Las legumbres forman parte del grupo de alimentos con mayor variedad. Están cargados de componentes nutritivos y también forman parte de la lista de alimentos sanos. Sin embargo, para ofrecer mayores posibilidades a las personas, se han lanzado al mercado legumbres en conserva que igual que las legumbres secas tiene sus ventajas y desventajas.
Las legumbres en conserva son productos procesados por cocción a nivel industrial y vienen listas para el consumo, dentro una lata o de un envase de vidrio. En cambio, las legumbres frescas o secas, vienen en granel para que puedas hidratarlas y cocinarlas en casa. La relación que guardan estos dos tipos de alimentos es que para empezar son naturales, además de ser muy nutritivos.
Legumbres en conserva vs legumbres frescas
Si eres amante de la alimentación sana y llena de nutrientes, en tu dieta no pueden faltar las legumbres. Aportan beneficios para la salud física y mental. El modo en que las consumas, queda un poco apartado debido a que las legumbres en conservas y secas tienen ciertos nutrientes en común.
El sodio es superior en las legumbres en conserva. Mientras que minerales como potasio, calcio, hierro y fibra no están tan presentes como en las legumbres secas. La ausencia o presencia de los nutrientes en este alimento en bote recaen en el proceso de cocción por el que es sometido antes de sacarlo al mercado.
Dejando a un lado las diferencias nutricionales, los dos tipos de legumbres tienen ventajas y desventajas que puedes aprovechar para una alimentación cargada de vitaminas y minerales. Por ejemplo, si tienes un trabajo que abarca la mayor cantidad de tu tiempo, las legumbres en conserva te podrán ayudar en la cocina ya que vienen listas para el consumo.
Al tener productos listos en porciones, tendrás la capacidad de preparar variedad de platos, para una cantidad definidad de personas. Incluso, la compra estará más controlada, aunque nunca es suficiente tener legumbres en casa, pues los especialistas recomiendan su ingesta para mantener una dieta equilibrada, preferiblemente secas.
En el caso de las legumbres frescas, te dan la opción de controlar la cantidad de sodio. Al ponerlas en remojo y durante su cocción, se disminuirá un poco el porcentaje de minerales, sin embargo sigue siendo mayor que en su competencia. El resto de sus nutrientes se mantienen siendo un alimento muy saciante. También son de baja densidad energética.
Al preparar legumbres secas, puedes tener control total sobre su nivel de cocción, además de poder utilizar otros componentes naturales. Es decir, realizarás el proceso desde cero con el objetivo de garantizar un alimento completamente natural. No quiere decir que las legumbres en conserva no lo sean, pero algunas personas prefieren tener máximo control sobre los componentes de sus alimentos.
Manten una alimentación sana con las legumbres
Si eres de las personas que se pregunta cuál de las legumbres ofrece el mayor porcentaje de nutrientes, la respuesta no pudiera ser del todo definitiva. En conserva, duplica el aporte calórico, además del sodio que ya mencionamos. Secas, también tienen cierta pérdida de micronutrientes en el proceso de remojo y cocción. Sin embargo, sigue teniendo menor cantidad de sodio.
En vista a estos aspectos y teniendo en cuenta el valor nutricional de cada una de ellas, las legumbres secas son la mejor opción para una alimentación sana. Te ayuda a cuidar la salud general del organismo. Puedes prepararlas bajo supervisión, controlando los elementos añadidos y adaptándolas a tu gustos y preferencias.
Las legumbres en conservas también son benficiosas, especialmente si el tiempo juega en tu contra. No obstante, el consumo debe ser de forma ocasional, pues es un alimento cargado de sodio y calorias que pocas veces son favorables. Para reducir el porcentaje de sodio lava las legumbres con abundante agua y déjalas escurrir.