Descansar y dormir bien por la noche es esencial si queremos afrontar el día con energía y fuerzas renovadas. Pero, por desgracia, los problemas a la hora de dormir por la noche son algo más que habitual dentro de nuestra sociedad.
El insomnio, las pesadillas o tener sensación de no haber descansado son alguna de las quejas más comunes con las que nos encontramos cuando preguntamos a las personas que tal duermen. Y probablemente te encuentres dentro de este amplio grupo.
Pero no te preocupes, hoy vamos a ayudarte a conseguir que duermas mejor gracias a 9 rutinas muy sencillas de realizar. Continúa leyendo y las descubrirás.
8 hábitos cruciales para conseguir dormir mejor
Dormir es una de las actividades indispensables para los seres humanos, al menos si queremos tener una vida plena y feliz. Y es que el sueño es una de las cosas que más afecta a nuestro estado anímico, por eso no descansar correctamente puede convertirse en un auténtico problema.
Existen ciertos alimentos que nos ayudan a dormir mejor y pueden contribuir a un buen descanso. No obstante, lo verdaderamente importe es tener una buena higiene del sueño.
A continuación te explicamos cómo conseguirla con 8 sencillas pautas que puedes incorporar en tu día a día.
1. Evita los líquidos antes de acostarte
Las personas con problemas de insomnio suelen tener una característica común: se levantan en repetidas ocasiones durante la noche. Esto puede deberse a que no logran conciliar el sueño o, en ocasiones, es porque tienen que ir al servicio.
Por eso es importante restringir el consumo de bebidas al menos dos horas antes de que nos vayamos a dormir. De lo contrario, las ganas de orinar podrían despertarnos por la noche haciendo que nos desvelemos.
2. Practica actividad física
El deporte es una de las actividades que más beneficia a nuestro organismo y, en el caso del sueño, no podía ser menos. Nos ayuda a liberar tensiones, a ejercitarnos y también reta a nuestro cuerpo, haciendo que lleguemos a la noche más cansados y preparados para un descanso reparador.
No obstante, debemos tener cuidado con las horas a las cuales practicamos deporte, ya que también pueden activarnos en exceso y hacer que descansemos peor.
Por eso es fundamental que no hagamos deporte pasadas las 20 h o, en caso de que lo hagamos, que optemos por aquellas actividades que favorezcan la relajación como puede ser el yoga o incluso el pilates.
3. Medita durante 10 minutos
La meditación es un arma muy poderosa para relajar cuerpo y mente, por lo que puedes usarla a tu favor para crear un estado idóneo que te permita dormir en profundidad.
Existen distintas aplicaciones que te ayudan a originar un proceso de meditación guiada para que te resulte más sencillo lograrlo. Tan solo tendrás que invertir 10 minutos y vas a ver como los beneficios te sorprenden.
4. Evita cenar demasiado
La comida es uno de los aspectos que influyen de manera directa en nuestro descanso, como ya ha demostrado más de un estudio. De esta forma, si tomamos una cena muy copiosa, es más fácil que a nuestro organismo le cueste digerirla y descansemos peor.
Mientras que si tomamos una cena ligera favoreceremos el descanso y conseguiremos dormir mejor. Por eso es recomendable optar por verduras, fruta u otras opciones sanas y sencillas de realizar.
5. Di adiós a la cafeína y el alcohol
Muchas veces cuando llega la noche decidimos darnos un capricho y solemos optar por los refrescos o las bebidas alcohólicas. Estas, además de ser perjudiciales para nuestro organismo por otros motivos, también pueden provocar que nos despertemos por la noche y estemos más activos.
En el caso de la cafeína es porque contiene xantinas, una sustancia que provoca nerviosismo y no favorece en ningún caso la relajación. Mientras que, en el caso del alcohol, también se ha relacionado con la aparición de alteraciones del sueño.
6. La cama es solo para dormir
Cuando hablamos de la higiene del sueño, una de las primeras indicaciones que se hace al respecto es que debemos utilizar la cama única y exclusivamente para dormir. Es decir, debemos tratar de evitar hacer otras actividades habituales de nuestro día a día en ella, ya que podemos confundir en nuestra mente.
Si asociamos nuestra cama con un proceso de descanso y relajación como debería ser el hecho de dormir, nos va a resultar mucho más sencillo que tengamos ese estado en el momento de irnos a la cama. Por eso es tan importante que dejes esta habitación solo para tu descanso.
7. Controla la temperatura
El calor puede ser un claro problema a la hora de descansar correctamente porque puede inhibir el sueño haciendo que nos despertemos con más facilidad. Lo mismo puede ocurrir en el caso del frío.
Por eso es crucial que mantengas un control adecuado de la temperatura de tu habitación si estás buscando dormir en profundidad. Es decir, en caso de que tengas frío, puedes incorporar elementos que caldeen la habitación antes de acostarte para que tenga la temperatura adecuada.
Mientras que si hace excesivo calor, lo mejor es que ventiles la habitación con regularidad para que esta se mantenga fresca y el ambiente no esté cargado.
8. No te pongas nervioso
Finalmente, otro de los aspectos que debemos controlar si buscamos obtener un mejor descanso es nuestra propia mente. Y es que, como bien sabrás, cuando comienzan a surgir los problemas para dormir, una de las cosas que ocurre a su vez es que comenzamos a ponernos nerviosos.
Esto ocurre porque comenzamos a anticipar lo que va a ocurrir si no conseguimos dormirnos: estaremos más cansados en el trabajo, vamos a tener problemas anímicos, etc. ¿La consecuencia? Estos nervios van a hacer que nuestro organismo se active y cada vez va a ser más complicado que nos durmamos.
Por eso es esencial que controlemos nuestra mente y busquemos la forma de relajarnos. Puede ser usando la meditación o con otro tipo de técnicas que favorezcan la relajación, como las respiraciones diafragmáticas.
Esperamos que estas pautas te hayan servido para conocer un poco mejor cómo funciona el sueño y saber qué rutinas debes tener si quieres dormir mejor.