Los accidentes son un mal que está presente diariamente en nuestra sociedad y los de tránsito llevan la batuta cuando de ellos se trata, además existe un factor desencadenante y determinante de estos accidentes y es que en términos porcentuales el alcohol se encuentra como el acompañante de hasta el 50 % de ellos según la Dirección General de Tráfico (DGT). Conducir bajo los efectos del alcohol sin lugar a dudas genera alteraciones en el normal comportamiento frente al volante y disminuye o afecta la totalidad de las capacidades psicofísicas para lograr llevar a cabo una conducción que pueda considerarse segura. La solución es no consumir alcohol mientras manejas, pero ¿es posible que existan recetas mágicas o trucos para evadir los controles de alcoholemia?.
La responsabilidad del alcohol de modo legal sucede cuando das positivo en los controles y en dependencia de la tasa de alcohol acumulada, estudios han demostrado que 0.5 mg de etanol por litro de sangre duplica los riesgos de accidentes de tránsito y que solo 0.8 mg quintuplica este riesgo. Un análisis ha demostrado que más de un tercio de los conductores creen que existen trucos infalibles para engañar al control de alcoholemia luego de haber bebido, así que veamos a continuación de que se trata cada truco y colocarlos a prueba para determinar a ciencia cierta su posible veracidad.
Los posibles trucos para evadir el control de alcoholemia
Partiendo de la certeza de que el método más eficaz para salir ganador frente a los controles de alcoholemia es no haber ingerido ningún tipo de bebida alcohólica, por lo que es importante mencionar que muchos conductores suponen conocer la forma de engañar para evadir estos controles. De allí que a continuación se enumera una lista con los trucos más habituales utilizados por los conductores y que efectivamente se han puesto a prueba. ¡Ponte cómodo y alístate para conocer toda la verdad!
1. Lograr una rutina de ejercicios
Esta creencia basa su ideología partiendo de que mediante un forzado incremento de la circulación sanguínea es posible acelerar la eliminación del alcohol mediante el consiguiente proceso de la sudoración. Aunque es cierta la premisa, los niveles de eliminación serian mínimos y por lo tanto imperceptibles al momento de lograr la medición de los mismos.
2. Beber agua en abundancia
Al aumentar el consumo de agua evidentemente se verá incrementada la eliminación de este líquido mediante la micción, pero con el resultado de eliminar únicamente: “Agua”. El alcohol eliminado o arrastrado durante este proceso será de tan pequeña magnitud que los resultados finales carecerán de significancia en la medición.
3. Consumir caramelos o café
Si bien es muy cierto que muchas sustancias mantienen la plena capacidad de absorber ciertas cantidades de alcohol “mínimas” en la boca. Aunque de ninguna manera en un contexto que involucre a sistema de aire alveolar. Recuerda que estos controles necesitan que soples para lograr la correcta medición de tus niveles de alcohol, por lo que efectivamente queda descartada esta idea.
4. Usar medicinas especiales
Existen medicamentos que aseguran una efectiva reducción de los niveles de alcoholemia, estos supuestos reductores no mantienen una base científica en su accionar y por lo tanto carecen de validez científica. Además de exponer el cuerpo a sustancias de las cuales se desconocen posibles consecuencias nefastas para la salud. Adicionalmente y aunque la vitamina B es de uso frecuente para tratar los trastornos de alcoholismo, esta no ofrece una respuesta con efectos inmediatos, por lo que usarla no sería necesario.
5. Exhalar lento y sin fuerza
Además de acabar con la paciencia del agente que lleva a cabo el control, no conseguirás nada más. Estos aparatos para medir mediante el flujo de aire necesitan de una determinada presión (velocidad y cantidad) para una efectiva medición. Soplando despacio, la prueba no funcionará y tendrás que repetirla hasta que puedas alcanzar los requisitos de velocidad de aire. Esto podrá hacer que el agente pueda sancionarte directamente por interferir o por no prestar la necesaria colaboración en efectuar el control.
5. Un tiempo de espera de 2 horas
El alcohol en el organismo se va degradando con el paso del tiempo y es posible mantener una tasa de eliminación promedia de al menos 0.20 gramos por litro por cada hora. Es decir, si esperas al menos unas 5 horas podrás efectivamente ver un cambio en los resultados finales para este tipo de control. Evidentemente este truco está influenciado por otros factores externos como por ejemplo: el propio y personal metabolismo de la persona o la cantidad total ingerida de alcohol, por lo que una espera de 1 o 2 horas evidentemente no tendrá ningún tipo de resultado positivo.
6. Masticar césped, monedas, aceite y baterías
Al igual que el consejo de consumir café o caramelos, si logras consumir aceite o césped simplemente enmascararas o disimularas la presencia del alcohol en la boca, por lo que a nivel alveolar o respiratorio es imposible notar cambios. Además de resultar bastante desagradable y peligroso el hecho de comer o beber estas sustancias.
Aprueba el control de alcoholemia y cuídate de las sanciones
Las leyes son muy claras y precisas cuando de sustancias ingeridas y conducción se trata, el alcohol y las drogas pueden significar una penalización de hasta 6 puntos, por lo que evidentemente son una de las sanciones más duras. Adicionalmente de la sanción económica que también acarrean estas faltas de tráfico.
- Una tasa de alcohol superior a 0.50 miligramos por litro (alcoholímetro) generará una multa de 1.000 euros y pérdida de 6 puntos.
- Presencia de drogas en tu cuerpo al momento de conducir generará una sanción de 1.000 euros y la pérdida de 6 puntos.
- Negarse rotundamente a someterse a la prueba de alcohol o de drogas igualmente tiene como resultado una suspensión de 6 puntos y la penalidad de 1.000 euros.
- Una tasa de alcohol comprendida entre 0.25 y 0.50 mg por litro (alcoholímetro) dará razón a una multa de 500 euros y penalización de 4 puntos. (Existen varias reglas con menor tolerancia para conductores novatos y profesionales con licencias menores a 2 años de antigüedad).
Los trucos que te libraran de dar positivo en un control de alcoholemia
La (DGT) Dirección General de Tráfico ha sido clara y ha dado su versión al explicar que solamente existen 2 posibilidades reales de evitar dar positivo en los controles de alcoholemia (alcoholímetro) y estas son las de conseguir un descanso de al menos 6 horas entre la última copa y el control o el infalible truco de no beber nunca si tienes planificado conducir. De allí que sea posible asegurar que todos los demás trucos y consejos son parte de los mitos urbanos y del folklore propio de los conductores. Así que cuídate y recuerda que si manejas no tomes nada de alcohol, un consejo que no debemos cansarnos de deciros.