Con la llegada del buen tiempo, empiezan a aparecer las prisas por ponernos en buena forma. En las dietas de reducción de peso, las prisas no son nada aconsejables si lo que queremos son resultados saludables y duraderos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda seguir la dieta Estocolmo, un sistema de alimentación de origen nórdico aplaudido por el organismo, por responder a unos buenos hábitos nutritivos y conseguir resultados estables y duraderos.
¿En qué consiste la dieta Estocolmo recomendada por la OMS?
La dieta Estocolmo se basa en alimentos frescos como la fruta de temporada, las hortalizas de raíz y pescado azul, salmón principalmente, ya que, se puede deducir por su nombre que esta compuesta por los principales alimentos de la gastronomía nórdica. También incluye cereales integrales, legumbres, aceite de colza, frutos secos y carnes magras. Además, evita alimentos procesados y con alto contenido en azúcar y sal refinados.
Se trata de una dieta muy saludable y recomendable cuando buscamos resultados relacionados con la pérdida de peso, debido a que abarca una amplio abanico de nutrientes como un alto contenido en antioxidantes, vitaminas y grasas saludables. Al mismo tiempo elimina alimentos innecesarios para el organismo como la bollería industrial.
Alimentos y nutrientes que se han ganado la recomendación de la OMS
Los alimentos de los países del norte de Europa tienen grandes aportaciones nutritivas que se complementan con otros alimentos que no son necesariamente autóctonos. Entre los alimentos que se identifican con la identidad gastronómica de Estocolmo y otras ciudades nórdicas se encuentran los mariscos, los pescado grasos, el aceite de colza, algas, algunas aves y frutas y verduras de la región.
Esta lista de alimentos se complementa en la dieta Estocolmo con legumbres, avena, granos enteros, frutos secos y algunos productos lácteos bajos en grasas.
Esta gama de alimentos tienen aportaciones nutricionales tan saludables como los antioxidantes, presentes en las frutas y las verduras o las grasas buenas como el omega 3, de la que el pescado azul es la principal fuente natural de esta dieta, aunque también está presente en otros alimentos como los frutos secos.
Esto tiene importantes beneficios sobre la salud como la disminución del riesgo de sufrir alguna enfermedad cardiovascular o cerebrovascular, gracias a la reducción de los niveles de colesterol. El aporte de proteínas de los cereales y el pescado son también una estupenda fuente de energía además de un nutriente imprescindible en la regeneración de los tejidos.
La dieta Estocolmo evita el efecto rebote
Aunque sea utilizada habitualmente como dieta de reducción de peso, en realidad se trata de un hábito de alimentación saludable para cualquier persona.
Se trata de una dieta muy eficaz para mantener un cuerpo sano y en forma de manera regular. Cuando las personas que buscan reducir su peso, comienzan a seguirla, no obtienen resultados inmediatos, poco a poco se cuerpo va cambiando hacia un estado más saludable hasta que no necesita perder más peso.
A partir de ahí, esta forma de alimentación mantiene un peso adecuado. Se evita así el temido efecto rebote frecuente en dietas milagro, que se da cuando al abandonar la dieta recuperamos rápidamente el peso perdido. En algunos casos el aumento de peso del rebote supera la pérdida de la dieta.
