El mundo de la alimentación y el consumo y empezamos a ver cosas que parecen sacadas de una película de ciencia ficción de finales de los ochenta. Los experimentos ya han empezado y un menú propio de Desafío Total o Demolition Man podrían hacerse realidad en poco tiempo.
La comercialización de carne ‘artificial’ es uno de los hitos en alimentación y la idea de no tener que sacrificar animales para comer carne. Los últimos informes han sido reveladores y varios países ya disponen de carne artificial en los estantes. La llegada a Europa podría estar próxima y la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha publicado una serie de aclaraciones sobre este producto y su llegada a nuestros supermercados.
La OCU y lo que necesitas saber sobre la carne artificial
la OCU ha dado un paso al frente para informarnos sobre una auténtica revolución culinaria: la carne de laboratorio. ¿Podremos encontrar pronto productos artificiales en nuestro supermercado? La respuesta es sí. Aunque el organismo ha aclarado que estos alimentos aún no han llegado a Europa.
Aunque por el momento no necesitamos inspeccionar cada ingrediente para asegurarnos de que sea de origen animal, los avances científicos y los desafíos en el sector agrícola nos llevan a cuestionarnos si esta distopía futurista se convertirá en nuestra realidad.
Una solución a la falta de abastecimiento de carne
Los países afectados por el desabastecimiento en sus supermercados están recurriendo a la carne artificial para suplir la carencia. En Europa, donde aún no ha llegado este avance, una empresa ya ha solicitado la aprobación para comercializarla. Pero, ¿han pasado estos productos los exámenes y controles necesarios? ¿Cuáles son los riesgos de esta nueva era de alimentos producidos en laboratorios?
La OCU ha investigado a fondo para aportar luz sobre las dudas y lo que aún no sabemos de la producción de carne artificial. Los procesos, los beneficios y los puntos débiles de este nuevo producto han sido desvelados para aclarar en lo posible toda la incertidumbre que rodea al mundo de los alimentos sintéticos.
La seguridad en el consumo de carne artificial es la principal preocupación
Es la primera reacción al oír hablar de un futuro con carne artificial en nuestra dieta: ¿es seguro consumir este tipo de carne? La seguridad en el sector alimenticio es primordial, y el proceso de producir carne artificia ha generado cierta incertidumbre entre expertos. La extracción, aislamiento y purificación de células animales, junto con la adición de los compuestos necesarios, son pasos clave en este proceso meticuloso y complejo.
Los laboratorios pioneros en la producción de carne sintética siguen un proceso en cuatro pasos: selección, aislamiento y preparación de las células, multiplicación celular en biorreactores, extracción de tejidos o células y el procesado del producto final. Aunque en teoría debería ser un proceso seguro y automatizado, la práctica ha revelado 50 riesgos asociados directamente con la carne artificial, según expertos de la OMS.
¿Cuáles son los riesgos en el consumo de carne artificial?
Entre los riesgos identificados, destacan la presencia de materias extrañas, medicamentos veterinarios, toxinas microbianas, aditivos, residuos químicos, alérgenos, microplásticos y patógenos. Todo un abanico de amenazas para la salud que, si no se controlan adecuadamente, podrían dirigirnos, según temen los expertos a una nueva pandemia con origen alimentario a gran escala. Algo que ya nos suena.
Es importante señalar que la carne artificial todavía es un terreno poco explorado, y la investigación y el desarrollo continúan en la fase inicial. Quedan muchos avances por realizar, y mucha esperanza en un modelo de alimentación mejor para el medio ambiente que acabe con el temor a una forma de alimentación que podría ser, lejos de una amenaza, una ventaja para nuestro futuro.
La OCU advierte también sobre la identificación de nuevos peligros derivados del uso de tecnologías, materiales e ingredientes en la producción. Los contaminantes físicos, químicos o biológicos podrían introducirse a través de los compuestos añadidos en el medio de crecimiento de las células, como aditivos, factores de crecimiento o biotintas.
Pese a los riesgos, no debemos perder de vista que la carne de laboratorio representa un emocionante avance científico y alimentario, pero aún quedan desafíos que afrontar y responsabilidades que asumir. A medida que la tecnología y los conocimientos evolucionen, será fundamental garantizar la seguridad y calidad de estos nuevos productos para que podamos disfrutar de una alimentación sostenible y saludable en el futuro.