manera perderá la toxicidad.
Nuestra recomendación es que si no conoces la almendra amarga no la uses, pues podría resultar un peligro para tu salud. De hecho, su efecto en los niños es bastante peligroso, el consumo de apenas 5 semillas los intoxica a niveles letales.